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00:00Fue un siniestro que conmocionó a Europa. El 24 de marzo de 2015, el copiloto del vuelo
00:079525 de Germanwings, Andreas Lubitsch, de manera deliberada estrelló la aeronave contra
00:13el macizo de Strop en los Altos Franceses. En el avión que hacía el trayecto Barcelona-Dasseldorf
00:18viajaban 144 pasajeros, 51 de ellos españoles y 6 miembros de la tripulación. Media hora
00:24después del despegue, el aparato comienza a perder altura y en cuestión de minutos
00:28pasa de los 9.000 metros de altura a los 1.800. A las 10.39 horas peninsular se registra
00:34su último contacto. La investigación concluyó que la catástrofe la produjo Lubitsch cuando
00:39aprovechó la salida del piloto de la cabina para encerrarse solo en ella y activar el
00:44descenso con la voluntad de destruir el avión. El autor del siniestro de 27 años padecía
00:49un historial de depresiones y ocultó a la aerolínea de bajo coste de Lufthansa que
00:53le habían dado la baja médica.
01:12Pese a que los médicos que trataron a Lubitsch sabían que padecía trastornos psíquicos,
01:17no conocían sus instintos suicidas, por lo que la Fiscalía alemana descartó negligencias
01:21por parte de los médicos, su empresa o las autoridades de la aviación alemana. El siniestro
01:27provocó un intenso debate sobre la confidencialidad médico-paciente y reforzó los controles
01:31de salud mental de la tripulación para garantizar la seguridad. También se cambió el protocolo
01:52para que en las cabinas de mando hubiera un mínimo de dos personas en todo momento.