• hace 5 meses
En medio de constantes críticas desde que abrió las puertas de su nuevo restaurante, Íñigo Onieva ha contado con el apoyo incondicional de sus familiares y amigos más cercanos, sobre todo el de su suegra Isabel Preysler.
En esta ocasión la 'reina de corazones' acudió una noche más al restaurante de su yerno donde disfrutó de una agradable velada entre amigos en la que su hija, Tamara Falcó, fue la gran ausente.
Transcripción
00:00En medio de constantes críticas desde que abrió las puertas de su nuevo restaurante,
00:06Inigo Onieva ha contado con el apoyo incondicional de sus familiares y amigos más cercanos,
00:12sobre todo el de su suegra, Isabel Preisler. En esta ocasión, la reina de corazones acudió
00:17una noche más al restaurante de su yerno, donde disfrutó de una agradable velada entre amigos,
00:22en la que su hija, Tamara Falco, fue la gran ausente. Tras varias horas en el interior donde
00:27coincidió con el empresario, Isabel abandonaba el local con la mejor de sonrisas en el rostro,
00:32demostrando que está en un momento muy relajado de su vida. Ajena a los constantes rumores que
00:37acompañan a su hija sobre un posible embarazo, la socialité prefirió no abordar el tema y
00:42permanecer al margen de la vida matrimonial de su hija, limitándose a decir...
00:47Muy bien, muy feliz, gracias.
00:49Con la elegancia que le caracteriza a la madre de Ana Boyer, eligió para la ocasión un sencillo
00:54traje de dos piezas en color blanco, con cinturón, marcando la silueta.

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