• hace 2 meses
El niño Marcelino, de tan solo ocho años, fue criado con mucho amor y cariño por los religiosos de la Hermandad de los Clerigos de San Jacinto, en el interior de Minas Gerais, y tiene el gran sueño de encontrar a su madre. Mariel se enamora de Orlando, pero el romance es boicoteado por Leonel, el padre de la joven. Victima de una trampa de Gilda, su madrastra, Mariel es incriminada por la muerte de su padre. Estando detenida, se entera que esta embarazada y, durante una fuga, da a luz a un niño, pero es separada del niño. Ocho años despues, Mariel es liberada y parte decidida a enfrentar a Gilda, probar su inocencia y encontrar a su hijo nuevamente.

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Transcripción
00:00¡Vine a hablar con el juez! ¡Necesito hablar con él! ¡Tengo que hacerlo!
00:05¿Cómo llegaron hasta aquí?
00:07Oye Justino, ¿tú trajiste a los muchachos?
00:09¡Ellos me lo pidieron! ¡Y como tenía clotilde!
00:12Quiero decir, la patrulla de la policía, pues yo...
00:15¡Pero es el fin del mundo!
00:17¿Cómo es posible?
00:19¿Un empleado de la policía pagado con dinero público usa una patrulla para una broma de niños?
00:26Marcelino, mi amor...
00:28Este no es lugar para ti. Deberías estar en la escuela estudiando.
00:31Y además, los niños no pueden entrar con el juez. ¡No está permitido!
00:36¡Ah, pero voy a hablar con el juez! ¡Nadie lo impedirá!
00:39¡Sí! Usted no puede impedirlo.
00:41Porque usted no manda, señor.
00:43Y dime, ¿quién eres tú? ¿Acaso el abogado de Marcelino?
00:46No, señor. Pero soy su amigo.
00:48Y un amigo es más que un abogado.
00:50Si usted quiere saber, Marcelino para mí es como mi hermano.
00:54Y un hermano nunca abandona a su hermano.
00:57No seremos como Cain y Abel nunca.
01:00Y si usted quiere adoptar a Marcelino, tendrá que adoptarme también.
01:04Y yo soy un desastre, se lo advierto.
01:07Le pongo polvo pica-pica a las personas,
01:10le pongo pimienta al café de los adultos,
01:13me cuelgo de las cortinas y me balanceo.
01:17¡Ey! ¡No te muevas, mocoso!
01:19Usted no se mueva. No le ponga las manos encima.
01:22¿Y quién es usted para impedirlo?
01:24¿Acaso olvida que estamos en un tribunal oficial?
01:27Usted no es autoridad aquí.
01:29Eso es absurdo. Es inaceptable.
01:31Absurdo es lo que tú estás haciendo, Hilda.
01:33Toda esta situación aquí con Marcelino,
01:35él está aterrorizado con la idea de que tú lo adoptes.
01:38Te equivocas.
01:40Él está así porque tú le llenaste la cabeza a Marcelino
01:43con mentiras y más mentiras contra mí.
01:45¡Silencio! ¡Basta ya con esa discusión!
01:48Está prohibido hacer escándalo en la sala de espera.
01:52¿Usted estará de acuerdo que un dibujo
01:54no sirve como prueba de que los padres cuiden bien a...
01:57¿Cuál es el nombre del niño?
01:59Su nombre es...
02:01Marcelino.
02:03Marcelino.
02:05Es un placer. ¿Cómo está usted?
02:07¿Quién dejó entrar a ese niño?
02:09Ay, por Dios santo.
02:11¿Dónde estaba usted?
02:13Retire al menor del recinto inmediatamente.
02:15Disculpe, Su Excelencia.
02:17Hubo una distracción afuera y fue difícil detener al niño.
02:21Ven conmigo, vamos.
02:23Solo saldré de aquí cuando hable con el juez.
02:25Debería estar en la escuela.
02:27¿O qué? ¿No va a la escuela?
02:29Voy a la escuela, señor juez.
02:31Solo huí para hablar con usted.
02:33Marcelino, por favor, quédate afuera.
02:36Ve con Mariel y con Orlando, por favor.
02:38Ya tengo ocho años y sé lo que quiero para mi vida.
02:41Su Excelencia, le pido que nos conceda cinco minutos
02:45para oír lo que Marcelino quiere decir.
02:48Vamos, no puedes estar aquí.
03:00Usted tiene mi vida entera en sus manos
03:04y no me quiere prestar cinco minutos de la suya.
03:10Tienes solo tres minutos.
03:13Se lo agradezco.
03:15Yo no quiero vivir con Doña Gilda.
03:18Yo quiero seguir en el convento.
03:20Mi madre me dejó allá porque sabía
03:22que los padres cuidarían bien de mí.
03:24Si hubiera querido, me hubiera dejado con Doña Gilda.
03:27Las madres siempre saben lo que es mejor para sus hijos.
03:30Pregúntele a su madre.
03:32Sucede que tu madre, lamentablemente,
03:35no está aquí, Marcelino.
03:38Y es por eso que tú necesitas otra madre.
03:42Creo que usted no entiende.
03:44Yo ya tengo una familia.
03:46Padre Patrón, Fray Papilla, Fray Juan y mis abuelos.
03:52Abue Tomás, Abue León, Abue Diógenes y Luis es mi hermano.
03:58Yo dudo que usted conozca un niño de ocho años más feliz
04:02que yo.
