52. La Esclava Isaura (A Escrava Isaura), en español

  • el mes pasado
La historia de Isaura, una esclava que nace en la hacienda del comendador Almeida, en Campos, en el año 1835. Isaura es hija de la bella Juliana, esclava del comendador, y de Miguel, el capataz de la hacienda. Juliana muriO despues del parto, e Isaura fue adoptada y educada por Gertrudis, esposa del comendador, quien siempre quiso tener una hija. Diecinueve años despues, Leoncio, el hijo del comendador, regresa a la hacienda y se obsesiona de ella. Sin embargo, es obligado a casarse por interes con Malvina hija del rico coronel Sebastian. Al morir Gertrudis y Almeida, Leoncio manipula unos documentos para impedir la libertad de Isaura y poder seguir manteniendola bajo su propiedad. Leoncio esta cada vez mas agresivo y su mujer huye de el; quedando Isaura a su merced, con lo cual tambien se ve obligada a escapar ante la violencia que ejerce. Tomasia, la condesa de Campos, la ayuda en su fuga, y aprovecha para cambiarse de nombre: Elvira. La joven conoce luego al verdadero amor de su vida, Alvaro. Pero un dÝa Leoncio la recaptura, regresandola a su condicion de esclava, y tiene la idea de casarla con Belchior, el jardinero deforme. Alvaro intentara la dificil mision de rescatarla.

Encuentra todos los capitulos en https://sites.google.com/view/cyberhome-nicaragua

Category

📺
TV
Transcript
00:00Yo... pido a sus mercedes que me perdonen, pero no tuve elección, el miserable Deleoncio no me dejó elección, era la libertad de mi hijo a cambio de ustedes, y mi hijo corría el riesgo hasta de ser ahorcado.
00:19No se mortifique Coronel, no podía ser de otra forma.
00:24El Coronel es un hombre bueno, con un gran corazón, e hizo lo correcto en aceptar.
00:32Y nosotros tenemos que entender y agradecer mucho todo lo que hizo por nosotros.
00:39Ya estamos acostumbrados a las maldades de aquel malvado Coronel.
00:45Lo siento mucho, lo siento mucho en verdad.
00:50Yo... debo ver a mis hijas, los dejo.
01:00Pero no te pongas triste Joaquina.
01:03Y no debo estarlo Joao, volver a la hacienda del Comendador, a las manos de aquel infeliz, después de vivir aquí y ser tratados como gente.
01:18Si, pero no va a ser por mucho tiempo Joaquina, André va a saberlo y encontrará la forma de buscarnos y llevarnos al quilombo.
01:27¿Crees que venga antes de que el malvado haga tantas maldades con nosotros? ¿Nos va a poner en el tronco?
01:36Pero lo vamos a soportar, como lo soportamos antes.
01:40No te pongas así Joaquina, no te pongas tan triste que me rompes el corazón.
01:46Le prometí a mi difunta Manuela que cuidaría de ti.
01:49Y cumple lo prometido Joao, sin ti hace mucho tiempo que estaría en los brazos de Jesucristo.
01:58Tú, tú Joao.
02:03Oye Joao, no voy a llorar más, contigo acompañándome, ya no voy a tener miedo.
02:19¡Ay, qué susto!
02:22Llegué a un acuerdo con el coronel. Si cancela mi deuda, te puedes ir con él.
02:30Si me devuelve a Joao y a Joaquina, cancelo la demanda contra Enrique, que está en la cárcel.
02:37No Rosa, tú no vas a ser libre. Él no te está dando tu carta de libertad.
02:43¿Qué? ¿Qué?
02:46¿Qué?
02:48¿Qué?
02:50¿Qué?
02:52¿Qué?
02:54¿Qué?
02:56¿Qué?
02:58¿Qué?
03:00¿Qué?
03:02¿Qué?
03:04¿Qué?
03:05Él no te está dando tu carta de libertad. Vas a ser esclava de tu propio padre.
03:12Él no me trata como una esclava. Él me trata como una señorita.
03:18Quien vive en la barraca siempre carga el hedor de ese lugar.
03:23Tu padre no confía en ti lo suficiente para darte tu libertad.
03:27Pero voy a tener la maldita carta de libertad, usted va a ver.
03:31Yo voy a ser una mujer libre. No voy a ser una esclava fugitiva como Isaura.
03:37Porque yo soy hija de un hombre rico, de un dueño de hacienda.
03:41Malvina se volverá loca por eso.
03:45Ella te odia.
03:47Yo estoy muy feliz al saber que aún así mi padre quiere que yo vuelva.
03:51Él solo quiere otro brazo para trabajar. Y no te va a pagar un níquel.
03:57Allá yo no trabajo. Allá tengo vida de señorita.
04:02Uso ropa de seda. Y uso zapatos también.
04:06Solo me quité los zapatos porque usted me obligó.
04:10Los esclavos no usan zapatos.
