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En 1955 un levantamiento cívico-militar derrocó al gobierno de Perón. En ese momento, el General eligió el tiempo y no la sangre. En esta entrevista de 1968 revela su cambio de opinión.
A partir de la autodenominada "Revolución Libertadora" el país comenzó un proceso de pérdida de soberanía y el Pueblo argentino sufrió atentados constantes contra su libertad y sus derechos básicos. El derrocamiento del gobierno justicialista tuvo consecuencias nefastas en aquel momento imposibles de predecir.

Crédito: La Baldrich TV
Transcripción
00:00¿Cuál es la valoración autocrítica que le merecen los acontecimientos que culminaron con el derrocamiento de su gobierno?
00:07Bien, esta pregunta me la han hecho muchos. También me la he hecho yo, varias veces.
00:13Indudablemente nosotros conformamos un movimiento,
00:18que se llama el Movimiento Autocrítico,
00:21que se llama el Movimiento Autocrítico,
00:24que se llama el Movimiento Autocrítico,
00:27conformamos un movimiento que llegó al gobierno
00:32a través de una elección de las dos terceras partes,
00:36por lo menos del electorado argentino,
00:39que después se convirtió casi en un 70% del electorado.
00:43Nuestro compromiso era realizar las reformas revolucionarias que habíamos propugnado
00:49desde la revolución,
00:52mediante un sistema incruento.
00:55En consecuencia, cuando se produjeron los primeros actos de violencia subversivos
01:00por parte de algunos generales especialmente,
01:03nosotros debimos someterlos a la justicia.
01:06La justicia los condenó a prisión,
01:10y así quedó.
01:11Indudablemente, que si hubiéramos nosotros contestado a la violencia con la violencia,
01:16deberíamos haberlo fusilado. Quizá entonces se habría terminado todo.
01:20Así se llega hasta 1955, el 16 de septiembre, en que también algunos generales se levantan
01:27al frente de algunos sectores de tropas.
01:30Nosotros podíamos haber aplastado perfectamente bien eso.
01:34Yo recuerdo que en una reunión que tuve con mis asesores directos
01:37en la Secretaría de la Presidencia de la República,
01:40el general Sosa Molina, que era el secretario militar de la Presidencia,
01:46me dijo, si yo fuera Perón, pelearía.
01:50Yo le contesté, si yo fuera Sosa Molina, también pelearía.
01:54Pero sobre mis espaldas pesaban una grave responsabilidad
01:58que yo debía defender en ese momento con toda mi autoridad.
02:01Es así que yo no resolví hacer nada.
02:04Pensé que en la Nación nada hay superior a la Nación misma.
02:09Y frente a la posible depredación violenta
02:13de todas las que veníamos realizando durante nueve años,
02:17era preferible ceder.
02:19Yo, por mí, no quería llevar a la República a una guerra civil
02:24ni a una lucha cruenta.
02:26En consecuencia, lo que quedaba por realizar
02:30era simplemente dejar que ellos hicieran lo que quisieran.
02:33Si el justicialismo tenía razón, iba a volver.
02:37Y si no tenía razón, quizás era mejor que no volviera.
02:41Han pasado casi trece años desde ese momento.
02:46Indudablemente que el tiempo me ha hecho cambiar de opinión.
02:50Hoy creo que cometí un grave error.
02:53Yo debía haber decretado la movilización,
02:57comenzar por fusilar a todos los generales rebeldes
03:01y a todos los jefes y oficiales que estaban en la traición
03:04y dominar esa revolución violentamente
03:07como violentamente nos querían arrojar del poder.
03:10Si en este momento tuviera que hacerlo, lo haría.
03:14Porque ahora sé, lo que entonces no sabía,
03:18que esa gente llegó para hacer el más grave daño
03:22que se le pudo haber hecho al país.
03:24Yo nunca pensé que pudieran haber argentinos tan poco patriotas
03:28que podrían haber conducido el país a donde lo han conducido.
03:32Por eso, después de estos trece años,
03:35hoy me afirmo en la necesidad
03:37de haber exterminado al enemigo,
03:40porque no era el enemigo nuestro,
03:42era también el enemigo de la república.

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