El alto el fuego se consolida en el este de Ucrania

  • hace 10 años
Aunque la desconfianza entre los dos bandos no ha desaparecido, el protocolo firmado el viernes pasado en Minsk se está respetando. Primero, han cesado los combates. Un pelotón rebelde pudo visitar ayer en la región de Donetsk una posición abandonada por las tropas lealistas. Segundo, se están canjeando prisioneros. Los separatistas han liberado ya a 600 soldados y 500 más quedarán libres en cuestión de horas.

Entre demostraciones de fuerza, Kiev y Moscú tratan de hacer avanzar el proceso político. Ayer, al mismo tiempo que Rusia realizaba maniobras militares en Crimea, Putin llamaba a Poroshenko para reafirmarle su compromiso con una salida dialogada a la crisis en el este ucraniano.

La OTAN- que recientemente decidió reforzar su presencia en el este de Europa con una fuerza de reacción rápida- también envía su mensaje a Moscú con estos ejercicios de tropas especiales en el norte de Polonia.

El estatus de las regiones rebeldes es el hueso duro de roer en este proceso. El documento de Minsk estipula una ley de estatus especial para Donetsk y Lugansk, pero su formulación es tan vaga que se presta a todo tipo de interpretaciones.

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