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00:00Mito discretísimo es el término que define al escritor uruguayo Mario Benedetti. Coherencia y
00:05sencillez, dos adjetivos para describir al autor, quien siempre se mostró reservado,
00:10incluso ante sus amigos, quienes lo acompañaron en su larga trayectoria.
00:13Amante de su único amor, Luz López Alegre, la mujer quien caminó a su lado durante 60 años
00:19y quien partió tres años antes que él fue la musa de su inspiración. Aún después de su muerte,
00:25dedicó a ella canciones que no canta y escribió poemarios a la eternidad con versos como
00:30A Luz que ya no está, pero estará siempre, en memoria de nuestros 60 años de buen amor.
00:35La presencia de Luz se hizo imprescindible para Mario. Su enfermedad de ausencia lo entristecieron
00:40tanto que la alegría que lo caracterizaba se fue desvaneciendo. Así lo recuerda Judith Parnas,
00:46esposa de Ricardo Elena, médico personal del escritorio.
00:49Y él iba a verla todos los días, pero eso lo afectó demasiado, me parece. Cambió,
00:57siempre estaba triste, que él era de chistes o de anécdotas. Después cambió.
01:07Además de ser un eterno enamorado, fue un gran amigo, fortaleció relaciones en el exilio y
01:13nunca dejó de empatizar con sus ideales políticos y la coherencia en su defensa de los derechos
01:18humanos. Así lo recuerda Ricardo Elena, gran amigo y médico personal.
01:23No se puede separar el escritor del ensayista, del político, del amigo,
01:32del hombre de la calle sencillo. Era uno solo.
01:37El mundo celebrará el centenario del uruguayo homenajeando el legado que deja y de quien,
01:43como lo recuerda su gran amigo Eduardo Galeano, en uno de sus grandes actos de modestia es que
01:48nunca se creyó Benedetti.