04:04Todos los días, Fray Papilla, me da avena, leche de la cabra
04:08Sofía, una yema de huevo, y le hace unas galletas que...
04:12Tu tiempo está corriendo.
04:14El Abue León me cuenta historias para dormir,
04:17Abue Tomás juega dominó conmigo.
04:20Voy a extrañar hasta los regaños del Padre Severo.
04:24Y también las quejas de Abue Diógenes.
04:27¿Usted conoce a un niño que vaya a la escuela
04:30en caravela?
04:32¿Caravela?
04:34Sí, la caravela es una bicicleta con un carrito atrás.
04:38Fray Juan la hizo.
04:40Exactamente, Fray Juan construyó este vehículo para llevar
04:43a Marcelino a la escuela, Su Excelencia.
04:45¿Ahora entiende por qué quiero tanto seguir en el convento?
04:49Marcelino, no es tu culpa.
05:01¿Por qué insiste en adoptar a un niño que lo necesite?
05:05¿Por qué insiste justo conmigo?
05:08Que ya tengo una familia.
05:10Sé que ella no me quiere de verdad.
05:12Ella es falsa, es mala.
05:15Estoy segura de que es una bruja.
05:18Ella es muy mala.
05:20Le tengo mucho miedo.
05:22Marcelino, no es tu culpa.
05:24¿Por qué insiste en adoptar a un niño que lo necesite?
05:28Le tengo mucho miedo.
05:29Marcelino, ya te dije más de mil veces, hijo, que...
05:37Los adultos no lo creen, pero lo sé.
05:40Ya escuché lo suficiente.
05:42Pueden salir todos ahora.
05:45¿Va a dejar que esa bruja me aleje de los padres?
05:48Marcelino...
05:49Marcelino, ven con nosotros.
05:50Vamos, hijo mío.
05:51Ven.
05:58Ven.
06:18¿Cómo les fue en la audiencia?
06:20¿El juez ya dio su verdicto?
06:22Aún no, pero Marcelino logró hablar con él, ¿no?
06:25El licenciado se lo pidió,
06:27y el juez me dejó hablar tres minutos.
06:30Muchas gracias, Julio.
06:32Ustedes seguramente piensan que el tribunal es un circo.
06:36Oigan...
06:41...se va a llevar una muy mala impresión.
06:44Y con toda razón.
06:45Le dije que estoy muy feliz en el convento
06:48y que me gusta todo, todo, todo lo que hay ahí.
06:51¿Qué fue lo que él dijo?
06:52Nada.
06:53Él no dijo nada.
06:54Creo que el hecho de que Marcelino haya huido de la escuela
06:58y entrado así de repente en la sala del juez
07:00no nos ayudó en nada.
07:02Es evidente.
07:04Eso solo prueba que usted y los otros padres
07:07no supieron educar a Marcelino.
07:10Él no sabe obedecer.
07:12No puedo creer que mañana estaremos en Río de Janeiro.
07:15Voy a tener la oportunidad de mostrarte la maravillosa ciudad.
07:19Ave María, yo ya quiero llegar a Río de Janeiro.
07:26¿Pero por qué esa línea de preocupación aquí, eh?
07:29Ven aquí, déjame besarla.
07:33¿Por qué?
07:34¿Por qué?
07:35¿Por qué?
07:36¿Por qué?
07:37¿Por qué?
07:38¿Por qué?
07:39¿Por qué?
07:41¿Qué pasa?
07:43Tengo el corazón angustiado por lo de Marcelino.
07:50¿Será que el juez ya escuchó a Fray Severo?
07:53¿Será que a esta hora ya tomó una decisión?
07:56Sí, los padres deben estar preparados.
07:59Mariel y Orlando también.
08:01Porque va a ser difícil ganarle en eso a Gilda.
08:05Ella siempre consigue todo lo que quiere.
08:09Usando los medios más sucios, si es preciso.
08:13Oye, ¿pero de qué estás hablando?
08:18Estoy hablando de la prisión de Mariel.
08:22De hacer que ella sea obligada a salir del convento, ya sabes.
08:30Si ella consiguió todo eso, alejar a Marcelino de los Padres Cielos, eso va a ser fácil para ella.
08:38Miserico.
08:49El señor juez quiere ver a las dos partes.
08:51¿Ya va a dar la sentencia?
08:54Solo pueden entrar las partes interesadas y sus abogados.
08:58Por favor.
08:59Se va a solucionar, ¿sí?
09:06Creo que arruiné todo.
09:07No.
09:08El juez se puso enojado.
09:09Y ahora viviré con Doña Gilda.
09:11No.
09:12¿No les dije que traerlos hasta aquí era un error?
09:15¿El juez se enojó?
09:17No resultó.
09:19Disculpa, Marcelino.
09:21Solo quería ayudar.
09:23Ay, mi amor, no tienes que ofrecer disculpas por nada, ¿eh?
09:26No fue tu culpa.
09:28Pensemos positivamente.
09:30¿Saben qué hay que hacer?
09:33Hay que cerrar los ojos y concentrarse solo en las cosas buenas que tú quieres que sucedan.
09:39Sin dejar que ningún sentimiento feo entre en nuestras cabezas.
09:43Solo cosas buenas.
09:45¿De acuerdo?
09:47¿Lo hacemos?
09:48Bien.
09:49Vamos.
09:50Cierren los ojos.
