Una esmeralda gigante de 137 kg fue subastada por 33 millones de dólares por la Hacienda Federal brasileña. Se trata de una de las otras cinco encontradas en la mina de Carnaíba, en Pindobaçu, Bahía.
La última piedra mide 60 cm de alto, 20 cm de ancho y 20 cm de profundidad.
Es una pieza valiosa tanto para coleccionistas, museos y universidades.
Sin embargo, esta no es la mayor piedra encontrada en el yacimiento. En 2001, la primera esmeralda encontrada pesaba 380 kg y estuvo valorada en 77 millones de dólares.
Inicialmente, llegó a Estados Unidos clandestinamente, lo que provocó que se iniciara una disputa legal. Finalmente, acabó en manos de un grupo empresarial estadounidense.
La segunda esmeralda se encontró en 2017, pesaba 360 kg y estaba valorada en 57 millones de dólares. Se vendió a un minero local de forma legal.
También se encontraron otras en el mismo lugar.
La última piedra mide 60 cm de alto, 20 cm de ancho y 20 cm de profundidad.
Es una pieza valiosa tanto para coleccionistas, museos y universidades.
Sin embargo, esta no es la mayor piedra encontrada en el yacimiento. En 2001, la primera esmeralda encontrada pesaba 380 kg y estuvo valorada en 77 millones de dólares.
Inicialmente, llegó a Estados Unidos clandestinamente, lo que provocó que se iniciara una disputa legal. Finalmente, acabó en manos de un grupo empresarial estadounidense.
La segunda esmeralda se encontró en 2017, pesaba 360 kg y estaba valorada en 57 millones de dólares. Se vendió a un minero local de forma legal.
También se encontraron otras en el mismo lugar.
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