Con sólo 23 años, ya lleva 6 aislada del mundo. Jennifer sufre sensibilidad química múltiple y vive pegada a una máscara que le protege del contacto con cualquier producto químico, como una colonia o un detergente. Los mareos, los vómitos y las diarreas la dejaron con 37 kilos recluida tres años en un hospital, hasta que por fin le diagnosticaron la enfermedad. Y lo que espera es poder viajar a Dallas donde está el único hospital del mundo donde se trata esta enfermedad. Pero carecen de recursos económicos. Su única esperanza es recibir la ayuda de Francisco Hernando, 'el Pocero', como ocurrió con Elvira Roda, la otra 'chica burbuja'.
Category
🗞
Noticias