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00:00Buenos días, Francine Armengol se despidió prácticamente de la presidencia de Balears
00:04al grito de turismo es democracia. La democratización del turismo se entiende como un abaratamiento
00:11de Balears para que pueda ser disfrutada a precios de saldo por todo hijo de vecino,
00:16resultando en la masificación que padecemos. Sin embargo, no hemos venido a criticar, sino
00:20a aprovecharnos legítimamente de esta propuesta democratizadora. Para empezar, pueden reservarme
00:26una semana de cada uno de los meses próximos en Seychelles, Maldivas y Mauricio, por supuesto
00:31a un precio democrático equivalente al balear, y fines de semana también en hoteles Ritz
00:36a precios democráticos de 50 euros la habitación que pueden conseguirse en Balears. Espero
00:42la respuesta democrática, pero me temo que no llegará. A ver si resulta que el turismo
00:47y el dinero no son tan democráticos, a ver si resulta que la gente con dinero también
00:52paga un turismo de mayor calidad, que beneficia en primer lugar a los destinos de estos viajes
00:58poco democráticos. Por eso acierta Tolo de Yad, decano de la facultad de turismo de la
01:03universidad, cuando propone subir precios de su actividad aunque suponga la desdemocratización.
01:10La palabreja se las trae, pero no por complicada es menos cierta.