04:13Allá yo no soy esclava. Así que allá yo uso zapatos.
04:18No me gustan mucho porque me aprietan los pies, pero está bien.
04:22Porque así aprendo a ser señorita.
04:26Con tan solo abrir la boca, Rosa, se ve que eres esclava.
04:32Al contrario de Isaura.
04:35Pero al señor, aún así le haré falta.
04:41Ya está visto que no.
04:43Ahora vete. Cumple tu destino. Ve con tu padre y que te pudras, Rosa.
04:49Yo solo quiero ver. Solo quiero ver cuando aprenda a leer, a escribir, a tocar el piano.
04:57El señor se va a enamorar de mí como se enamoró de Isaura.
05:03Pues puedes pasar la vida entera tratando de aprender, Rosa, y nunca vas a ser igual a Isaura.
05:11Eso usted va a tener que esperar para verlo.
05:14Rosa, tienes suerte de que Enrique esté en la cárcel.
05:20Porque si fuera por ti, tu padre no haría el menor esfuerzo por llegar a ese acuerdo.
05:27Y serías mi esclava por el resto de tu vida.
05:33Sucede que voy a dejar de ser esclava.
05:39Y usted va a ver de lo que soy capaz.
05:45¡A ver! ¡A ver! ¡A ver!
05:53¡Dímelo! ¡Dímelo!
06:01¡Dímelo! ¡Dímelo!
06:09¡Dímelo!
06:15Tú no me agradas, Isaura.
06:19¿Y por qué lo dices si no me conoces aún?
06:22Solo quiero advertirte algo. No te andes haciendo la sonsa junto a mi André, ¿oíste?
06:27No debes preocuparte por mí, mujer. Yo quiero a André como a un hermano.
06:32¡No es tu hermano!
06:34¡Muleka! ¿No te pedí que no siguieras molestando a Isaura?
06:37¿Estás cuidando de ella?
06:39Tú sabes muy bien lo que siento por Isaura. Te lo expliqué muchas veces. Y es amor.
06:44¡André, por favor! ¿Tienes el valor de decir eso en mi cara y frente a ella?
06:49¡Tranquilízate!
06:53Yo no consigo ocultar lo que siento, Muleka.
06:56¡Te odio, André! ¡Te odio!
06:59¡Dios! Todo podría ser tan diferente.
07:03Déjame volver aquí, Violeta.
07:06¡No! Ve a conseguir empleo en otro burdel. ¡Fuera de aquí! ¡Vete! ¡Anda! ¡Vete! ¡Vete!
07:14¡André!
07:24¿Qué pasa, señor Belquior?
07:28Lloro de nostalgia por Isaura.
07:32La extraño tanto que me duele.
07:35Que me duele el corazón. ¡Cuánto quiero a esa joven!
07:44Ese tal Dr. Diego.
07:46Tuvo la osadía de hacer una visita a Elena.
07:51Ahora si ese doctorcillo de pacotilla piensa que va a robarme a mi novia y a mi clientela.
07:58Está muy equivocado.
08:04Ay, primo.
08:06La señorita Elena es la más linda criatura de Dios.
08:10Entiendo el amor que mi primo siente por ella.
08:12¿Cómo lo entiendo? Si en mí mismo ya despertó sentimientos.
08:16Dulce, frágil, enferma de ese amor prohibido.
08:21Pero ella ha de recuperarse enseguida.
08:24Le declamé algunos versos románticos y ella me sonrió.
08:28Parecía que ya estaba curada.
08:31Puedo contarte un secreto, primo.
08:35La señorita Elena me está perturbando más de lo que debía.
08:39Ante ella siento una especie de éxtasis.
08:42Tengo el impulso de protegerla, de acariciarla.
08:46De consolar todo el dolor que siente por ti, primo.
08:50Disculpa, oí voces. ¿Ya reaccionó?
08:54No, prima. Era yo quien estaba hablando.
08:57¿Solo?
08:59Con Gabriel.
09:01Pero si él está en coma no puede oírte.
09:02Sí, pero tuve la intención de provocarlo hablando con él para ver si me oía y salía de este estado.
09:09Tú sabes lo que haces.
09:11Yo también varias veces he tenido el impulso de conversar con Gabriel.
09:16Vamos a necesitar de un acompañante para él.
09:19Alguien que viva en función de cuidarlo, limpiarlo y ver constantemente cómo está.
09:24Vamos a encontrar a alguien.
09:27Estábamos también aquí en la hacienda de mi coronel.
09:32Demasiado bien.
09:36¿Por qué será que el señorito Leóncio insiste tanto en llevarnos de nuevo para la hacienda?
09:43Para poder hacer sus maldades.
09:48Señor Joao. Señora Joaquina.
09:51¿Por qué sus Mercedes están tan tristes? ¿Qué fue lo que sucedió?
09:55Es que el señor coronel va a perdonar la deuda de 40 mil reales que el señor Leóncio tiene con él.
