Valls somete su nuevo gobierno al voto de confianza de la Asamblea francesa
Por segunda vez en cinco meses, Manuel Valls somete su gobierno al voto de confianza de la Asamblea francesa. El primer ministro espera obtener a primeras horas de la tarde el respaldo al nuevo ejecutivo, formado tras la salida de varios ministros opuestos a las nuevas políticas económicas gubernamentales, que tachaban de liberales.
El llamado como Gobierno Valls 2 necesita 289 votos en la cámara baja, exactamente el número de escaños que tiene su partido. 208 diputados socialistas ya han asegurado que le apoyarán y se espera que una treintena se abstenga como protesta, aunque no debería ser suficiente para poner en peligro su propuesta, dado el apoyo de otros grupos de izquierda.
El gran cambio de este nuevo gobierno presentado por Valls radica en la salida de Arnaud Montebourg, ministro de Economía hasta finales del pasado agosto y detractor de los cambios propuestos por el Elíseo. Su puesto ha sido ocupado por Emmanuel Macron, un joven político de una orientación diferente y exsocio del banco de inversión Rothschild.
Lo que es seguro es que la posición de Valls se ha debilitado. Se espera que este nuevo ejecutivo salga adelante con una mayoría absoluta ajustada, lejos del gran respaldo que logró cuando asumió el cargo con su primer equipo de gobierno en abril
El llamado como Gobierno Valls 2 necesita 289 votos en la cámara baja, exactamente el número de escaños que tiene su partido. 208 diputados socialistas ya han asegurado que le apoyarán y se espera que una treintena se abstenga como protesta, aunque no debería ser suficiente para poner en peligro su propuesta, dado el apoyo de otros grupos de izquierda.
El gran cambio de este nuevo gobierno presentado por Valls radica en la salida de Arnaud Montebourg, ministro de Economía hasta finales del pasado agosto y detractor de los cambios propuestos por el Elíseo. Su puesto ha sido ocupado por Emmanuel Macron, un joven político de una orientación diferente y exsocio del banco de inversión Rothschild.
Lo que es seguro es que la posición de Valls se ha debilitado. Se espera que este nuevo ejecutivo salga adelante con una mayoría absoluta ajustada, lejos del gran respaldo que logró cuando asumió el cargo con su primer equipo de gobierno en abril