• hace 4 semanas
El #DíaDeMuertos no es una negación del dolor sino una manera de enfrentarlo, de resignificarlo, de llevarlo a los altares. En México la vida y la muerte bailan juntas y nosotros los vivos quedamos en medio fingiendo que no sabemos que un día también nos tocará bailar.

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Transcripción
00:00La muerte es injusta, maldita y cabrona, porque no nos mata a nosotros, sino a los que amamos.
00:06Esto lo decía Carlos Monsiváis y en esa sentencia se encierra todo lo que representa
00:12la muerte para los mexicanos. La muerte en nuestra cultura no es sólo el final,
00:16sino el inicio de un diálogo eterno. La recordamos con amor, con nostalgia y con
00:22colores vibrantes al Día de los Muertos, como si intentáramos humanizarla,
00:26hacer las paces con ella. Como escribió Octavio Paz, para el habitante de Nueva York,
00:31de París o Londres, la muerte es la palabra que jamás se pronuncia porque quema los labios.
00:37El mexicano, en cambio, la frecuenta, la burla, la caricia, duerme con ella,
00:41la festeja. Es uno de sus juguetes favoritos y su amor más permanente.
00:46Esta celebración no es una negación del dolor, sino una manera de enfrentarlo,
00:51de resignificarlo, de llevarlo a los altares, a las flores de Cempasuchi,
00:56la alcopal y a las ofrendas. Nos permitimos hablar de la muerte no para temerla,
01:01sino para darle un lugar entre nosotros. Como afirmaba Juan Rulfo, nada más la muerte es eterna.
01:07Este reconocimiento de la brevedad de la vida nos hace entender que,
01:12aunque sabemos que la muerte es ineludible, vivimos en un pacto de olvido. Fingimos año
01:17tras año que tenemos tiempo de sobra, que la muerte es para otros, pero cuando llega el Día
01:22de Muertos, recordamos, nos encontramos con quienes ya se han ido y por un momento los
01:28hacemos eternos a través de nuestra memoria. Así en México la vida y la muerte bailan juntas,
01:33y nosotros los vivos quedamos en medio fingiendo que no sabemos que algún día
01:37también nos tocará bailar.

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