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Los residentes de Santo Suárez, un populoso barrio del suroeste de La Habana, golpearon cacerolas y sartenes, el domingo por la noche, para protestar por un apagón en toda la isla apagón desde el viernes en la mañana.
Muchos esperaban con angustia a última hora del domingo el restablecimiento de la electricidad.
La comida se echa a perder en los refrigeradores y no hay respiro para el calor que les mantiene despiertos por la noche sin aire acondicionado ni siquiera un ventilador.

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00:00La recuperación total, esa que hablábamos, que puede ser mañana y que puede ser en los
00:23últimos clientes en martes, eso no quiere decir que volvamos a una totalidad.
00:28Se pronostica que vamos a seguir dando afectaciones eléctricas porque seguimos con la falta de combustible.

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