Alfonso Rojo: “Sánchez, Begoña, la censura de prensa y la dictadura progre que se nos viene encima”
- hace 8 días
Cambiar de nombre a las cosas, no modifica su naturaleza: el plan de ‘regeneración democrática’ de Sánchez es un plan de ‘degeneración autocrática’.
El marido de Begoña, con el fango de la corrupción socialista llegándole a la boca, anunció este miércoles el gran salto hacia la ‘dictadura del progre’.
Ocurrió en el Congreso, en una respuesta a Rufián, quien rara vez no hace honor a su apellido.
El portavoz de la separatista ERC, que se agarra al sueldo de diputado y a las dietas en Madrid como guacamayo a la percha, propuso asaltar a la brava el CGPJ e instaurar en España una férrea censura de prensa.
Hasta detalló el majadero las multas que impondrán a los periodistas no adictos al régimen: de 14.000 a 150.000 euros.
El mecanismo para cerrarnos la boca a quienes no engordamos amarramos al pesebre de La Moncloa es siniestro, porque al Gobierno Frankenstein no le haría falta denunciarte, tirar del Código Penal o esperar la sentencia de un juez.
Por las buenas o mejor dicho, por las malas, te notificarán administrativamente la sanción y listo. Decidirán ellos quien infringe y cuánto le endiñan.
Entiendo que se podrá recurrir, pero hasta que se dilucida el asunto y si eres como Periodista Digital una empresa sin gerifaltes del Ibex detrás o alimentada por la publicidad gubernamental, vivirás económicamente al borde del abismo u obligado a cerrar, por falta de recursos.
¿Cuál fue la respuesta del hermano del músico, que cobra a espuertas de la Diputación de Badajoz, tiene mansión en Portugal y no tributa al Fisco?
Pues le dijo a su rufianesco socio que esté tranquilo, que de aquí a que acabe el verano presentará lo que llamó ‘un paquete de medidas de calidad democrática' para meter en cintura a los jueces y a los medios de comunicación, que desvelamos apaños de su parienta, marrullerías de su hermano y mangancias de Koldo, Ábalos, Armengol y compinches.
Por si no quedaban claras sus intenciones, las remachó a continuación, mientras su empleada Intxaurrondo le gratificaba con un lujurioso masaje en TVE.
Nosotros vamos a aguantar el tirón y a seguir dándole leña, aunque tengamos que llevarnos el periódico a las Chimbambas y emitir desde una plataforma petrolífera.
Estoy seguro de que otros medios de comunicación online, que se han negado a doblar la cerviz y roto el muro de silencio montado por la ‘Brunete Pedrete’, tampoco claudicarán.
Estoy convencido de que VOX plantará cara. Y espero que el PP no se acochine.
Pero a partir de ahí, todo es adaptación al paisaje, ablandamiento, circunspección, cautela y basura.
No se si saben que la paniaguada Asociación de Periodistas Parlamentarios, muchos de cuyos integrantes destacan por su entrega al PSOE, las ‘felaciones’ profesionales a Sánchez y la defensa del conglomerado Frankenstein, ha solicitado que se expulse del Congreso a Vito Quiles, porque el chaval actúa como jefe de prensa del dicharachero Alvise.
Por si les sirve para algo y al igual que hicimos cuando Iñaki Gabilondo, Maruja Torres y Rosa Vill
El marido de Begoña, con el fango de la corrupción socialista llegándole a la boca, anunció este miércoles el gran salto hacia la ‘dictadura del progre’.
Ocurrió en el Congreso, en una respuesta a Rufián, quien rara vez no hace honor a su apellido.
El portavoz de la separatista ERC, que se agarra al sueldo de diputado y a las dietas en Madrid como guacamayo a la percha, propuso asaltar a la brava el CGPJ e instaurar en España una férrea censura de prensa.
Hasta detalló el majadero las multas que impondrán a los periodistas no adictos al régimen: de 14.000 a 150.000 euros.
El mecanismo para cerrarnos la boca a quienes no engordamos amarramos al pesebre de La Moncloa es siniestro, porque al Gobierno Frankenstein no le haría falta denunciarte, tirar del Código Penal o esperar la sentencia de un juez.
Por las buenas o mejor dicho, por las malas, te notificarán administrativamente la sanción y listo. Decidirán ellos quien infringe y cuánto le endiñan.
Entiendo que se podrá recurrir, pero hasta que se dilucida el asunto y si eres como Periodista Digital una empresa sin gerifaltes del Ibex detrás o alimentada por la publicidad gubernamental, vivirás económicamente al borde del abismo u obligado a cerrar, por falta de recursos.
¿Cuál fue la respuesta del hermano del músico, que cobra a espuertas de la Diputación de Badajoz, tiene mansión en Portugal y no tributa al Fisco?
Pues le dijo a su rufianesco socio que esté tranquilo, que de aquí a que acabe el verano presentará lo que llamó ‘un paquete de medidas de calidad democrática' para meter en cintura a los jueces y a los medios de comunicación, que desvelamos apaños de su parienta, marrullerías de su hermano y mangancias de Koldo, Ábalos, Armengol y compinches.
Por si no quedaban claras sus intenciones, las remachó a continuación, mientras su empleada Intxaurrondo le gratificaba con un lujurioso masaje en TVE.
Nosotros vamos a aguantar el tirón y a seguir dándole leña, aunque tengamos que llevarnos el periódico a las Chimbambas y emitir desde una plataforma petrolífera.
Estoy seguro de que otros medios de comunicación online, que se han negado a doblar la cerviz y roto el muro de silencio montado por la ‘Brunete Pedrete’, tampoco claudicarán.
Estoy convencido de que VOX plantará cara. Y espero que el PP no se acochine.
Pero a partir de ahí, todo es adaptación al paisaje, ablandamiento, circunspección, cautela y basura.
No se si saben que la paniaguada Asociación de Periodistas Parlamentarios, muchos de cuyos integrantes destacan por su entrega al PSOE, las ‘felaciones’ profesionales a Sánchez y la defensa del conglomerado Frankenstein, ha solicitado que se expulse del Congreso a Vito Quiles, porque el chaval actúa como jefe de prensa del dicharachero Alvise.
Por si les sirve para algo y al igual que hicimos cuando Iñaki Gabilondo, Maruja Torres y Rosa Vill