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Lo que parecía un simple rancho en México escondía un oscuro propósito. La Escuelita entrenaba sicarios con métodos brutales. Testimonios inéditos revelan los horrores de este campo de exterminio clandestino.

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Transcripción
00:00La llamaba la Escuelita, un hombre casi inofensivo para lo que, en realidad, era una máquina
00:05de muerte.
00:06Ubicada en el rancho Izaguirre, en la comunidad de la Estazuela, este lugar no tenía pizarras
00:11ni pupitres, aquí no se enseñaban matemáticas ni historia, lo que se aprendía era a matar,
00:17a desmembrar, a desaparecer cuerpos.
00:20Para algunos, llegar ahí fue un error, un engaño, para otros, la única opción para
00:24seguir respirando.
00:27Algunos sobrevivientes aceptaron contar su historia y lo que dijeron pintó un retrato
00:30del horror que difícilmente se puede olvidar.
00:32La llegada.
00:35Desde que llegamos nos dijeron que nos desnudáramos, que brincáramos por si traíamos un chip
00:42escondido.
00:43Nos dejaron claro que desde ese momento ya estábamos trabajando, recuerda uno de ellos.
00:48No había oportunidad de negarse, si querías vivir, obedecías.
00:51En los primeros minutos ya entendías la dinámica, hacer lo que te pidan o terminar como a los
00:56que intentaron resistirse.
00:58Los registros estaban organizados en libretas escolares, nombres, apodos, tareas asignadas,
01:04era el primer paso para ser parte de algo en lo que nadie quería estar.
01:09El entrenamiento entre la sangre y la pólvora.
01:13La rutina era brutal, prácticas de tiro con AK-47 y pistolas cortas, combates simulados,
01:19pruebas de resistencia, al principio con pistolas de gotcha, luego con armas reales.
01:24Ahí no existía el no puedo, ni el no quiero, si te ordenaban torturar a alguien lo hacías,
01:29punto.
01:30El rancho estaba dividido en zonas específicas, dormitorios improvisados, un gimnasio con
01:35pesas de concreto, una pista de obstáculos con alambres de púas y un espacio siniestro
01:39al que llamaban la carnicería.
01:41Ahí la prueba final no era disparar un arma, era cortar carne humana.
01:46La carnicería, matar para vivir.
01:49No nos enseñaban una técnica, simplemente te daban un cuchillo y te decían que lo hicieras
01:55como pudieras, cuenta uno de los sobrevivientes.
01:57Al principio, las manos temblaban, pero el miedo a morir superaba cualquier asco.
02:02Los que decían que querían irse, los mataban en frente de todos, si intentabas huir, les
02:06disparaban mientras trepaban la barda.
02:08El crematorio clandestino era el final de los que no lograban sobrevivir a las reglas
02:12del lugar.
02:13La leña se usaba para cocinar, pero también para reducir los cuerpos a cenizas.
02:19El escape, el precio para seguir vivo.
02:23No todos salieron con vida, los que sí, como estos tres testigos, llevan consigo una carga
02:27insoportable.
02:28No hay día que no piense en lo que hice para salir de ahí.
02:30Dios sabe que tuve que hacer cosas, pero si no las hacía, yo también estaría en esa
02:34fosa.
02:35El rancho Izaguirre fue descubierto en 2025, pero la historia que encierra aún está llena
02:40de preguntas sin respuesta.
02:41¿Cuántos murieron ahí?
02:42¿Cuántos más siguen desaparecidos?
02:44Las familias de las víctimas aún buscan entre montañas de ropa abandonada, esperando
02:48reconocer una prenda, un zapato, cualquier cosa que les diga que su ser querido estuvo
02:52ahí, aunque eso significa aceptar lo peor.
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