10:02Por la libertad del señorito Enrique.
10:06Pero eso es muy bueno. ¿Enrique va a salir de la cárcel?
10:10Sí. Por la libertad del señorito Enrique y de Rosa también.
10:16¿De Rosa? ¿Mi padre va a liberar a aquella bastarda ramera?
10:20Pero con tantas noticias buenas. ¿Por qué sus Mercedes están así?
10:24Es que nosotros dos somos parte de ese acuerdo también.
10:30¿Pero cómo es eso?
10:32Porque para poder lograr que el señor Leóncio retire la queja contra su hermano.
10:39Él quiere que el coronel nos devuelva allá a la hacienda.
10:43Pero eso es injusto. Mi padre no puede entregar a sus Mercedes.
10:48Muchas gracias, papá.
10:51Pensaste que iba a dejarte aquí por mucho tiempo, ¿eh?
10:55Qué bien que Leóncio aceptó su propuesta.
10:57Hijo, si fuese preciso, me desaharía de todos mis bienes para verte en libertad.
11:04Escucha, ahora puedo apreciar el sufrimiento del señor Miguel.
11:08Nada, nada en este mundo puede ser más triste que ver a un hijo cautivo, sin libertad.
11:19Solo lamento que mi libertad tenga que costar el regreso de los viejos esclavos a la hacienda de ese miserable.
11:24Sí, yo no tuve elección, Enrique. Eras tú o ellos.
11:30Leóncio siempre consigue la forma de derramar su yei.
11:33Sí, bien.
11:37Debo ir ahora a la hacienda de los Almida.
11:42Voy a hablar con el canalla y arreglar de una vez estos detalles.
11:48No veo la hora de sacarte de aquí, hijo.
11:51Pero es muy preocupante, papá.
11:53Es terrible saber que Joao y Joaquín están a merced de las crueldades de Leóncio.
11:57Lo más importante, Enrique, es que tú ahora ya no corres el riesgo de ser condenado y tal vez hasta ahorcado.
12:05No te preocupes demasiado por el destino de los esclavos.
12:08Procura ver las cosas por el lado bueno.
12:11Leóncio va a firmar un documento liberándote de todas las acusaciones.
12:15Y yo voy a conseguir arrancar a Rosa de sus garras.
12:23Ay, ay, ay. ¿Qué es lo que dices ser, Rosa?
12:27Noble.
12:29Yo quiero ser noble igual que la condesa.
12:32Noble. Eres una burra. No es noble. Aprende a hablar.
12:37Entonces, yo voy a encontrar así a un noble y él me va a convertir en una princesa.
12:45¿Ya pensó? La princesa Rosa.
12:49Sueña, Rosa. Sueña, esclava.
12:54¿Por qué?
12:57¿Acaso no tengo cara de princesa?
13:00Tú tienes una cara de ser una esclava muy presumida, Rosa.
13:06Pues sepa que yo estoy así, muy feliz.
13:11Y es que ya no voy a ser esclava de un tal señor Leóncio Almeida.
13:18No lo estás.
13:20Vas a sentir mucho mi ausencia.
13:24Vas a extrañar cómo te abrazo y mis besos.
13:29Aproveche, señor Leóncio. Aproveche que hoy aún soy su esclava.
13:36Entonces es nuestra despedida.
13:39Sí. Después, nunca más.
13:43Siempre, Rosa. Una vez mía, siempre serás mía.
13:49Pero el señor está muy convencido, ¿verdad, señor?
13:53Y tú me adoras, esclava.
13:55Pero usted habla mucho, señor.
13:58¿Sabe lo que yo quisiera?
14:00Habla.
14:02Yo quisiera que la señora Malvina entrara por aquella puerta y nos viera los dos juntos.
14:06Ah, Malvina no necesita ver nada. Ella se imagina todo, Rosa.
14:09Pero yo quería ver la cara que iba a hacer.
14:12¿Qué movería, Rosa?
14:14No movería ninguna. Le iba a dar un ataque.
14:17Basta de hablar de Malvina y vamos a lo que interesa, ¿eh?
14:21¿Sabe, señor Leóncio? A veces pone una cara que parece hasta un animal, uno de esos bien bravos.
14:28Yo quiero una despedida de rey.
14:42¿Usted qué pretende hacer con Rosa?
14:44Mi obligación es protegerla.
14:46¿Qué, papá? Aquella mujer no vale los frijoles que come.
14:50No olvides que ella también lleva mi sangre.
14:53Ah, entonces usted cree eso, pero puede que no sea verdad.
14:56Yo lo sé. Ella es mi hija.
14:59Aunque lo sea, no pasa de ser una bastarda.
15:01Es una bastarda, es una esclava, pero es mi hija.
15:04Ignorante, malcriada, perdida.
15:06Es todo eso y continúa siendo mi hija. ¿Qué se puede hacer?
