La Fortaleza de Ansite es un enclave en el que confluyen la historia y la belleza del paisaje natural del sur de Gran Canaria. Un lugar que no debes dejar de visitar si te encuentras en la isla.
Estamos ante una impresionante formación basáltica localizada el barranco de Tirajana. La Fortaleza, como se conoce en la actualidad, es una suerte de farallón acompañado de tres grandes estructuras rocosas: la Fortaleza Chica, la Fortaleza Grande y Titana dominan el paisaje al sur de la cercana presa de Tirajana.
Este emplazamiento singular lo fue también a ojos de los antiguos pobladores de las islas. No en vano la Fortaleza de Ansite fue escenario de uno de los capítulos más célebres de la conquista de Gran Canaria. Fue allá por el año 1483 cuando el jefe canario Bentejuí se tiró al vacío desde lo alto al grito de “Atis Tirma”, evitando así caer prisionero.
Pero el protagonismo de la Fortaleza en la vida de los antiguos canarios no se circunscribe únicamente a este episodio épico. Un breve paseo por el lugar nos lleva a pensar que el entorno fue muy frecuentado en el pasado aborigen. La visibilidad que ofrece su posición elevada, su carácter inexpugnable o la innumerable cantidad de cuevas que salpican el entorno, han llevado a los estudiosos a concluir que la Fortaleza de Ansite debió ser poblado y lugar de importancia tiempo atrás. Restos de cerámica, cuevas sepulcrales y otros vestigios allí encontrados no han venido más que a corroborar esta idea.
Estamos ante una impresionante formación basáltica localizada el barranco de Tirajana. La Fortaleza, como se conoce en la actualidad, es una suerte de farallón acompañado de tres grandes estructuras rocosas: la Fortaleza Chica, la Fortaleza Grande y Titana dominan el paisaje al sur de la cercana presa de Tirajana.
Este emplazamiento singular lo fue también a ojos de los antiguos pobladores de las islas. No en vano la Fortaleza de Ansite fue escenario de uno de los capítulos más célebres de la conquista de Gran Canaria. Fue allá por el año 1483 cuando el jefe canario Bentejuí se tiró al vacío desde lo alto al grito de “Atis Tirma”, evitando así caer prisionero.
Pero el protagonismo de la Fortaleza en la vida de los antiguos canarios no se circunscribe únicamente a este episodio épico. Un breve paseo por el lugar nos lleva a pensar que el entorno fue muy frecuentado en el pasado aborigen. La visibilidad que ofrece su posición elevada, su carácter inexpugnable o la innumerable cantidad de cuevas que salpican el entorno, han llevado a los estudiosos a concluir que la Fortaleza de Ansite debió ser poblado y lugar de importancia tiempo atrás. Restos de cerámica, cuevas sepulcrales y otros vestigios allí encontrados no han venido más que a corroborar esta idea.
Category
🏖
Viajar