El muelle de Cádiz ha sido escenario este sábado, 11 de enero, de la emotiva partida del buque escuela Juan Sebastián Elcano, con la Princesa Leonor entre los 76 guardiamarinas que iniciaron el 97º crucero de instrucción del emblemático navío. Los Reyes de España, Felipe VI y Letizia, han asistido al acto de despedida, acompañados por cientos de familiares y público que no han querido perderse este importante momento.
Uno de los momentos más destacados de la jornada ocurrió alrededor de las 10:20 horas, cuando la Princesa Leonor subió a bordo del Elcano. Suscitó espontáneos aplausos y gritos de “¡Guapa!” de parte del público, compuesto por familiares de los guardiamarinas y la dotación del navío. Poco después, estos vítores se replicaron hacia otros guardiamarinas, reflejando la emoción del ambiente.
A las 11:00 horas, Felipe VI subió a bordo del buque escuela, acompañado por la Reina Letizia. Tras 21 cañonazos y siete vivas al Rey, sonó el Himno Nacional mientras los monarcas saludaban desde la borda. La Reina, visiblemente emocionada, agradeció las muestras de cariño llevándose la mano al corazón mientras desde el público se escuchaban vivas y aplausos.
Instantes antes de la partida, los guardiamarinas bajaron para despedirse de sus familias entre abrazos, besos y lágrimas. Algunos confesaron lo difícil que será estar lejos durante seis meses, pero también el orgullo de formar parte de esta travesía histórica junto a la heredera al trono. “Es un orgullo servir a España. La Princesa es una compañera más”, expresó emocionado uno de ellos.
Poco antes del mediodía, el Juan Sebastián Elcano soltó amarras, iniciando las maniobras para salir del puerto gaditano. Desde el muelle, los Reyes y las familias despidieron al navío, mientras la Reina Letizia se mostraba visiblemente emocionada. En un gesto íntimo, el Rey Felipe VI la sostuvo por la cintura mientras ambos observaban cómo su hija emprendía su viaje. Al ser consultada por los medios sobre este momento, la Reina comentó: “En el muelle había más madres que seguramente sentían lo mismo que yo”.
El buque escuela zarpó escoltado por pequeñas embarcaciones que lo siguieron durante varias millas, como es tradición en estos actos. Antes de embarcar en el buque Malaespina, que acompañó brevemente al Elcano, Felipe VI tomó una foto con su móvil mientras el navío se alejaba. La Princesa Leonor, sonriente y con su gorra marinera, no dejó de saludar mientras el barco se adentraba en el mar.
Uno de los momentos más destacados de la jornada ocurrió alrededor de las 10:20 horas, cuando la Princesa Leonor subió a bordo del Elcano. Suscitó espontáneos aplausos y gritos de “¡Guapa!” de parte del público, compuesto por familiares de los guardiamarinas y la dotación del navío. Poco después, estos vítores se replicaron hacia otros guardiamarinas, reflejando la emoción del ambiente.
A las 11:00 horas, Felipe VI subió a bordo del buque escuela, acompañado por la Reina Letizia. Tras 21 cañonazos y siete vivas al Rey, sonó el Himno Nacional mientras los monarcas saludaban desde la borda. La Reina, visiblemente emocionada, agradeció las muestras de cariño llevándose la mano al corazón mientras desde el público se escuchaban vivas y aplausos.
Instantes antes de la partida, los guardiamarinas bajaron para despedirse de sus familias entre abrazos, besos y lágrimas. Algunos confesaron lo difícil que será estar lejos durante seis meses, pero también el orgullo de formar parte de esta travesía histórica junto a la heredera al trono. “Es un orgullo servir a España. La Princesa es una compañera más”, expresó emocionado uno de ellos.
Poco antes del mediodía, el Juan Sebastián Elcano soltó amarras, iniciando las maniobras para salir del puerto gaditano. Desde el muelle, los Reyes y las familias despidieron al navío, mientras la Reina Letizia se mostraba visiblemente emocionada. En un gesto íntimo, el Rey Felipe VI la sostuvo por la cintura mientras ambos observaban cómo su hija emprendía su viaje. Al ser consultada por los medios sobre este momento, la Reina comentó: “En el muelle había más madres que seguramente sentían lo mismo que yo”.
El buque escuela zarpó escoltado por pequeñas embarcaciones que lo siguieron durante varias millas, como es tradición en estos actos. Antes de embarcar en el buque Malaespina, que acompañó brevemente al Elcano, Felipe VI tomó una foto con su móvil mientras el navío se alejaba. La Princesa Leonor, sonriente y con su gorra marinera, no dejó de saludar mientras el barco se adentraba en el mar.
Category
🗞
NoticiasTranscripción
00:00¡Suscríbete y activa la campanita!