Alfonso Rojo: “¿De que se ríen señores del PP_ Porque Sánchez ya ha decidido convocar elecciones”
- anteayer
Escuchando a González Pons decir ufano que el acuerdo sobre el CGPJ con Bolaños “es casi el principio de una amistad”, me he acordado de un viejo poema de Mario Benedetti.
Fue escrito cuando Uruguay sufría la dictadura militar y el terrorismo tupamaro y repite como una letanía:
‘Seré curioso, señor ministro, de qué se ríe, de qué se ríe’.
Pues eso… ¿De qué se ríen, paisanos? ¿Qué celebran con tanto alborozo?
Bolaños y Pons no comparecieron juntos, pero parecían Pili y Mili.
“Hoy es un buen día para el Estado de Derecho en España”, afirmó primero el popular.
“Hoy es un gran día para nuestra democracia, para nuestro Estado de Derecho”, subrayó después el socialista.
Lo peor del acuerdo sobre el CGPJ es que lo han perpetrado ajustándose a los pringosos vicios del pasado.
Que el ministro para todo del Gobierno Frankenstein y uno de los hombres de confianza del líder de la oposición se repartan a pachas los 20 magistrados del Poder Judicial no es edificante.
Nos hemos librado de personajes siniestros como De Prada, que figuraba en la quinielas previas, pero ni el más lelo puede tragarse que no han pactado el nombre del presidente del organismo.
O que Sánchez vaya a cumplir la segunda parte, la realmente relevante, que es modificar la ley para que en el futuro los jueces elijan a los jueces y se atenúe el mangoneo de la Justicia, vigente desde que en 1985 Felipe González y Alfonso Guerra decidieron erosionar la separación de poderes en España.
En la vida hay ocasiones en las que no te queda otra que elegir entre lo malo y lo peor, pero…
¿Se puede negociar algo con un tipo como Sánchez que se pasa la Constitución por la entrepierna?
¿Cabe acordar la renovación del CGPJ con quienes ahora mismo están utilizando a Pumpido y a su mayoría izquierdista en el Tribunal Constitucional para amnistiar golpistas como Puigdemont y borrar latrocinios como los EREs andaluces?
¿Se puede siquiera hablar con el marido de Begoña sin el riesgo de que te robe la cartera?
Viendo los precedentes y con los desastres que nos ha ocasionado el que Casado pactará ingenuamente renovar el Constitucional entregándoselo a Sánchez, lo lógico es suponer que este último oculta una carta bajo la manga.
¿Por qué ha renunciado a asaltar el Consejo, como amenazó el pasado 12 de junio?
Mi opinión es que empieza a preocuparle la presión de la Unión Europea y -sobre todo- que vamos a repetición de elecciones en Cataluña y que el ‘okupa’ de La Moncloa ya ha decidido convocar generales y hacer coincidir los dos comicios.
Menos risas, cuidado con la euforia y no se olviden señores del PP de que han pactado con los hablan de jueces prevaricadores y están en plena campaña para exterminar a los periodistas que revelamos los apaños de Begoña, los chanchullos de Azagra, los puticlubs de Tito Berni, los chalets de Ábalos, las marrarachadas de Puente, las ineptitudes de Marlaska y que el PSOE es el partido más corrupto de la Historia de España.
Fue escrito cuando Uruguay sufría la dictadura militar y el terrorismo tupamaro y repite como una letanía:
‘Seré curioso, señor ministro, de qué se ríe, de qué se ríe’.
Pues eso… ¿De qué se ríen, paisanos? ¿Qué celebran con tanto alborozo?
Bolaños y Pons no comparecieron juntos, pero parecían Pili y Mili.
“Hoy es un buen día para el Estado de Derecho en España”, afirmó primero el popular.
“Hoy es un gran día para nuestra democracia, para nuestro Estado de Derecho”, subrayó después el socialista.
Lo peor del acuerdo sobre el CGPJ es que lo han perpetrado ajustándose a los pringosos vicios del pasado.
Que el ministro para todo del Gobierno Frankenstein y uno de los hombres de confianza del líder de la oposición se repartan a pachas los 20 magistrados del Poder Judicial no es edificante.
Nos hemos librado de personajes siniestros como De Prada, que figuraba en la quinielas previas, pero ni el más lelo puede tragarse que no han pactado el nombre del presidente del organismo.
O que Sánchez vaya a cumplir la segunda parte, la realmente relevante, que es modificar la ley para que en el futuro los jueces elijan a los jueces y se atenúe el mangoneo de la Justicia, vigente desde que en 1985 Felipe González y Alfonso Guerra decidieron erosionar la separación de poderes en España.
En la vida hay ocasiones en las que no te queda otra que elegir entre lo malo y lo peor, pero…
¿Se puede negociar algo con un tipo como Sánchez que se pasa la Constitución por la entrepierna?
¿Cabe acordar la renovación del CGPJ con quienes ahora mismo están utilizando a Pumpido y a su mayoría izquierdista en el Tribunal Constitucional para amnistiar golpistas como Puigdemont y borrar latrocinios como los EREs andaluces?
¿Se puede siquiera hablar con el marido de Begoña sin el riesgo de que te robe la cartera?
Viendo los precedentes y con los desastres que nos ha ocasionado el que Casado pactará ingenuamente renovar el Constitucional entregándoselo a Sánchez, lo lógico es suponer que este último oculta una carta bajo la manga.
¿Por qué ha renunciado a asaltar el Consejo, como amenazó el pasado 12 de junio?
Mi opinión es que empieza a preocuparle la presión de la Unión Europea y -sobre todo- que vamos a repetición de elecciones en Cataluña y que el ‘okupa’ de La Moncloa ya ha decidido convocar generales y hacer coincidir los dos comicios.
Menos risas, cuidado con la euforia y no se olviden señores del PP de que han pactado con los hablan de jueces prevaricadores y están en plena campaña para exterminar a los periodistas que revelamos los apaños de Begoña, los chanchullos de Azagra, los puticlubs de Tito Berni, los chalets de Ábalos, las marrarachadas de Puente, las ineptitudes de Marlaska y que el PSOE es el partido más corrupto de la Historia de España.