"Díganles que me fui de gira y que luego regreso" es la frase que Jonnhy Laboriel pidió a sus seres queridos que dijeran para anunciar su partida, la cual se produjo la madrugada de este miércoles.
Juan José Laboriel López, nombre verdadero del intérprete de éxitos como Rock del angelito, Melodía de amor y Hiedra venenosa, pasó sus últimos momentos en casa, donde se despidió de sus familiares y amigos que lo acompañaron, debido a las complicaciones que padecía provocadas por el cáncer de próstata que le fue diagnosticado.
Al llegar el momento de su deceso, Johnny no sufrió y en palabras de su esposa Viviane Thirion, el también actor se encontraba lúcido.
"Vi mucha claridad en sus ideas, un rostro muy sereno, unos ojos muy brillantes", comentó Thirion, quien se encontraba acompañada de Ela y Juan Francisco Laboriel, en la agencia funeraria Gayosso Sullivan, donde el ex integrante de Los rebeldes del rock fue velado en la capilla 40 por la mañana y alrededor de las 6 de la tarde fue dirigido al crematorio para su incineración.
A lo largo del día, el cantante fue visitado por sus amigos, quienes acudieron a la funeraria a darle el último adiós. César Costa, uno de los primeros en llegar, expresó sus condolencias y a su vez se mostró sorprendido por la muerte del cantante que, al igual que él, perteneció a la ola del rock and roll de los años 60.
"Nunca lo vi de malas, nunca con intrigas, ni envidias, siempre fue muy generoso, fue un gran compañero. A Johnny lo conozco desde hace 54 años cuando yo estaba en los Camisas negras y él en Los rebeldes, entonces nos hemos cruzado infinidad de veces", dijo el músico en el funeral.
A la capilla llegaron diversos arreglos florales por parte de instituciones como el STUM (Sindicato Único de Trabajadores de la Música), así como amigos del cantante, entre los que destacaron Los locos del ritmo, los bailarines Roberto y Mitzuco, Raymundo Capetillo, Rafael Inclán, Memo Ríos, Jaime Almeida, Vincent, de los Rebel Cats, y Benny Ibarra padre.
"Ya quedamos pocos, cuídennos", apuntó Ibarra, quien no quiso hablar más y se apresuró para ver a su amigo, al igual que Alex Lora, quien llegó minutos antes de la misa de cuerpo presente que se le realizó a Laboriel.
"Él siempre tuvo una actitud positiva ante la vida; su buen humor y su forma de ser siempre serán recordadas, fue un gran showman y un gran rocanrolero", indicó Lora.
Angélica María, quien se encontraba en la conferencia de prensa del espectáculo La caravana del rock, que se presentará en octubre, expresó su sentir.
"Johnny era un hombre alegre, era un compañero maravilloso, me da mucho dolor, lo voy a extrañar toda mi vida", mencionó.
Del concierto que ofrecería en el Lunario para festejar los 55 años de carrera artística en enero, se tiene contemplado hacerle un homenaje.
Juan José Laboriel López, nombre verdadero del intérprete de éxitos como Rock del angelito, Melodía de amor y Hiedra venenosa, pasó sus últimos momentos en casa, donde se despidió de sus familiares y amigos que lo acompañaron, debido a las complicaciones que padecía provocadas por el cáncer de próstata que le fue diagnosticado.
Al llegar el momento de su deceso, Johnny no sufrió y en palabras de su esposa Viviane Thirion, el también actor se encontraba lúcido.
"Vi mucha claridad en sus ideas, un rostro muy sereno, unos ojos muy brillantes", comentó Thirion, quien se encontraba acompañada de Ela y Juan Francisco Laboriel, en la agencia funeraria Gayosso Sullivan, donde el ex integrante de Los rebeldes del rock fue velado en la capilla 40 por la mañana y alrededor de las 6 de la tarde fue dirigido al crematorio para su incineración.
A lo largo del día, el cantante fue visitado por sus amigos, quienes acudieron a la funeraria a darle el último adiós. César Costa, uno de los primeros en llegar, expresó sus condolencias y a su vez se mostró sorprendido por la muerte del cantante que, al igual que él, perteneció a la ola del rock and roll de los años 60.
"Nunca lo vi de malas, nunca con intrigas, ni envidias, siempre fue muy generoso, fue un gran compañero. A Johnny lo conozco desde hace 54 años cuando yo estaba en los Camisas negras y él en Los rebeldes, entonces nos hemos cruzado infinidad de veces", dijo el músico en el funeral.
A la capilla llegaron diversos arreglos florales por parte de instituciones como el STUM (Sindicato Único de Trabajadores de la Música), así como amigos del cantante, entre los que destacaron Los locos del ritmo, los bailarines Roberto y Mitzuco, Raymundo Capetillo, Rafael Inclán, Memo Ríos, Jaime Almeida, Vincent, de los Rebel Cats, y Benny Ibarra padre.
"Ya quedamos pocos, cuídennos", apuntó Ibarra, quien no quiso hablar más y se apresuró para ver a su amigo, al igual que Alex Lora, quien llegó minutos antes de la misa de cuerpo presente que se le realizó a Laboriel.
"Él siempre tuvo una actitud positiva ante la vida; su buen humor y su forma de ser siempre serán recordadas, fue un gran showman y un gran rocanrolero", indicó Lora.
Angélica María, quien se encontraba en la conferencia de prensa del espectáculo La caravana del rock, que se presentará en octubre, expresó su sentir.
"Johnny era un hombre alegre, era un compañero maravilloso, me da mucho dolor, lo voy a extrañar toda mi vida", mencionó.
Del concierto que ofrecería en el Lunario para festejar los 55 años de carrera artística en enero, se tiene contemplado hacerle un homenaje.
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