09:51Cierren los ojos.
09:52Eso.
09:59Solo yo no soporto la espera.
10:01Están tardando mucho.
10:02Debe haber sucedido algo.
10:03No es posible.
10:04Seguro.
10:05Algo bueno.
10:06No vamos a pensar lo peor.
10:08Cáspita.
10:09Sí, pero esa tardanza no es una buena señal.
10:12También lo creo.
10:13No quiero ni pensar que...
10:16Oigan, miren.
10:18Cielos.
10:20Vean.
10:21Por fin.
10:22Por fin llegaron.
10:26Por Dios.
10:27¿Qué tal?
10:29Pero ¿qué caras son esas?
10:31Dios mío.
10:32¿Qué pasó?
10:33Hermano Savero.
10:34Habla, habla ya.
10:36Salió la sentencia final.
10:37Hablen ya.
10:39Bueno.
10:40Sí.
10:41La sentencia salió.
10:43Demoró mucho, pero...
10:47¡Marcelino es nuestro!
10:48¡Sí!
10:49¡Sí!
10:50¡Marcelino es el mío!
10:51i¡Sí! i¡Sí!
10:53i¡Sí!
10:55i¡Sí!
10:57i¡Sí!
10:59i¡Qué noticia tan buena!
11:01i¡Esta es su casa!
11:03i¡Eres mi hijo!
11:05i¡Ven!
11:07i¡Ven!
11:09i¡Ven!
11:11i¡Ven!
11:13i¡Ven!
11:15i¡Ven!
11:17Déjame...
11:19ayúdate a sentar.
11:21Gracias.
11:23Despacio.
11:25Yo creo que debes tener
11:27mucha paciencia y cuidado, Darlene.
11:29Sí, sí, pero oye, estoy mucho mejor.
11:31Ya casi no siento ningún dolor.
11:33El Dr. Orlando es realmente
11:35un médico muy bueno.
11:37Sí.
11:39Estoy ansiosa por volver al trabajo.
11:41Juan, necesito saldar la pérdida
11:43que le di a Popo.
11:45Oye, su bicicleta quedó destruida.
11:47Él fue el que provocó el accidente.
11:49Habla bajo, ahí viene.
11:53Buenas tardes.
11:55Buenas tardes.
11:57¿Darlene? ¿Fray Juan?
11:59Vine a preguntar cómo estabas, Darlene.
12:01Ella se está recuperando muy bien, señor Gaspar.
12:03Y yo espero que usted
12:05pueda indemnizar al señor Popo
12:07por la pérdida de su bicicleta.
12:09No sé si usted sabe qué es eso,
12:11pero él tiene que esforzarse para ganarse la vida.
12:13Claro.
12:15¡Viva!
12:17¡Viva!
12:21Su bridez por Marcelino.
12:23Nuestro muchacho valiente que fue allá
12:25y convenció al juez de que su lugar es aquí
12:27con sus padres y abuelos.
12:29Es verdad.
12:31Sólo quisiera saber cómo fue que Justino
12:33aceptó llevar esos dos aventureros a Emperatriz.
12:35¿Por qué conozco a mi sobrino nieto?
12:37Un tal Manuel, ¿no?
12:39Es verdad, abuelo malito.
12:41Está usted en lo cierto.
12:43cierto, fue él quien convenció a Justino para que nos llevara. Pero no fui solo yo, tío Tomás.
12:49¿No? Anita, Clara y hasta Tobías, que es el hijo del delegado, también ayudaron.
12:55Yo quiero saber con detalles cómo estuvo esa escena, Fray Severo, cuéntenos.
13:01Ay, yo no, quien tiene que contarlo es nuestro joven abogado.
13:05Cuente, todos quieren saber.
13:06Bueno, el juez llamó a las partes para dar la sentencia. Fray Severo, el pobre,
13:11estaba seguro que la irrupción de Marcelino a la sala del juez había echado todo a perder.
13:15Considerando lo presentado, concluimos que el menor aquí citado demuestra ser saludable,
13:21feliz, muy sagaz y tener buena formación educacional y moral. Tampoco parece carecer
13:30de ningún recurso material y se muestra adaptado al ambiente del convento San Jacinto de los
13:36Clérigos, donde está bien protegido por su tutor legal y los demás religiosos del lugar,
13:42por los cuales parece tener gran afecto. Según esas consideraciones, y aunque la señora Gilda
13:49Rubio disponga de abundantes recursos materiales y alega un profundo deseo de brindarle al menor
13:55un amor materno, queda evidente que el cambio de tutela en este caso no se justifica, de manera
14:04que el menor Marcelino de Asís deberá permanecer bajo la custodia de su actual tutor, Fray Jerónimo
14:11Severo, es todo. Oiga, quisiera hacer una pulguita, se si una pulguita, para ver la cara de doña Gilda
14:19cuando oyó la decisión del señor juez. Estaba tan furiosa que perdió el habla, salió de la sala,
14:26echa un demonio. Que Dios la lleve muy lejos de Marcelino. Sí, pero Gilda no está acostumbrada a
14:32perdernos. Sí, pero se tiene que acostumbrar, porque esto es sólo el comienzo, no puede tener todo lo que
14:38quiere, y no debe pasar sobre los sentimientos de las personas. ¿Cómo es que pude haber perdido
14:44esa tutela? Dime, ¿dónde es que ese imbécil del juez tiene la cabeza? El niño huyó de la escuela,
14:49fue a Emperatriz en un auto de la policía, interrumpió una audiencia. Pues Severo no tiene
14:54el menor control sobre ese pequeño. No es el fin del mundo, Gilda. Claro que serías una tutora mucho
15:00mejor que ese padre. Y mi conversación con el juez fue tan buena. Yo sentí que él se convenció,
15:08la causa estaba ganada. Yo ya tenía todo planeado aquí en mi cabeza, cada etapa de mi plan, con
15:14Marcelino viviendo conmigo y María Elisa en la cárcel. Sería mucho más fácil atraer a Orlando
15:19hacia mí. Pero este niño logró hablar con el juez y arruinó todo. Ahora Orlando está mucho más
15:29distante de mí. No te rendirá, ¿cierto? Estoy segura que vas a encontrar otra estrategia. Ahora ya no soy
15:36capaz de pensar en nada. El deseo que tengo ahora es entrar en la ducha y gritar. ¿Qué es esto? Oigan,
15:46¿qué dineral es este? Era solo una bicicleta vieja. Exactamente por eso, señor Popo, quiero que usted
15:52se compre una bicicleta nueva. Es lo justo, señor Popo. Usted me prestó la bicicleta y el señor
15:58Gaspar me atropelló. Acepte. Bueno, si así lo quieren, que Dios se lo suplique. Ahora, disculpen,
16:04pero tengo que entrar. Sí, con permiso. ¿Vamos también, hija? No, espera. ¿Les parece un helado en la plaza?