15:09Usted también, papá. Cada día nos aparece con un nuevo hijo.
15:13Primero fue Rosa, después Gabriel.
15:16¿Cuántos hermanos tengo que aún no conozco?
15:18Escucha, Malvina, nosotros ya discutimos eso.
15:21Y no admito que me faltes al respeto.
15:24Por otro lado, hasta es bueno que aquella mujerzuela ya no esté en casa de mi marido.
15:29Entonces, ¿por qué no me lo agradeces en vez de estarme fastidiando?
15:33Pero por otro lado, ya le dije, papá, que no admito tener un hijo.
15:37Ya le dije, papá, que no admito tener que convivir en la misma casa con Rosa.
15:42Eso ya lo sé, Malvina.
15:44Por lo tanto, si ella entra por aquella puerta, yo me voy de aquí.
15:49Puedes estar tranquila que ella no entrará por aquella puerta.
15:53Ella va a volver a la pensión.
15:58Gracias a Dios.
16:00Era eso lo que quería saber.
16:02¿O tendría que marcharme de aquí, papá?
16:03Yo me arrastraría a los pies de Leoncio si fuera preciso.
16:07Iría a la barraca, pero aquí no me quedaba.
16:09¿Pero por qué es eso? ¿Qué idea es esa, Malvina?
16:11¿Ir a la barraca de Leoncio o no? Creo que me estoy volviendo viejo y loco.
16:15Era solo lo que me faltaba.
16:18Así como se obsesiona por las esclavas.
16:21Hasta no sería mala idea.
16:23No, no, no, hija mía. Evítame este desvarío.
16:26Esto ya está sobrepasando los límites.
16:28Yo no voy a ocultarlo, papá.
16:30Isaura escapó. Se marchó de la hacienda.
16:33Pero puede volver.
16:35Leoncio va a mover medio mundo para tener a la esclava de vuelta.
16:38Pues yo voy a rezar para que Isaura consiga huir.
16:42Y se vaya muy lejos de aquí.
16:54¿Papá?
16:55Isaura.
16:57Estamos limpiando y preparando las armas.
17:00Y gracias a la condesa Tomasia, el quilombo está muy bien armado.
17:04Debo hablar con usted en privado en cuanto tenga usted tiempo.
17:08Hija, claro. Por favor, continúen trabajando.
17:13Hija mía, ¿qué pasa?
17:16Pareces estar muy agobiada.
17:18¿Qué sucedió?
17:20Quiero marcharme del quilombo.
17:22Ya nos iremos, hija mía. Debemos quedarnos un poco más.
17:26Los senderos están llenos de cazadores, de esclavos, policías y capataces.
17:30Vamos a continuar nuestro viaje, pero con seguridad.
17:33¿Y cuánto tiempo más cree usted que debemos quedarnos?
17:36Hija, no sé qué decirte.
17:38Pero algún tiempo. Una semana o dos.
17:41Ya no quiero perjudicar más la vida de André.
17:44Ya basta con todo lo que sucedió en aquella hacienda con Rosa.
17:48Hija mía, tú eres tan...
17:50joven y has sufrido tanto.
17:52Yo solo deseo vivir en paz con usted, papá.
17:56Te prometo que pronto vamos a salir de aquí.
17:59Iremos a Sao Paulo.
18:01¿Quién sabe si allá puedas encontrar a la persona que te va a hacer realmente feliz?
18:05Yo ya lo tengo a usted.
18:08Muchas gracias, hija.
18:10Pero antes de morir, tengo un gran sueño.
18:13Ver que encuentres a un hombre de buen corazón
18:16que realmente merezca tu amor.
18:19¿Pero qué esperabas, hijo mío?
18:22Que Blanca se deshiciera de todas las joyas que tiene para tu campaña
18:26para liberar a los esclavos.
18:28No es eso, mamá.
18:30Yo tampoco te di los pendientes que fueron de mi abuela,
18:33ni te di el collar que fue de mi madre,
18:36ni los anillos que eran de mi bisabuela.
18:38Sí, pero usted dio muchas más joyas para nuestra campaña,
18:41muchas más que la señorita Blanca.
18:43Pero una mujer no tiene que deshacerse de sus sueños.
18:45Pero una mujer no tiene que deshacerse de todas las joyas de su familia
18:48porque eso quiere el joven que a ella le gusta.
18:51Usted habla de una forma,
18:53como si supiese de fuente segura que está enamorada de mí.
18:56Creo que eso ya no es un secreto para nadie.
18:59Procura entender una cosa, mamá.
19:02Ya no soy ningún niño.
19:04Sí quiero casarme, muy bien,
19:06pero deseo casarme con una esposa que dame con ardor.
19:09Ay, hijo mío, eres en verdad muy soñador.
19:12Pero yo siento, siento que voy a encontrar a la princesa, mamá,
19:15a la hada, a la ninfa,
19:17y que ella va a ser el gran amor de mi vida.
