Para afrontar los retos empresariales actuales, todo jefe (o cualquiera) debería adoptar actitudes filosóficas, ya que aporta un pensamiento crítico relevante, también ayuda a hacerse preguntas, a dudar de lo que se nos presenta como cierto e incorpora una visión humanista a la compañía.
Categoría
🗞
NoticiasTranscripción
00:00Ponga un filósofo en la oficina para tener una buena vida laboral, aporta un pensamiento
00:06crítico relevante, también ayuda a hacerse preguntas y a dudar de lo que se nos presenta
00:10como cierto e incorpora una visión humanista a la compañía.
00:15Para afrontar los retos empresariales actuales todo jefe, o casi cualquiera, debería adaptar
00:20ciertas actitudes filosóficas, como la curiosidad, la amistad, el pararse a pensar y la ejemplaridad.
00:26La curiosidad, motor esencial para mantener a la compañía en movimiento abierta a la
00:31innovación y a los cambios que se deben afrontar con buen ánimo y dirección ética.
00:35Además fomenta la creatividad.
00:37Amistad como antídoto a la deshumanización, que somos personas y no recursos.
00:42Pararse a pensar y hacerlo con criterio que se consigue con conocimiento y experiencia
00:46y para preguntarnos siempre por qué.
00:49Ejemplaridad, que las personas somos seres que imitamos.
00:52Además es básica para poder transmitir cómo se tienen que hacer las cosas y también
00:56una responsabilidad porque los algoritmos de la inteligencia artificial se basan en
01:01las búsquedas y procedimientos.
01:03Al final estos rasgos facilitan el equilibrio entre la vida personal y la profesional y
01:08por tanto la felicidad.