16:13Gracias, pero no es necesario. Vamos, ma, por favor.
16:22Ay, pero qué helado más rico. Gracias. De nada. ¿Cómo se dice? Gracias. Me dio gusto ver al señor Popo
16:34recibiendo el dinero para una bicicleta nueva. Sí, era lo mínimo que podía hacer, ¿no es verdad?
16:42Bueno, en eso estoy de acuerdo.
16:47Creo que nunca sentí tanto miedo en la vida, de que algo peor te hubiera sucedido.
16:55Creo que nunca me lo perdonaría. Espero que tú también logres perdonarme algún día.
17:01¿Te está gustando el helado, Clarita? El de fresa es mi favorito. Pero fue un accidente.
17:17En accidentes no existen culpables, ¿no es verdad? Aún así, yo estoy aquí a su disposición para lo
17:24que necesiten, inclusive financieramente. Gracias, pero no se preocupe, señor Gaspar. Dentro de poco
17:30vuelvo a trabajar. Yo aceptaré otro helado. ¿Puedo comer otro? Claro que puedes. No, por favor. Hija, ve el tamaño de ese helado y aún no te lo terminas.
17:39Ah, y cuando te lo acabes, vamos a volver al hotel porque la señorita tiene tareas que hacer. No la contradigas, es enojona.
17:47Entiendo tu frustración. Sé cómo te sientes por no poder tener un hijo, pero acepta un consejo, Hilda. Visita algunos orfanatos y ve cuántos niños hay ahí que necesitan...
18:13Yo no quiero a cualquier niño. Yo quiero a Marcelino. ¿Por qué tanta obsesión por ese pequeño? Yo me apegué a él. ¿Será que es tan difícil que lo entiendas?
18:27Si tú lo dices. La verdad, Hilda, el código de menores permite una apelación. Tienes 30 días para contestar la sentencia del juez.
18:36¿De verdad? Entonces, ¿eso es lo que haría? Déjame terminar. El problema es que la sentencia del juez de Emperatriz señala que va a ser muy difícil quitarle a Frank Severo la tutela del niño.
18:50Eso solo sucedió porque Marcelino hizo un teatrito absurdo ante el juez.
18:55Pero a pesar de eso, solo saldrás victoriosa si logras probar que Frank Severo no tiene condiciones mínimas para tener la tutela del menor por ser moralmente incapaz.
19:06¿Quieres decir si tiene alguna mancha en su currículum? ¿Es eso?
19:11Sí. Lo que en el caso de Frank Severo, que es párroco y tiene una vida pública, lo creo improbable.
19:20Improbable, pero no imposible. Conocemos a Frank Severo desde que llegó a San Jacinto. ¿Y antes? ¿Qué se sabe de él?
19:31Tal vez yo logre descubrir algo malo que él haya hecho en el pasado.
19:36Realmente eres una contrincante obstinada, pero esa hipótesis es un poco fantasiosa, ¿no?
19:42¿He perdido alguna batalla?
19:47¿He dejado de conseguir algo que quisiera mucho?
19:52Con Marcelino no va a ser diferente.
20:01Ah, muy bonito. Los dos prófugos llegaron.
20:06Disculpe, profesora. Les prometemos no huir más. ¿Le parece bien?
20:12Escuchen bien. Voy a perdonarlos esta vez porque estoy feliz en verdad porque Marcelino seguirá en el convento.
20:20Ah, pero si ustedes se escapan de aquí de nuevo, yo voy a tener que castigarlo. ¿Entendido?
20:27Entendido, profesora.
20:30Bien. ¿Eventos de beneficencia?
20:33Sí. Si logro organizar aquí en la ciudad una serie de eventos con el dinero destinado a las obras del proyecto y divulgo eso por toda la región, lograré reunir ese dinero, Orlando.
20:45Inclusive, el primer evento podría ser en la inauguración del cine. Si Erick está de acuerdo.
