China ha presentado al mundo el J-20, su nuevo avión de combate furtivo; un caza “invisible” a los radares y armado con misiles de largo alcance, que se ha convertido en el símbolo de la potencia militar de Pekín. Dos de estos aparatos han sobrevolado el salón aeronáutico de Zhuhai, en el sur del país. El J-20 es la última apuesta del gigante asiático, inmerso en un proceso de modernización de su Ejército y de mejora de su tecnología militar para tratar de acortar distancias con Estados Unidos.
En esta edición del salón aeronáutico de Zhuhai, Pekín ha mostrado nuevos vehículos blindados, sistemas de misiles antiaéreos, drones y aviones de caza de fabricación propia. El salón también es un excelente escaparate para las firmas aeronáuticas internacionales. En 2024 el mercado aéreo chino será el más importante del mundo. Se calcula que en las próximas dos décadas necesitarán 6.000 nuevos aviones para responder al continuo aumento del tráfico de pasajeros en el país.
En esta edición del salón aeronáutico de Zhuhai, Pekín ha mostrado nuevos vehículos blindados, sistemas de misiles antiaéreos, drones y aviones de caza de fabricación propia. El salón también es un excelente escaparate para las firmas aeronáuticas internacionales. En 2024 el mercado aéreo chino será el más importante del mundo. Se calcula que en las próximas dos décadas necesitarán 6.000 nuevos aviones para responder al continuo aumento del tráfico de pasajeros en el país.
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