CAMARA DEL CRIMEN: AMOR LOCO
Kim West, de 52 años, y Ben Ford, de 32, han hecho bueno el dicho de que el amor surge con quién menos te lo esperas. Y es que lo que más sorprende de esta pareja no es la diferencia de edad, sino que son madre e hijo. Madre e hijo. Sí, han leído bien.
La peculiar historia de amor que ha destapado el diario británico ‘The New Day’ ya está en boca de todos y ha incendiado las redes sociales, por lo que tiene de transgresora y por romper un tabú de nuestra sociedad, de cómo entendemos las relaciones amorosas.
La historia es la siguiente. Kim, la madre, natural de Londres, se quedó embarazada a los 19 años cuando estudiaba en California. Sola y sin dinero, en un país extranjero, se vio obligada a dar a su hijo Ben en adopción. Ella acabó sus estudios y volvió a Londres, mientras Ben creció en Michigan con una nueva familia. Durante 30 años, no supieron nada el uno del otro, pero hace 3 años, Kim recibió una carta de su hijo, en la que este le transmitía el deseo de conocer a su madre biológica. Hasta aquí todo normal.
Lo increíble sucede cuando ambos se encuentran en Londres. Y es que entre ellos surge un flechazo irrefrenable. Se enamoran perdidamente el uno del otro. Sintieron “una atracción sexual” tan fuerte que ninguno de los dos pudo -ni quiso- reprimir ese sentimiento. Tanto que, según cuentan al diario británico, se fueron a un hotel, compartieron una botella de champán y se dieron su primer beso. Tres días después mantuvieron relaciones sexuales.
“Cuando conocí a mi madre no la pude ver así. La percibí como un ser sexual.”, explica Ben, que en ese momento estaba casado. La cosa fue tan fuerte que decidió abandonar a su esposa y empezar una relación con su madre. “Esto no es incesto, es Atracción Sexual Genética. Sé que la gente va a decir que esto es repugnante pero somos como dos gotas de agua y estamos destinados a estar juntos”, añade Kim.
El lazo de unión entre ellos se ha ido haciendo cada vez más fuerte y ahora quieren casarse e incluso intentarán tener un hijo.
La peculiar historia de amor que ha destapado el diario británico ‘The New Day’ ya está en boca de todos y ha incendiado las redes sociales, por lo que tiene de transgresora y por romper un tabú de nuestra sociedad, de cómo entendemos las relaciones amorosas.
La historia es la siguiente. Kim, la madre, natural de Londres, se quedó embarazada a los 19 años cuando estudiaba en California. Sola y sin dinero, en un país extranjero, se vio obligada a dar a su hijo Ben en adopción. Ella acabó sus estudios y volvió a Londres, mientras Ben creció en Michigan con una nueva familia. Durante 30 años, no supieron nada el uno del otro, pero hace 3 años, Kim recibió una carta de su hijo, en la que este le transmitía el deseo de conocer a su madre biológica. Hasta aquí todo normal.
Lo increíble sucede cuando ambos se encuentran en Londres. Y es que entre ellos surge un flechazo irrefrenable. Se enamoran perdidamente el uno del otro. Sintieron “una atracción sexual” tan fuerte que ninguno de los dos pudo -ni quiso- reprimir ese sentimiento. Tanto que, según cuentan al diario británico, se fueron a un hotel, compartieron una botella de champán y se dieron su primer beso. Tres días después mantuvieron relaciones sexuales.
“Cuando conocí a mi madre no la pude ver así. La percibí como un ser sexual.”, explica Ben, que en ese momento estaba casado. La cosa fue tan fuerte que decidió abandonar a su esposa y empezar una relación con su madre. “Esto no es incesto, es Atracción Sexual Genética. Sé que la gente va a decir que esto es repugnante pero somos como dos gotas de agua y estamos destinados a estar juntos”, añade Kim.
El lazo de unión entre ellos se ha ido haciendo cada vez más fuerte y ahora quieren casarse e incluso intentarán tener un hijo.
Category
🗞
News