20:51Ah, él lo estará. Estoy seguro.
20:53También pensé en pedirle apoyo al alcalde.
20:55Voy a pedir una reunión con él.
20:57De él ya no estoy tan seguro.
20:59No, pero la alcaldía no puede quedarse fuera, Orlando. Al final, el proyecto es un servicio de asistencia pública.
21:06Sí. Espero que se sensibilice.
21:09Bueno, me voy porque tengo que visitar a Darlene para saber si está mejorando.
21:26¿Cómo te va, Lucilia?
21:33Bien. Gracias.
21:36Estoy yendo a Emperatriz a hablar con el abogado encargado del caso del teatro.
21:40No, no, no.
21:42No, no, no.
21:44No, no, no.
21:46No, no, no.
21:48No, no, no.
21:50No, no, no.
21:52No, no.
21:53Estoy yendo a Emperatriz a hablar con el abogado encargado del caso del tío José.
21:56¿Fue por eso que mandaste robar las cartas de mi padre a doña María Eugenia?
22:00Ya te dije que no tengo nada que ver con el robo de esas cartas.
22:04¿Sí? Tal vez el ladrón tenía la manía de leer cartas ajenas.
22:08Y sale por ahí entrando a las casas de las personas a robar sus cartas.
22:12¿Hasta cuándo vas a renegar de tu propio padre, Orlando?
22:16Sí, porque pronto ese asunto se volverá público.
22:21¿Y entonces, querido?
22:24Mariel va a saber de quién eres hijo.
22:27Peor, ella va a saber que le mentiste todo este tiempo.
22:32¿Realmente confías en ese abogado?
22:35Porque lo que me parece es que estás construyendo castillos en el aire.
22:39De hecho, como de costumbre.
22:50Si tú piensas que te vas a librar de tu pasado para no perder a Mariel.
22:56Puedes ir olvidándote de eso.
23:00Pero le estoy diciendo que tenía cita para hoy.
23:04Pero nos tiene que decir algo.
23:07No, lamentablemente.
23:09Si ustedes vuelven después, tal vez yo tenga otra información.
23:13Desafortunadamente no dejó nada, no les puedo ayudar.
23:16¿Pero qué puedo hacer?
23:18¿Qué está sucediendo?
23:20Señora, el licenciado Pericles Lorenzo desapareció.
23:23Cerró su oficina y no dejó dirección.
23:25¿Usted es su cliente también?
23:29¿Cuál es su nombre?
23:31Lucilia Gobeya.
23:37Él dejó esto para usted.
23:44Estoy devolviendo las cartas que su tío le envió a su amante, Doña María Eugenia.
23:49Siento mucho informar que el caso ya prescribió.
23:52Y por eso no hay posibilidad de que usted recupere la herencia de su tío.
23:56Agradezco el pago por los servicios brindados.
24:04Desgraciado.
24:07¿Me permites?
24:08Claro.
24:10Ay.
24:15Como te dije, no se quebró nada.
24:19En unos días estarás completamente recuperada y podrás volver al trabajo.
24:24Qué bueno.
24:25Yo quería que te quedaras aquí, ma.
24:28Ay, mi amor.
24:29Pero si no trabajo, ¿cómo voy a conseguir dinero?
24:32Necesito comprar nuestra comida, tu ropa, tus juguetes.
24:36Oye, gracias a Dios tengo trabajo, hija.
24:39¿Pero y yo me voy a quedar aquí sola?
24:43Quizá puedes ir a jugar con Marcelino al convento.
24:46Y estar más cerca del padre Juan y de los otros padres.
25:01Abogado sinvergüenza.
25:03Abogado sinvergüenza.
25:08Se llevó todo mi dinero.
25:13¿Qué hago ahora?
25:18Tanto esfuerzo para nada.
25:25Entra.
25:26Entra.
25:30Te vi angustiada pasando por la entrada.
25:35¿Qué sucedió?
25:38¿Estabas llorando?
25:40Es que no me siento muy bien.
25:44¿Te peleaste con alguien?
25:46¿Fue a Orlando de nuevo?
25:48No.
25:51Es solo un manstal, ya pasará.
25:52Vi a Orlando hace poco, él estaba examinando a Darlene.
25:55Espera un segundo.
26:01Hola, Sonia.
26:03Cuando el doctor Orlando pase, no dejes que se vaya.
26:06Pídele que venga al cuarto de su prima.
26:08Gracias.
26:15No me tienes que empujar.
26:23Qué gentil eres.
26:26Esa es la prueba del crimen.
26:28¿Pero dónde está el resto de lo que robaste de la casa de Doña Verónica?
26:32Yo las vendí para comprar comida.
26:35Pero el collar nadie lo quiso aceptar.
26:38Yo no quería robar nada de valor.
26:40Es que cuando puse los ojos en el collar, no me resistí.
26:44¿No querías robar nada de valor?
26:46La carne es débil, señor.
26:48Ah, sí. Entraste a la casa de Verónica a pasear, ¿fue eso?
26:52Fui a hacer un trabajo, por encargo de una persona.
26:56¿Un trabajo? ¿Para quién?
27:02¿Te puedes retirar para que examine Lucilia?
27:08Claro.
27:10Lo que tú digas.
27:23¿Qué pasó, Lucilia?
27:30Orlando.
27:33El abogado, él...
27:35Él me robó el dinero.
27:39Se quedó con mi dinero y desapareció.
