Una mujer de 102 años se convierte en la paracaidista británica de más edad
Una mujer de Suffolk se convirtió en la submarinista de mayor edad del Reino Unido, con 102 años, tras celebrar el domingo su cumpleaños saltando desde un avión.
Manette Baillie declaró a la cadena británica Sky News que había estado «contando los días» hasta su salto.
Se alegra de poder considerarlo por fin «misión cumplida».
«Cuando se abrió la puerta pensé: no hay nada más que pueda hacer o decir, sólo saltar», declaró en una entrevista tras su extraordinario salto.
Gracias a su salto, ha podido recaudar 9.000 libras esterlinas (11.884 dólares) para la East Anglian Air Ambulance, la Motor Neurone Disease Association y el Benhall Village Hall.
Tras su salto, Baillie fue recibida con una celebración por parte de la comunidad mientras muchos la aplaudían y vitoreaban.
Recibió su certificado de paracaidismo junto con unas flores.
Para celebrar su centenario, Baillie condujo un Ferrari a 209 km/h en el circuito de Silverstone, según Sky News.
Manette Baillie declaró a la cadena británica Sky News que había estado «contando los días» hasta su salto.
Se alegra de poder considerarlo por fin «misión cumplida».
«Cuando se abrió la puerta pensé: no hay nada más que pueda hacer o decir, sólo saltar», declaró en una entrevista tras su extraordinario salto.
Gracias a su salto, ha podido recaudar 9.000 libras esterlinas (11.884 dólares) para la East Anglian Air Ambulance, la Motor Neurone Disease Association y el Benhall Village Hall.
Tras su salto, Baillie fue recibida con una celebración por parte de la comunidad mientras muchos la aplaudían y vitoreaban.
Recibió su certificado de paracaidismo junto con unas flores.
Para celebrar su centenario, Baillie condujo un Ferrari a 209 km/h en el circuito de Silverstone, según Sky News.
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00:00Pues, siento que la misión se ha cumplido.
00:07Cuando se abrió la puerta pensé, no hay más que hacer, o decir, sólo saltar.
00:17Es difícil de describir, he estado esperando para este día y he estado contando los días y siempre diciendo a mí misma que tengo que seguir viva y que tengo que seguir en mis dos pies y no caer por encima.