Los agresores sexuales están en el foco del Gobierno en funciones que estaría trabajando en el endurecimiento de medidas para limitar los beneficios penitenciarios. Se trataría de supeditar la concesión de permisos, clasificación de tercer grado o el cómputo de tiempo para la libertad condicional, a que se haya cumplido la mitad de la condena. La medida ha sido criticada por algunos penalistas que consideran choca con los derechos de los presos y el fundamento penitenciario de la reinserción de los mismos. Pero hay otros expertos que argumentan es una situación que se aplica a condenas superiores a 5 años y para quienes hayan agredido sexualmente a menores, o a condenados por terrorismo, y que da respuesta a la alarma social que representan los agresores y violadores, muchas veces reincidentes.
Category
🗞
Noticias