'Lady cohete' está intratable.
Es abrir la boca y sube el precio del pan hasta más allá de la estratosfera.
Pero la última ocurrencia de Yolanda Díaz merece un análisis aparte.
Más allá de que ya están muy vistos todos estos políticos que, aparentemente, dicen preocuparse por la conservación del medio ambiente, lo cierto es que la líder de Sumar ha retorcido el argumento hasta conseguir una verdadera 'genialidad': provocar un caos económico y, de paso, poner en un brete a Pedro Sánchez.
A la 'planchadora' populista no se le ha ocurrido mejor idea que arremeter contra los vuelos cortos. Hasta tal punto que a Díaz le parece que deben de suprimirse todas aquellas conexiones aéreas que duren menos de dos horas y media siempre que exista una alternativa a través del tren.
Lo cachondo del asunto es que la de Sumar planteó la medida con un lapsus que, inicialmente, muchos pasaron por alto, pero que poco a poco fue incendiando las redes sociales.
La pifia verbal la cometió durante la presentación del acuerdo con Pedro Sánchez (PSOE) para reeditar el pacto alcanzado en la anterior legislatura:
El tren está llamado a ser el transporte del siglo XXI. Por eso hemos acordado que han de acabarse los vuelos cortos, inferiores a dos horas y media, cuando no haya alternativa al tren.
Evidentemente, lo que pretendía decir es que se suprimirían esos vuelos cortos cuando haya alternativa en tren.
La iniciativa de 'Lady cohete' tuvo consecuencias económicas.
Y es que nada más dar cuenta de su nueva chorrada, AENA cayó en picado en la Bolsa.
Decir que terminará con los vuelos cortos en España provocó que las acciones del gestor aeroportuario se desplomasen sin remisión. La caída a media jornada de la cotización de AENA fue del 4%. Un desplome que supuso una pérdida de su capitalización bursátil de 893 millones de euros. Al cierre del mercado se quedó en una cesión de 2,6% y un agujero de 615 millones de euros de su valor. Fue una caída que en un 51% ha afectado al propio Estado. AENA es propiedad en un 51% de Enaire, la empresa pública dependiente del Ministerio de Transportes.
Pero es que aparte de la metedura de pata, lo cierto es que la propuesta de Yolanda Díaz lleva, sin ella pretenderlo, un ataque directo contra Pedro Sánchez.
Porque si se trata de quitar conexiones de menos de dos horas y media, al presidente del Gobierno sociacomunista se le volarían, literalmente, los viajes en Falcon, al menos en todo el territorio peninsular
Es abrir la boca y sube el precio del pan hasta más allá de la estratosfera.
Pero la última ocurrencia de Yolanda Díaz merece un análisis aparte.
Más allá de que ya están muy vistos todos estos políticos que, aparentemente, dicen preocuparse por la conservación del medio ambiente, lo cierto es que la líder de Sumar ha retorcido el argumento hasta conseguir una verdadera 'genialidad': provocar un caos económico y, de paso, poner en un brete a Pedro Sánchez.
A la 'planchadora' populista no se le ha ocurrido mejor idea que arremeter contra los vuelos cortos. Hasta tal punto que a Díaz le parece que deben de suprimirse todas aquellas conexiones aéreas que duren menos de dos horas y media siempre que exista una alternativa a través del tren.
Lo cachondo del asunto es que la de Sumar planteó la medida con un lapsus que, inicialmente, muchos pasaron por alto, pero que poco a poco fue incendiando las redes sociales.
La pifia verbal la cometió durante la presentación del acuerdo con Pedro Sánchez (PSOE) para reeditar el pacto alcanzado en la anterior legislatura:
El tren está llamado a ser el transporte del siglo XXI. Por eso hemos acordado que han de acabarse los vuelos cortos, inferiores a dos horas y media, cuando no haya alternativa al tren.
Evidentemente, lo que pretendía decir es que se suprimirían esos vuelos cortos cuando haya alternativa en tren.
La iniciativa de 'Lady cohete' tuvo consecuencias económicas.
Y es que nada más dar cuenta de su nueva chorrada, AENA cayó en picado en la Bolsa.
Decir que terminará con los vuelos cortos en España provocó que las acciones del gestor aeroportuario se desplomasen sin remisión. La caída a media jornada de la cotización de AENA fue del 4%. Un desplome que supuso una pérdida de su capitalización bursátil de 893 millones de euros. Al cierre del mercado se quedó en una cesión de 2,6% y un agujero de 615 millones de euros de su valor. Fue una caída que en un 51% ha afectado al propio Estado. AENA es propiedad en un 51% de Enaire, la empresa pública dependiente del Ministerio de Transportes.
Pero es que aparte de la metedura de pata, lo cierto es que la propuesta de Yolanda Díaz lleva, sin ella pretenderlo, un ataque directo contra Pedro Sánchez.
Porque si se trata de quitar conexiones de menos de dos horas y media, al presidente del Gobierno sociacomunista se le volarían, literalmente, los viajes en Falcon, al menos en todo el territorio peninsular
Category
🗞
Noticias