• hace 19 horas
Creo que lo último, lo que aflora hoy porque cada día salta una liebre, es que Ábalos posee también una casa en Colombia.

Y que quien era Nº-2 del PSOE y todavía aparece como titular en 265 cuentas bancarias vinculadas a su partido, puso un piso a nombre de su hija menor de edad, en cuanto empezaron las  detenciones de corruptos socialistas.

Les hablo del novio de Jésica porque es en esa cuadrilla quien ha mentido con más desparpajo, pero podría estar citando a Koldo, Garcia Ortiz, Santos Cerdán, Bolaños, Víctor Torres, el hermano músico, la falsa catedrática o cualquier otro facineroso.

Para el ciudadano común y corriente, que paga impuestos como un galeote y al que la Justicia deja tiritando a la mínima, debe resultar sorprendente que los protagonistas y beneficiarios de la tentacular trama engordaba desde hace siete años a la sombra de Sánchez, sigan todos en libertad.

No sólo hay un alud de indicios que apuntalan la tesis de que funcionan como una mafia, sino que se acumulan las pruebas de que no se corrompieron con el paso del tiempo en el poder, sino que llegaron a los cargos decididos desde el primer día a mangar y a llevárselo crudo.

Y siguen todos, de momento, tan panchos y disfrutando de la vida.

Cuando hace una década estallaron escándalos del PP, la lista de políticos que fueron detenidos y enviados a prisión fue considerable.

Bárcenas,  Zaplana, Ignacio González, Granados o Rato, este último con la humillación suplementaria de ser metido en un coche policial con empujón en la nuca, son solo algunos de los que dieron con sus huesos en la cárcel, tras ser arrestados en horario de máxima audiencia para que disfrutaran la cadenas de televisión.

Si entonces apreciaban los magistrados riesgo de fuga y de destrucción de pruebas, ¿por qué ahora no?

¿Eran mayores la cantidades de dinero defraudas en aquella época?

Todo los contrario.

¿Cambiaban de teléfono y borraban mensajes al unísono los  malandrines populares como hacen ahora los de PSOE?

No.

Mi padre, que era un hombre sabio, siempre me decía que no debe uno meterse con los médicos ni con los jueces, porque existe el peligro de acabar algún día en sus manos, y le voy a hacer caso.

No afirmaré que la Justicia no es igual para todos en España y que en los tribunales, como en los medios de comunicación, se aplican dos varas de medir y que al maleante de izquierdas o que se declara ‘progre’ se le trata como un marqués.

No voy a decir nada de eso, pero me quedo con las ganas.

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00:00Creo que lo último, lo que aflora hoy porque cada día salta una liebre, es que Ábalos
00:06posee también una casa en Colombia y que quien era número dos del PSOE y todavía
00:13aparece como titular en 265 cuentas bancarias vinculadas a su partido, puso un piso a nombre
00:23de su hija menor de edad en cuanto empezaron las detenciones de corruptos socialistas,
00:30inmediatamente, prácticamente el mismo día. Les hablo del novio de Jéssica porque es
00:36en esa cuadrilla quien ha mentido más y con más desparpajo. Pero podría estar citando
00:43a Coldo, al fiscal García Ortiz, a Santos Zerdán, al ministro Bolaños, a Víctor
00:50Ángel Torres, al hermano músico de Sánchez, a la falsa catedrática o a cualquier otro
00:56facineroso. Para el ciudadano común y corriente que paga impuestos como un galeote y al que
01:04la justicia deja tiritando a la mínima, debe resultar sorprendente que los protagonistas
01:13y beneficiarios de la tentacular trama engordada desde hace siete años a la sombra de Pedro
01:20Sánchez sigan todos en libertad. No solo hay un aludindicios que apuntaran la tesis
01:29de que funcionan todos estos como una mafia, sino que se acumulan las pruebas de que no
01:35se corrompieron con el paso del tiempo en el poder, sino que llegaron a los cargos
01:42públicos decididos desde el primer día, desde el primer minuto, desde el primer segundo
01:48a mangar y a llevárselo crudo. Y siguen todos, de momento, tan panchos y disfrutando
01:55del dinero y de la vida. Cuando hace una década estallaron escándalos del PP, la lista de
02:02políticos que fueron detenidos y enviados a prisión fue larga, considerable, importante.
02:11Bárcenas, Zaplana, Ignacio González, Granados o Rato, este último con la humillación
02:19suplementaria de ser metido en un coche con empujón en la nuca, ¿se acuerdan ustedes?
02:26Son solo algunos de los que dieron con sus huesos en la cárcel tras ser arrestados,
02:33por cierto en horario de máxima audiencia, para que disfrutaran de lo lindo las cadenas
02:39de televisión. Si entonces apreciaban los magistrados riesgo de fuga y de destrucción
02:47de pruebas, ¿por qué ahora no? ¿Eran mayores las cantidades de dinero defraudadas en aquella
02:57época? No, todo lo contrario. Cambiaban de teléfono y borraban mensajes al unísono,
03:05sincronizados los malandrines populares como hacen ahora los malandrines del PSOE. No,
03:13mi padre que era un hombre sabio siempre me decía que no debe uno con dos dedos de frente
03:21meterse con los médicos ni con los jueces porque existe el peligro de acabar algún
03:26día en sus manos y voy a hacerle caso. No afirmaré aquí que la justicia no es igual
03:32para todos en España y que en los tribunales como en los medios de comunicación se aplican
03:41dos varas de medir diferentes y que al maleante de izquierdas o que se declara simplemente
03:48progre se le trata como un marqués. Me voy a callar, no voy a decir nada de eso, pero
03:56me quedo, señores y señoras, con las ganas.

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