1.000 días después del inicio de la guerra en Ucrania, el Parlamento de la UE se reúne en sesión extraordinaria como muestra simbólica de apoyo a Ucrania.
El objetivo es subrayar que la UE sigue estando firmemente al lado de Ucrania y que el apoyo no decae ni siquiera después de 1.000 días.
El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, ha pedido a los aliados europeos que aumenten la ayuda militar a Kiev.
Lo que se necesita es «más ayuda, más dinero». «Debemos asegurarnos de que Putin no imponga su voluntad, de que Ucrania conserve la sartén por el mango en esta batalla», subrayó el secretario general.
Rutte calificó de «hecho terrible» que Rusia estuviera recibiendo apoyo de otros tres países: Corea del Norte, que suministraba tropas; China, que suministraba material militar y civil, e Irán, que suministraba tecnología militar.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, también se pronunció con motivo de los 1.000 días de guerra en un mensaje de vídeo y pidió que se redoblen los esfuerzos para lograr una paz justa.
También agradeció el apoyo de la Unión Europea, al tiempo que insistió en la imposición de duras sanciones a Moscú, en particular contra la venta de petróleo ruso.
«La paz es lo que más deseamos [...] [el Presidente ruso Vladimir Putin está] «empeñado en ganar esta guerra, no se detendrá por sí sola. [...] Cuanto más tiempo tenga Putin, peores serán las condiciones. Cada día es el mejor momento para presionar más a Rusia», afirmó Zelensky.
Queda por ver cómo se desarrollará la guerra tras el despliegue de soldados norcoreanos en el bando ruso y la entrega de armas de largo alcance de Estados Unidos a Ucrania.
Traducción realizada con la versión gratuita del traductor www.DeepL.com/Translator
El objetivo es subrayar que la UE sigue estando firmemente al lado de Ucrania y que el apoyo no decae ni siquiera después de 1.000 días.
El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, ha pedido a los aliados europeos que aumenten la ayuda militar a Kiev.
Lo que se necesita es «más ayuda, más dinero». «Debemos asegurarnos de que Putin no imponga su voluntad, de que Ucrania conserve la sartén por el mango en esta batalla», subrayó el secretario general.
Rutte calificó de «hecho terrible» que Rusia estuviera recibiendo apoyo de otros tres países: Corea del Norte, que suministraba tropas; China, que suministraba material militar y civil, e Irán, que suministraba tecnología militar.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, también se pronunció con motivo de los 1.000 días de guerra en un mensaje de vídeo y pidió que se redoblen los esfuerzos para lograr una paz justa.
También agradeció el apoyo de la Unión Europea, al tiempo que insistió en la imposición de duras sanciones a Moscú, en particular contra la venta de petróleo ruso.
«La paz es lo que más deseamos [...] [el Presidente ruso Vladimir Putin está] «empeñado en ganar esta guerra, no se detendrá por sí sola. [...] Cuanto más tiempo tenga Putin, peores serán las condiciones. Cada día es el mejor momento para presionar más a Rusia», afirmó Zelensky.
Queda por ver cómo se desarrollará la guerra tras el despliegue de soldados norcoreanos en el bando ruso y la entrega de armas de largo alcance de Estados Unidos a Ucrania.
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