19:19¿Tú crees?
19:21¿Crees que esa joven que tanto idealizas, crees que existe?
19:26Ella es muy real, mamá.
19:28Ella tiene un alma noble,
19:31sabe porte de princesa y gracia de ninfa.
19:35Entonces mira bien a Blanca
19:37y verás como ella encaja muy bien en tu vida.
19:40Como ella encaja muy bien en tu descripción.
19:43Yo quiero una joven, mamá,
19:45que despierte en mí un sentimiento mágico,
19:47sabe, como una hada.
19:49Ay, olvida tus cuentos de hadas,
19:51mira a tu alrededor
19:53y trata de encontrar a alguien mejor que Blanca en nuestra sociedad.
19:59Oigan, después del almuerzo,
20:01quiero llevarlos a conocer el río.
20:03¿Te refieres al río de las piedras?
20:05Ese mismo.
20:07Pero Bernardo pidió guardar el secreto con la gente del quilombo.
20:10Solo Muleka y nosotros lo sabemos.
20:13¿Quieres acompañarnos, Esaura?
20:16Sí quiero, padre.
20:18Va a ser muy bello pasear con usted.
20:21Ay, sentir el gozo de la libertad.
20:25Entonces vamos todos,
20:27vamos a conocer ese río con mucho gusto.
20:29Oiga, señor Miguel, Muleka me dijo
20:31que Bernardo ya hasta encontró una piedra.
20:33Después la vamos a vender
20:35y con ese dinero,
20:37podré comprar la libertad de mi padre y de mi tía Joaquina.
20:39Siento tanta nostalgia, los extraño.
20:41Qué bueno que el coronel los alejó de aquel maldito.
20:44Pero después,
20:46quiero volver de vez en cuando
20:48para poder saber cómo están.
20:50Eso quiero.
20:52Me parece muy bien, André,
20:54porque cuando yo ya esté verdaderamente muy viejito,
20:56va a ser mi hija Esaura quien va a cuidar de mí.
20:58Sí.
21:03Usted no puede hacer eso.
21:05No podía hacer otra cosa, Elena,
21:06trato es trato, di mi palabra.
21:08¿Y desde cuándo la palabra de aquel miserable
21:10vale alguna cosa?
21:12Leóncio va a firmar documentos
21:14cediéndome la propiedad de Rosa
21:16y retirando la demanda contra Enrique.
21:18No puedo dejar a tu hermano en la cárcel, Elena.
21:20Padre, debe haber otra salida.
21:22Malai, tuve que acceder,
21:24Leóncio no me dio elección.
21:26Usted no debió aceptar
21:28las imposiciones de aquel miserable.
21:30Pero yo tenía que aceptar
21:32o Enrique continuaría en la cárcel
21:34pudiendo hasta ser ahorcado.
21:36No entiendo, papá.
21:38Pero no quiero que doña Joaquina
21:40y el señor Joao
21:42vuelvan a la hacienda de aquel monstruo.
21:44Él va a hacerle daño a los dos.
21:46Ay, papá, yo no quiero.
21:48Tranquila, señorita.
21:51Yo ya viví mucho,
21:54yo ya aguanté mucho
21:56y voy a aguantar
21:58hasta que Dios quiera.
22:01Señorita,
22:03yo tengo mucha fe
22:05gracias a Dios.
22:07Mucha fe en mi corazón.
22:09No sea angustia, señorita Elena.
22:11Su padre, el señor Coronel,
22:13no podía hacer la cosa.
22:15Oiga, yo lo siento mucho,
22:18pero en mi corazón de padre
22:20no tengo otro remedio.
22:22Tengo que salvar a mi hijo.
22:24Tengo que arrancar a Enrique
22:26de esa maldita cárcel.
22:28Lo sé, papá.
22:30Pero no puedo dejar
22:31en esa maldita cárcel.
22:33Lo sé, papá.
22:35Estoy sintiendo mucho dolor.
22:37No basta que Gabriel sea mi hermano.
22:39No basta que él esté en ese estado.
22:41Ahora esto.
22:43Voy a perder a doña Joaquina y a Joao.
22:45¿Qué sabes, señorita?
22:48Si un día nosotros
22:50volvamos a encontrarnos.
22:55¿No puede hacerse algo, papá?
22:58No, Malvina.
23:00Tú conoces muy bien a Leoncio.
23:02Él sabe que voy a hacer
23:04todo lo que él quiera
23:06para salvar a mi hijo.
23:08Entonces voy a escribir una carta
23:10a mi marido pidiéndole
23:12que no vaya a maltratarlo.
23:14No, no, no, Malvina.
23:16Él ya no es tu marido.
23:18Él es mi marido.
23:20¿Fue él con quien me casé?
23:22Pero tú saliste de allá
23:24jurando que nunca más ibas a volver.
23:26Papá, yo...
23:27Yo fui un de Leoncio por Isaura.
23:29Pero ahora...