27:41Dios santo.
27:43Necesito tu ayuda, por favor.
27:45¿Mi ayuda? ¿Para qué?
27:47A cambio de tu ayuda,
27:48te daré una información preciosa
27:51que pueda exonerar a Mariel.
27:55Anda, empieza a hablar sin vergüenza.
27:57¿Qué trabajo es el que fuiste a hacer a casa de Doña Verónica?
28:00¿Y para quién?
28:02El trabajo era robar unas cartas.
28:04Yo fui y las tomé, pero vi el collar.
28:07¿Cartas?
28:09¿Pero quién te contrató para robar cartas?
28:11¡Habla!
28:13Fue la señora Mariel.
28:14¿Quién te contrató para robar cartas?
28:16¡Habla!
28:18Fue la mujer que trabajaba en la gaceta como fotógrafa.
28:21Esa mujer negra.
28:23Bonita vaya.
28:26¿Doña Lucilia?
28:28Sí, ese es su nombre, Lucilia.
28:30¿Qué cuento es ese de que Lucilia te ordenó ese trabajo?
28:33¿Y para qué una mujer como ella querría hacer algo así?
28:36Eso va a tener que preguntárselo a ella.
28:39¿Qué intentas ahora, Lucilia?
28:40¿Qué información tienes que puede ayudar a Mariel en el juicio?
28:43Hace una hora dijiste que ibas a ver al abogado
28:46segura de que lograrías la parte que crees que tienes aquí en el hotel.
28:52Él me aseguró que ganaría el caso.
28:55Ya deberías saber que no tienes derecho a nada.
29:00Y espero que despiertes de una vez
29:04de ese delirio de gran heredera.
29:07Orlando, no te preocupes.
29:08El abogado era un sinvergüenza.
29:11Él me embaucó y se quedó con mi dinero.
29:14¿Cómo lo iba a imaginar?
29:16La ambición te dejó ciega
29:19y tú caíste como una tonta.
29:22No quieres ver el gran peligro
29:25que es aliarte a Gilda.
29:27No quiero ni imaginar lo que te puede suceder
29:30si ella descubre quién eres
29:32y por qué te acercó a ti.
29:34No quiero ni imaginar
29:35si ella descubre quién eres
29:37y por qué te acercaste a ella.
29:39Yo sé bien de lo que es capaz.
29:43Pero eso no sucederá a descuida.
29:46Mi problema es mucho más importante ahora, Orlando.
29:50Tuve que pedir un préstamo al banco
29:52para pagar al abogado.
29:54Una cifra alta y yo no tengo cómo pagarla.
29:58No tengo cómo saldar esa deuda.
30:01Tú me tienes que ayudar.
30:03¿Y de cuánto es ese préstamo?
30:05A cambio te doy información importante.
30:07Dijiste que era información que puede exonerar a Mariel.
30:09En el segundo juicio.
30:12Lo juro.
30:14¿Qué información es esa?
30:16Yo escuché una pelea
30:19entre Gaspar y Gilda
30:21en la mansión.
30:26Gaspar dijo
30:28con todas las letras
30:29que fue ella quien asesinó a Leonel.
30:35Gilda mató a su propio marido, Orlando.
30:40Siéntese, por favor.
30:42Gilda, seguro usted supo del robo
30:44que hubo en la casa de doña Verónica
30:46hace poco tiempo.
30:48La ciudad entera lo supo.
30:50Naturalmente que lo supe.
30:53Inclusive,
30:55yo también lo supe.
30:56Inclusive,
30:58supe que el ladrón robó
31:00cierto collar de gran valor.
31:02Este de aquí,
31:04para ser más preciso.
31:11Ay, conozco bien esta joya.
31:16María Elisa
31:18tuvo el descaro de arrancarla de mi cuello
31:20el día de mi compromiso con Gaspar.
31:22Hasta donde sé,
31:24ese collar era de la madre de Gaspar.
31:26No era de María.
31:28Y si ella lo tomó de vuelta
31:30fue porque ella...
31:33Si usted no me vino a devolver el collar,
31:35¿por qué vino hasta aquí?
31:38Porque quien pagó al ladrón
31:40para entrar a la casa de doña Verónica
31:42y realizar el robo
31:44fue su secretaria,
31:46doña Lucilia.
31:49Espera, Lucilia.
31:51¿Estás segura de lo que dices?
31:54Lo escuché muy bien.
31:56Por Dios.
32:01Julio,
32:03Mariel y yo
32:07siempre estuvimos seguros
32:10que Leonel había sido asesinado
32:12por órdenes de Gilda.
32:16Pero nunca pasó por nuestra cabeza
32:18que hubiera cometido ese crimen personalmente.
32:23Es de temer la sangre fría de esa mujer.
32:27¿Me está diciendo que Lucilia,
32:29mi secretaria,
32:31ordenó el robo de este collar?
32:33No.
32:35Ella no quería propiamente el collar.
32:37El ladrón vio la joya
32:39al lado de otros objetos
32:41en la casa de doña Verónica
32:43y quiso robarla también.
32:45¿Pero entonces qué quería al final?
32:47Unas cartas que María Elisa había guardado.
32:49Cartas que fueron enviadas a su madre,
32:51doña María Eugenia.
32:53¿Cartas para María Eugenia?
32:54¿Qué interés tendría Lucilia
32:56en las cartas de la madre de María Elisa?
32:58Por Dios.
