'GATE', puesto en marcha en 2022 para hacer frente a los problemas de drogas en Bruselas, se ampliará con un nuevo centro el próximo año debido a su éxito y a la gran demanda.
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00:00Bruno Falkeniers trabaja en este centro de acogida para drogadictos de Bruselas, el primero de la ciudad.
00:07GATE, como se llama el centro, ofrece un espacio seguro para los consumidores de drogas
00:12y solo el año pasado se entregaron más de 20.000 pipas de crack.
00:16El objetivo es salvar vidas y sacar las drogas de las calles de Bruselas.
00:30La mayoría de los que vienen aquí no tienen hogar.
00:48GATE les ofrece acceso a atención médica, ocio y sobre todo respeto y dignidad.
00:54La pobreza se ha agravado en Bruselas desde la pandemia de la COVID-19
00:58y debido a la demanda, GATE abrirá otro centro el año que viene.
01:28Es muy problemático porque en su testimonio, cuando les preguntamos por qué usan tanta cocaína,
01:38dicen que porque viven en las calles, no tienen esperanza.
01:41Y con esa usación, olvido todo, me siento mejor, no siento que tengo hambre.
01:49Antes de este año, hasta 700 personas estaban durmiendo en estaciones de metro como esta por toda la ciudad.
01:56El gobierno de Bruselas decidió introducir un programa llamado Sublink,
02:00invirtiendo casi un millón de euros y llamando a la policía.
02:04Así que el problema ahora no es tan visible, pero no se ha ido.
02:08Una de las consecuencias muy tristes de este enorme aumento en la disponibilidad de cocaína en Europa,
02:16debido a la tráfico a gran escala, la producción masiva en países producidos en América del Sur,
02:25la tráfico a gran escala a través de nuestros puertos, por ejemplo,
02:28una de las consecuencias más dañinas en cuanto a la salud pública es un aumento en el número de usuarios de cocaína.
02:36Amberes se ha convertido en la puerta de entrada a Europa de las drogas procedentes en su mayoría de Ecuador.
02:43El gobierno belga está intentando luchar contra los cárteles mano a mano con los neerlandeses,
02:49pero con un mercado de drogas ilícitas que mueve 27.000 millones de euros al año, el reto es inmenso.