23:31¿Ahora el esclavo escapó?
23:33Te prohíbo que vuelvas otra vez
23:35a la casa de aquel crápula.
23:37No voy a volver a un papá.
23:39Como usted mismo dijo,
23:41no me voy a ofrecer.
23:43Yo voy a...
23:45esperar a que él sienta
23:47el peso de la soledad
23:49y comprenda la burrada que cometió.
23:51Solo entonces volveré.
23:53No, no, esta es una pesadilla.
23:55Pero debo insistir
23:57en mi carta,
23:59pidiéndole que no maltrate
24:01a estos pobres esclavos.
24:12¡Bernardo!
24:14¡Oye, Bernardo!
24:16¡Andrés!
24:18¡Mi viejo amigo de la guerra!
24:22¡Eh, mi hermano!
24:24Oye, llegamos anoche a Quilombo, amigo mío.
24:25¿Te acuerdas del señor Miguel?
24:27¡Señor Miguel!
24:29¡Claro! ¡Hola, señor Miguel!
24:31De ella no necesitas decirme nada.
24:33¡Es Isaura!
24:35Así que lo consiguieron.
24:37Pero fue difícil.
24:39Déjame cambiar el rumbo de la plática.
24:41Con todo respeto,
24:43la señorita es muy linda.
24:45Por favor, ¿qué me hace?
24:47Oye, Bernardo,
24:49fue una guerra sacar a Isaura
24:51de la hacienda de aquel infeliz.
24:53¿Verdad?
24:55Sí, de la valentía
24:57de mi padre
24:59y de Andrés también.
25:01Para ver ese rostro feliz por ser libre, Isaura,
25:03yo daría hasta mi vida.
25:05Ay, Andrés.
25:07Pero las noticias que corren por ahí, señor Bernardo,
25:09es que usted ahora es un hombre muy rico.
25:11¡Ah, señor Miguel!
25:13¡Deje que le muestre esto a usted!
25:15Los diamantes que ya saqué.
25:17¡Mire esto! ¡Mire!
25:19¡Diamante!
25:21¡Diamante, diamante, diamante!
25:23¡Muchos diamantes!
25:25¿Valen?
25:27¿Valen dinero, Bernardo?
25:29Aquí están en su estado bruto.
25:31Pero después de que sean pulidas,
25:33estas deben valer una fortuna.
25:35Sí.
25:37Señor Bernardo, yo no entiendo mucho de minería,
25:39pero por el aspecto de esto,
25:41se puede ver que son diamantes
25:43de buena calidad y mucho valor.
25:45Sí, pero es mejor no decir nada a nadie,
25:47no divulgar la noticia,
25:49para que esto no se convierta en un hormiguero.
25:51Usted no debe preocuparse.
25:53La única cosa que yo quiero
25:55es ser rico, señor Bernardo.
25:57Solo quiero asegurar
25:59la libertad de mi hija Isaura.
26:01Estas piedritas de aquí, señor Miguel,
26:03tienen el poder de convertirlo en un hombre rico.
26:05Y estas piedritas de aquí
26:07han de liberar a mi padre y a mi tía.
26:26Ay, Malvina.
26:28Siento mucha pena por ellos.
26:30Yo también, hermana.
26:32Pero como papá dice,
26:34eran ellos o nuestro hermano.
26:37Ay.
26:39Siento como si fuese a morir.
26:44Ay, hermana.
26:46Continúas con fiebre.
26:52Los buenos días.
26:54Los buenos hijos vuelven a casa, ¿verdad?
26:57¿Creyeron que se librarían de mí?
27:00La niña Baráe le tumaré.
27:03Cierra la boca, Joao.
27:05Te prohibí hablar la lengua de los negros aquí en mi casa.
27:07Señor Leóncio,
27:09tenga piedad de nosotros.
27:12Yo lo vi crecer
27:14y nunca lo quise mal.
27:16Yo no confío en ti, negra.
27:18Para mí tú no pasas de ser una hechicera.
27:21Nunca más vas a cocinar en mi casa.
27:23Me querrías envenenar.
27:25Hice tanta comida en esta casa.
27:28El señor creció comiendo mi comida.
27:32Arroz, frijol, carne y papas.
27:35Nunca pensé en venenar al señor.
27:39¿Ni cuando tu hermana,
27:41Manuela, la mujer de Joao, murió?
27:43Nunca, señor Leóncio.
27:46Porque no soy yo quien voy a juzgar.
27:49Es Dios nuestro señor.
27:51Padre suyo y mío.
27:55Joaquina, siempre fuiste una esclava muy mentirosa.
28:00Ya lloré mucho con su actitud.
28:04Y fue con tristeza
28:07que un día tuve que ver
28:10el saco robado al señor Miguel
28:13en su mano.
28:15Fue por eso que fuiste a parar al tronco, negra maldita.