33:00Usted sabe muy bien
33:02que no me gusta nada que me engañen.
33:05Déjeme a Lucilia.
33:07Yo me encargo.
33:09Antes de que usted ponga sus manos en Lucilia,
33:11yo quiero descubrir
33:13qué es lo que está escondiendo,
33:15por qué ella se acercó a mí
33:17y qué interés tiene en esta amistad.
33:19Bueno,
33:21si es así, ya me voy.
33:22Muchas gracias por devolver el collar
33:24que María Elisa me robó a mí.
33:26Eso no lo puedo hacer, Gilda.
33:28En la investigación quedó registrado
33:30que atrapé al ladrón con ese collar.
33:32Tendrá que volver a las manos de su dueña.
33:34No.
33:36Usted va a soltar a ese ladrón
33:38que nunca atrapó
33:40y va a cerrar la investigación.
33:44Este collar es mío.
33:47¿Y nunca más se oyó hablar de él?
33:49¿Quedó entendido?
33:53¿Para qué es eso?
33:55El municipio ya tiene un hospital.
33:57La alcaldía no tiene presupuesto
33:59para desperdiciar
34:01en un servicio especial
34:03de atención a gestantes.
34:05Área de maternidad.
34:07¡No!
34:09Aquí, los niños, nuestros niños
34:11nacen en casa, como en cualquier lugar.
34:13Sí, yo misma tuve tres hijos
34:15en casa, con la partera.
34:17Sí, ningún problema.
34:19Y mis hijos están ahí
34:20y no me dejan mentir.
34:22Traes muchachotes divinos,
34:24lindos, saludables.
34:26Sí, pero sucede que no todas las mujeres
34:28tienen el privilegio y la suerte
34:30que usted tiene, doña Cándida.
34:32Muchas mujeres tienen problemas
34:34durante el parto y ellas acaban
34:36necesitando ayuda.
34:38Y cuando haya un problema,
34:40entonces se les lleva al hospital.
34:42¿Para qué necesitan tener un lugar
34:44solo para ellas?
34:46Porque para cuando llegan al hospital
34:48ya se están muriendo, alcalde.
34:50Una mujer y su bebé murieron
34:52en el hospital.
34:54¿Es verdad?
34:56Sí.
34:58¿Se murió? ¡Ay, pobrecita!
35:00Y así como ella, existen miles
35:02en todo el país, pero parece que
35:04nuestras autoridades no ven
35:06o no quieren ver ese problema.
35:08¿Saben por qué?
35:10Porque en su mayoría son mujeres pobres.
35:12Pero mujeres como yo o usted,
35:14doña Cándida, no podemos cerrar
35:16los ojos a esa situación.
35:18¿No está de acuerdo conmigo?
35:20Sí.
35:22Es un problema serio.
35:24Sí, de verdad.
35:26¿Tú sabías eso, Anselmo?
35:28Estoy hablando sobre vidas humanas.
35:31Madres y bebés que podrían ser salvados.
35:35Le traje un estudio
35:37sobre la mortalidad de infantes
35:39hecho por un médico aquí de Minas.
35:46Jesús, María y José.
35:48¡Ay, José!
35:50¡Anselmo!
35:52¡Qué dolor!
35:54De cada mil niños
35:56que nacen en el estado,
35:58sesenta mueren a la hora del parto.
36:00¿Quién podría imaginarse
36:02que tantos bebitos
36:04no vivirían por falta
36:06de asistencia, mi Dios?
36:08Es por eso que esa ala
36:10de maternidad y ese cunero
36:12son tan importantes para el hospital.
36:14Tienes que leer esto, Anselmo.
36:16El alcalde Anselmo
36:18no le dio importancia,
36:20pero logré sensibilizar
36:22a doña Cándida, Orlando.
36:24Orlando, solo doña Cándida
36:26va a conseguir que el alcalde
36:28libere un presupuesto
36:30para nuestro futuro proyecto.
36:32Espero que sí, Mariel,
36:34pero necesito hablar contigo sobre...
36:36Si el alcalde aporta algo de dinero
36:38y Erick y Verónica
36:40aceptan hacer esa inauguración
36:42de beneficencia, ¿ya pensaste, Orlando?
36:43Sí, quiero presentar el proyecto.
36:45¿Qué te parece?
36:47Mariel, qué bueno que ya estás aquí.
36:49¿Julio?
36:51Pensé que ibas a tardar
36:53en volver de la calle y fui a tomar un café.
36:55¿Qué estás haciendo aquí?
36:57¿Aún no se lo has contado?
36:59Mi amor,
37:01es que me encontré con Lucilia.
37:03¿Y qué pasó esta vez?
37:05Ella me contó una historia
37:07de una pelea entre Gaspar y Gilda
37:09y que en el calor de la discusión,
37:11Gaspar la amenazó
37:13con contarle a la policía
37:15que fue ella,
37:17fue Gilda
37:19quien asesinó a tu padre.
37:26Por Dios.
37:29No sé,
37:31no sé ni qué pensar.
37:35No es que yo fuera ingenua
37:37ni creyera que esa mujer
37:39tuviera escrúpulos, pero
37:41Gilda mató a mi padre
37:44y ella es alguien muy peligroso.
37:46Tú ya sabías eso.
37:48Lo sé, Orlando.
37:50Pero
37:52Lucilia puede estar inventando eso
37:54para sacar algún provecho de la situación.
