El presidente Donald Trump ha anunciado que EE. UU. se retira de la Organización Mundial de la Salud (OMS), citando su manejo de COVID-19, la supuesta parcialidad política y el fracaso de la reforma.
Esto marca la reactivación del esfuerzo de Trump en 2020 para salir de la organización, que el presidente Joe Biden revirtió a principios de 2021.
La orden ejecutiva detiene la financiación estadounidense a la OMS de inmediato, a pesar de la obligación legal de continuar el apoyo durante un año durante el proceso de retirada.
Los críticos, incluidos expertos en salud pública y legisladores, han advertido de que la medida socava los esfuerzos sanitarios mundiales.
El Dr. Ashish Jha, excoordinador de la respuesta al COVID-19 de la Casa Blanca, la calificó de «error estratégico», advirtiendo de que podría facultar a China para llenar el vacío de liderazgo dejado por Estados Unidos.
El profesor de Derecho de la Universidad de Georgetown Lawrence Gostin calificó la decisión de «cataclismo» y la describió como un golpe tanto para la salud mundial como para la credibilidad de Estados Unidos.
La expresidenta de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi calificó la decisión inicial de retirada de Trump de «acto de insensatez».
Otros, como el senador republicano retirado Lamar Alexander, argumentaron que abordar las deficiencias de la OMS se lograría mejor a través de la reforma, no del abandono.
Esto marca la reactivación del esfuerzo de Trump en 2020 para salir de la organización, que el presidente Joe Biden revirtió a principios de 2021.
La orden ejecutiva detiene la financiación estadounidense a la OMS de inmediato, a pesar de la obligación legal de continuar el apoyo durante un año durante el proceso de retirada.
Los críticos, incluidos expertos en salud pública y legisladores, han advertido de que la medida socava los esfuerzos sanitarios mundiales.
El Dr. Ashish Jha, excoordinador de la respuesta al COVID-19 de la Casa Blanca, la calificó de «error estratégico», advirtiendo de que podría facultar a China para llenar el vacío de liderazgo dejado por Estados Unidos.
El profesor de Derecho de la Universidad de Georgetown Lawrence Gostin calificó la decisión de «cataclismo» y la describió como un golpe tanto para la salud mundial como para la credibilidad de Estados Unidos.
La expresidenta de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi calificó la decisión inicial de retirada de Trump de «acto de insensatez».
Otros, como el senador republicano retirado Lamar Alexander, argumentaron que abordar las deficiencias de la OMS se lograría mejor a través de la reforma, no del abandono.
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