Mis padres nunca me perdonarán por lo que hice aquella noche

  • hace 5 años
Ella es Maya, y el primer concierto al que asistió se convirtió en un completo desastre... pero todavía recuerda esa noche con cariño.

A Maya realmente le gusta el metal. No es el único género que escucha, pero siempre ha disfrutado la música más pesada. Así que cuando se enteró del gran concierto que iban a dar en su ciudad, supo que TENÍA que ir. Se suponía que varias bandas geniales estarían allí, y ella había soñado con ir a un concierto así desde que tenía como 12 años.

Maya les dijo que iría a la casa de una amiga y que pasaría la noche allí. Su amiga se los confirmó. Empacó su bolso, pero en lugar de pijamas y cosas así, puso allí un atuendo que había preparado para el concierto. También tenía algo de dinero que había ahorrado desde su cumpleaños, ¡y fue suficiente para comprar una entrada!

Finalmente llegó al lugar, pero todavía tenía un problema: la seguridad no la dejaría pasar porque obviamente era demasiado joven para el concierto... Verás, la cosa era que tenía 15 años pero parecía que tenía 13... incluso con maquillaje y su chaqueta de cuero de talla grande.

¡Así que tuvo que pensar en algo! Vio parada afuera a una chica que se veía genial. Tenía el cabello púrpura y un anillo en la nariz, y Maya se le acercó y le preguntó si podía ayudarla a entrar al concierto. Ella se rió y dijo "¡Me caes bien!".

Le dijo al hombre de seguridad que Maya era su hermana y que cuidaría de ella, pero él todavía no estaba seguro. Entonces ella comenzó a rogar: "¡Vamos! Por favoooor", y él finalmente aceptó.

¡Por fin estaba adentro! ¡Y era tan genial! Había mucha gente y todos se veían tan diferentes, más interesantes que las personas normales. Se sintió como si estuviera en casa. Era muy ruidoso, por supuesto, y también bastante oscuro, ¡y Maya estaba tan abrumada por las emociones! Había algunas personas en el foso de Mosh, pero ella estaba demasiado asustada como para ir allí.
Y no podía ver a la banda porque ella estaba demasiado lejos, en la parte de atrás. Tuvo que saltar para verlos, y aún así apenas lograba ver un poco. Entonces, un sujeto la miró y le preguntó (bueno, más bien gritó en su oído) si quería sentarse sobre sus hombros. Aceptó felizmente y le dio su bolso a la chica que era su "hermana" falsa.

Fue un poco aterrador, pero también increíblemente genial, y era algo que ella había estado esperando toda su vida. Pensó que nada podía arruinarlo. ¡Pero estaba equivocada!

El sujeto saltó y se cayó. No se lastimó, pero se cayó sobre algo mojado, parecía la bebida derramada de alguien. Fue bastante desagradable, pero no fue suficiente para arruinar su noche. Así que giró para encontrar a su "hermana", pero ella no estaba por ningún lado.

Comenzó a mirar alrededor, tratando de encontrarla, pero era literalmente imposible buscarla en la multitud. Maya finalmente se dio cuenta de que ella le había robado su bolso y que ya no podría recuperar

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