37:56No, porque Lucilia no es nada confiable.
37:58Sabes muy bien eso.
38:00Es uña y carne con Gilda.
38:02De repente se pasa a nuestro lado
38:04y traiciona a su gran amiga.
38:06Hay algo detrás de esta historia.
38:08No puede ser.
38:10Yo pensé lo mismo.
38:11Pero estoy seguro
38:13que está diciendo la verdad.
38:15Ella escuchó esa discusión
38:17y descubrió finalmente
38:19quién es Gilda de verdad.
38:22Y todo este tiempo creímos
38:24que Gilda había mandado matar a mi padre.
38:26Sí.
38:29Pero fue ella misma
38:32con sus propias manos
38:35quien mató
38:37al hombre que hizo todo por ella
38:39la vida entera.
38:41Ella era un demonio como una reina
38:43que cumplía todos sus deseos, Orlando.
38:46Es una monstruosidad.
38:49Pero a estas alturas
38:51nada que vender Gilda
38:53nos debería sorprender.
38:55Exactamente.
38:57Y en el proceso de asesinato
38:59de tu padre, Mariel,
39:01consta que Gilda estaba en la inauguración
39:03de la fiesta del café concierto
39:05en el momento del crimen
39:07que estuvo ahí todo el tiempo.
39:09Ese falso testimonio
39:11nosotros dedujimos
39:13que ella había ordenado el crimen
39:15y no que lo ejecutó.
39:17Porque lo más natural en un caso así
39:19es que hubiera ordenado el crimen
39:21a un tercero.
39:23Como seguro lo hizo
39:25ordenando el asesinato de Ronaldo
39:27por miedo a que él dijera
39:29que mintió por órdenes suyas
39:31para incriminarme.
39:33Eso es verdad.
39:35¿Cómo vamos a probar
39:37que Gilda es la asesina de mi padre?
39:39Lucilia está dispuesta
39:41a dar la palabra de Lucilia
39:43contra la palabra de Gilda.
39:45Gaspar también puede negar todo.
39:47Él es cómplice, ¿no?
39:49Pero el testimonio de Lucilia
39:51puede ser importante
39:53con una condición,
39:55que consigamos una prueba
39:57o un testigo de que Gilda mintió
39:59diciendo que estuvo todo el tiempo
40:01en el café concierto.
40:03Necesitamos encontrar a alguien
40:05que la haya visto saliendo del café concierto
40:07momentos antes del crimen
40:09o quizá volviendo después
40:11contra Gilda.
40:13Si la investigación está a cargo
40:15del delegado Albuquerque
40:17que está en manos de Gilda
40:19por nuestra propia cuenta.
40:21Así como hicimos
40:23cuando fuimos a Sao Paulo
40:25a investigar su pasado.
40:27Sí.
40:29¿Estás mejor?
40:31¿Orlando te examinó, Lucilia?
40:33¿Te medicó?
40:35Era solo una indisposición.
40:37Presión baja.
40:39Ya me siento mucho mejor.
40:41Ya casi es el fin del turno
40:43porque no aprovechas
40:45para dar una buena nadada.
40:47Llevas tanto tiempo aquí en el hotel
40:49y no has aprovechado la piscina.
40:51Yo...
40:53me tengo un poco de miedo al agua.
40:55No sé nadar.
40:57No me digas.
41:00Puedes quedarte en la orilla.
41:02Ay, Lucilia.
41:04Insisto,
41:06ve a relajarte un poco.
41:08En serio, amiga.
41:09Aprovecha la piscina
41:11y quédate el tiempo que quieras.
41:39Lucilia,
41:41qué sorpresa tú por aquí.
41:43Hola, Iván.
41:45Por lo que recuerdo,
41:47la última vez que nos vimos
41:49fue justo aquí, ¿no?
41:51Cuando te ofrecí unas clases de natación.
41:53Si quieres,
41:55la invitación sigue en pie.
41:57Si quieres, no tienes que nadar tampoco.
41:59Te puedo enseñar a flotar,
42:01que es un poco más fácil.
42:03Gracias, Iván, pero
42:05no estoy de humor para coqueteos.
42:07Te dejé muy claro en la otra ocasión
42:09que soy un hijo de chica.
42:11Un momento, Lucilia.
42:13Yo no estoy coqueteando contigo.
42:15Te hablo como salvavidas solamente.
42:20Puedes entrar.
42:22Aquí puedes pisar.
42:24Eso.
42:26Oye,
42:28vas a aguantar la respiración
42:30y vas a acostarte
42:32como si estuvieras en la cama
42:34que yo te sujetaré.
42:37Vamos.
42:40Eso.
42:48A ver si descubro alguna pista
42:50de lo que me estás escondiendo, Lucilia.
43:09No.
43:31¿Leonel?
43:33¿Qué está haciendo Leonel?
43:35¿Y este otro?
43:36Virgilio.
43:39Claro, Virgilio López, el antiguo socio de Leonel.
43:45¿Pero qué está haciendo esta foto aquí?
43:57Para mi querida sobrina Lucilia,
43:59un recuerdo de tu tío y tu primo hermano que mucho te aman.
44:04Tío José.
44:06¿Qué pasa?
44:12Por Dios.
44:15¿Entonces el tío José
44:18es Virgilio?
44:21¿Será posible?
44:27¿Entonces quiere decir
44:29que Orlando
44:32es hijo
44:33de Virgilio López?

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