28:19Si usted no desea mantener aquí a Joao y a Joaquina,
28:25mis hijos y yo sentiremos placer en recibirlos en nuestra casa.
28:31Elena quedó muy conmovida cuando se despidió de ellos
28:36y he traído aquí
28:38esta carta de Malvina
28:41pidiéndole que no maltrate a estos dos.
28:43¿Una carta de Malvina?
28:46Cielos, que interesante.
29:00De mis saludos a ella.
29:07¿Qué?
29:09¿Qué?
29:11Si usted quiere, puedo pagarle más.
29:16Además de perdonarle la deuda a Compra B a los dos.
29:21Quiero quedarme con ellos.
29:23Son parte de nuestro acuerdo.
29:25Tengo buenos motivos para querer a estos dos aquí.
29:29Veo que el coronel cuidó bien de estos viejos.
29:33Están fuertes, saludables.
29:36¡Francisco!
29:37¡Francisco!
29:40¡Francisco!
29:43Mande, señor.
29:46Lleva a estos viejos inservibles a la barraca.
29:49Enciérralos en el cuarto de los fugitivos.
29:52Más tarde, después de que el coronel se vaya,
29:56voy a tener una plática muy seria con ellos.
30:00¡Caminen, negros! ¡Vamos!
30:03Leoncio, trate bien a los dos.
30:06Dios bendiga a usted y a sus hijos.
30:11Muchas gracias, coronel, por todo.
30:14Usted es un hombre de buen corazón.
30:17Si no fuera para salvar al señorito Enrique,
30:21no nos dejaría volver acá.
30:25¡Ya cállate! ¡Vayan a la barraca ahora! ¡Vayan!
30:28¡Vamos, salgan! ¡Caminen! ¡Vamos! ¡Deprisa!
30:31¡Caminen!
30:33¡Vamos, negros!
30:35¡Vamos!
30:44Muy bien.
30:46Ya cumplí con mi parte del negocio.
30:49Ahora es su turno.
30:51Para mostrar al coronel que soy hombre de palabra,
30:55aquí está la carta de venta de Rosa.
30:58Y otra, anunciando el fin de la demanda contra Enrique.
31:03Aún no.
31:05Primero quiero ver los pagares.
31:10Ah, claro.
31:18Ahora sí.
31:21Finalmente llegó el fin de aquella maldita deuda.
31:28Esto sí me causa placer.
31:34Sí, todo es correcto.
31:38¿Usted pretende invertir en la labor para la próxima zafra de café?
31:42Primero voy a buscar a la esclava y después cuidaré de la hacienda.
31:46Lamento su obsesión.
31:50De mis recuerdos a doña Maldina.
31:53A todos los que han preguntado, he dicho que fue a pasar una temporada a la casa de su padre,
31:58pero si ella quisiera volver...
32:03Si dependiera de mi voluntad, mi hija, jamás volvería a poner los pies aquí.
32:08Mi suegro es muy severo para quien llegó a tener una hija con una esclava.
32:15No me debería recriminar, tampoco mi esposa.
32:19No hice nada diferente a mi suegro y a mi padre.
32:24Está en un error, Leoncio.
32:27Yo pude haber sido adultero, pero nunca fui ladrón ni asesino.
32:31Si va a comenzar a ofenderme, puede retirarse porque nuestros negocios ya terminaron.
32:37Entonces haga venir a Rosa, porque ella es ahora de mi propiedad.
32:43¡Rosa!
32:45Rosa, ven aquí.
32:50Como ya te dije, ahora vas a ser propiedad del Coronel Cuña.
32:56Qué ironía, ¿no? Esclava de tu propio padre.
33:01Gracias a Dios.
33:03Gracias, papá.
33:06Levántate. Vámonos.
33:11Ahora va a comenzar una nueva etapa en tu vida.
33:15Tengo la certeza de que vas a sentir nostalgia de esta casa.
33:20Sea feliz, señor Leoncio Almeida.
33:24Adiós.
33:28Que les vaya bien.
33:30Adiós.
33:32¡Ay, pero qué nostalgia de este cuartito!
33:37¡Ay!
33:39¡Ay!
33:41¡Ay!
33:43¡Ay!
33:45¡Ay!
33:47¡Ay!
33:49¡Ay!
33:51¡Ay!
33:53¡Ay!
33:55¡Ay!
33:57¡Ay!
33:58¡Pero qué nostalgia de este cuartito!
34:02¡Cómo fui feliz aquí!
34:04Andaba por la calle, haciendo compras, usando zapatos.
34:09Sí, pero no es bueno andar exhibiéndose por las calles, Rosa.
34:13Las jóvenes de familia deben ser recatadas.
34:17Las jóvenes de familia deben ser juiciosas, ¿entendiste, hija mía?
34:23¿Lo puede repetir?
34:25¿Qué?
34:28Hija mía.
34:36Hija mía.
34:46El señor coronel, mi padre, fue el mejor regalo en toda mi vida, ¿sabe?
