La sentencia del Tribunal Constitucional ha acabado con la incertidumbre en Eusko Alkartasuna. El histórico partido ha corrido el riesgo de ser ilegalizado por pertenecer a la coalición Bildu. Eso le hubiera hecho perder ayuntamientos que lleva años gobernando. Algunos, incluso, en solitario. Uno de ellos es el ayuntamiento de la localidad navarra de Sunvilla. EA gobierna allí desde que se fundó el partido, hace 25 años. Dicen que no entendían su exclusión, porque hasta en sus propias filas hay víctimas de ETA. "Nunca hemos sido estrategia de ETA, porque siempre hemos estado en contra de la violencia", dice Paco Errandonea, alcalde de la localidad y ahora candidato de Bildu. En Zumaia, Guipúzcoa, gobierna también Eusko Alkartasuna, que también ha cambiado las siglas para estos comicios. No entendían su exclusión, cuando hasta en sus propias filas han sufrido amenazas y hay víctimas de ETA."Militantes donde sus familiares han sido asesinados, dicho sea de paso, y siguen siendo militantes de Eusko Alkartasuna ", dice Iñaki Agirrezabalaga, alcalde.Pero no todos los cargos de Eusko Alkartasuna han sido fieles a esta estrategia. En Zarautz los cinco concejales, alcalde incluído, abandonaron el partido. "No nos veíamos allí", explica el alcalde Jon Urien. Ahora se presentan con una nueva marca, H1. 
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