34:52Toda mi vida, ¿sabe?
34:55El coronel, mi padre, fue el mejor regalo en toda mi vida, ¿sabe?
35:04Está bien, pero no es preciso, no es preciso llorar.
35:07Todo está bien, no pasó nada.
35:10Vas a tener que quedarte aquí algún tiempo, en este cuarto.
35:15Voy a darte un dinero para tus alfileres.
35:19No.
35:21No sé coser, señor.
35:23No es eso, es solo una forma de decir las cosas.
35:27Es un dinero para tus necesidades de mujer, comprarte un vestido, un sombrero.
35:35Yo siempre tuve deseos de tener un sombrero, ¿sabe?
35:40Cuando mi hermana, la señora Malvina, cuando ella paseaba con aquel sombrero tan bonito,
35:48yo moría de envidia de ella.
35:51Claro.
35:56Aquí tienes, cómprate un sombrero igual al de Malvina.
36:04Bueno, yo volveré aquí la semana que viene para ver cómo estás.
36:10Y no quiero oír ninguna queja del gerente, ¿oíste bien?
36:18Compórtate como una joven de familia.
36:21Me comportaré.
36:23Perfecto, perfecto.
36:25Ahora...
36:27Ahora tengo que ir a la cárcel a resolver el asunto de tu hermano Enrique.
36:37Quiero su bendición, papá.
36:43Dios te bendiga, hija mía.
36:49El señor Leóncio se desistió de la demanda.
36:52Por ello ya no habrá proceso alguno contra mi hijo.
36:56Y el juez expidió la orden de libertad.
36:59Aquí está.
37:04Muy bien.
37:07Yo voy a ir a la cárcel a resolver el asunto de tu hermano Enrique.
37:12Muy bien.
37:15El señorito está libre.
37:24Enrique.
37:28Gracias, papá.
37:33Ya estás libre, hijo.
37:36No sabes lo que es estar en una cárcel.
37:38Ahora lo importante, Enrique, es que nunca más vuelvas a la cárcel.
37:46Quiero que estés siempre a mi lado, libre.
38:09Por los días que pasé en la cárcel,
38:12puedo imaginar el sufrimiento de los esclavos, papá.
38:15Sí, claro, hijo mío, claro.
38:18Solo quiero que me hagas un favor.
38:20No hables de aquella esclava, que no estoy de humor para estas conversaciones.
38:24No se me ocurra.
38:26No se me ocurra.
38:28No se me ocurra.
38:30No se me ocurra.
38:32No se me ocurra.
38:34No se me ocurra.
38:36No se me ocurra.
38:38No te enojes, papá
38:40Yo amo a Isaura y solo voy a ser feliz cuando sepa que está libre.
38:43Entonces ya puedes comenzar a ser feliz.
38:46Supe por el canalla de Leoncio que consiguió escapar.
38:48Está en un quilombo.
38:51¡Qué estupenda noticia, papá!
38:53Gracias a Dios.
38:55Gracias a Dios que está muy lejos de ti.
38:58Pues yo soy capaz de ir tras ella, hasta al mismo quilombo.
39:02¿Ya vas a empezar a contrariarme?
39:05¡Cielos!
39:08Tengo la certeza de que André va a venir aquí a salvarlos, y todo lo que quiero en esta vida, además de tener a Isaura aquí de nuevo, es aprender a ese negro asqueroso.
39:21El señor Leóncio piensa que lo puede todo, porque es rico y poderoso, pero más fuerte es el poder de Dios.
39:29Tú vas a sufrir mucho aún, negro.
39:31No insistas, señor Leóncio, en hacer maldades con nosotros.
39:36¿Y por qué no? Ustedes son unos esclavos fugitivos, obstinados. El tronco fue hecho para ustedes.
39:48Quiero que los esclavos lo comenten, que corra la noticia, de que los estoy castigando todos los días.
39:57El señor se va a arrepentir de cada maldad que cometió en la vida.
40:02Dios castiga la crueldad, señor Leóncio.
40:07Yo siempre hice todo lo que quise, y Dios nunca me castigó.
40:12Pero su hora va a llegar, señor Leóncio.
40:15La justicia de Dios demora, pero no falla, señor.
40:22Si tienen tanta fe, comiencen a rezar, porque el castigo va a comenzar.
40:27¡Francisco! Lleva a estos negros viejos al cuarto de los fugitivos.
40:32Van a pasar la noche ahí, sin beber y sin comer.
40:36Quiero ver a ese negrito aparecer por aquí.
40:40Venga, pita, señor Leóncio.
40:43Llévate a estos malditos de aquí, ve. Llévalos a la barraca, al cuartito de los fugitivos.
40:49Quiero ver al negro asqueroso de André aparecer por aquí.
40:55¡Andén! ¡Vamos a la barraca! ¡Vamos! ¡Cabinen!
41:01¡Dense prisa, negros!

Recomendada