95. La Esclava Isaura (A Escrava Isaura), en español
La historia de Isaura, una esclava que nace en la hacienda del comendador Almeida, en Campos, en el año 1835. Isaura es hija de la bella Juliana, esclava del comendador, y de Miguel, el capataz de la hacienda. Juliana muriO despues del parto, e Isaura fue adoptada y educada por Gertrudis, esposa del comendador, quien siempre quiso tener una hija. Diecinueve años despues, Leoncio, el hijo del comendador, regresa a la hacienda y se obsesiona de ella. Sin embargo, es obligado a casarse por interes con Malvina hija del rico coronel Sebastian. Al morir Gertrudis y Almeida, Leoncio manipula unos documentos para impedir la libertad de Isaura y poder seguir manteniendola bajo su propiedad. Leoncio esta cada vez mas agresivo y su mujer huye de el; quedando Isaura a su merced, con lo cual tambien se ve obligada a escapar ante la violencia que ejerce. Tomasia, la condesa de Campos, la ayuda en su fuga, y aprovecha para cambiarse de nombre: Elvira. La joven conoce luego al verdadero amor de su vida, Alvaro. Pero un dÝa Leoncio la recaptura, regresandola a su condicion de esclava, y tiene la idea de casarla con Belchior, el jardinero deforme. Alvaro intentara la dificil mision de rescatarla.
Encuentra todos los capitulos en https://sites.google.com/view/cyberhome-nicaragua
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Transcript
00:00Señor Leoncio, ¿de qué tragedia está hablando?
00:03Tú tienes que entender una cosa, chico.
00:06¡Nadie va a apartar a Isaura de mí!
00:09¿Y usted qué puede hacer? La subasta es mañana.
00:12Pues si es preciso, yo mataré a Isaura.
00:15Yo mataré a Álvaro.
00:17Yo mataré a Tomásia.
00:19Mataré a todo el que intente apartar a Isaura de mí.
00:22Señor Leoncio, hablando así usted me asusta.
00:25¿Ya pensó si doña Malvina escuchó una cosa así?
00:27Si es preciso, mataré a Malvina también.
00:29Están todos de acuerdo intentando apartar a Isaura de mí.
00:32Pero yo no los voy a dejar.
00:35Yo haré un baño de sangre aquí en esta hacienda.
00:38Igual que aquel que llaman la fiera de Macabú hizo en su hacienda.
00:42¿Y de qué va a servir todo eso, señor?
00:44¿Usted va a quedar sin esclava en la miseria, en la cárcel, esperando la horca?
00:48Pues que venga la miseria.
00:50Que venga la cárcel, que venga la horca, que venga la muerte.
00:53Pero a Isaura no la voy a entregar a nadie.
00:56Hable bajo, señor. Usted necesita ser un poco más cauteloso.
01:00Oiga, esa pasión por Isaura me está afectando en serio.
01:04Lo sé.
01:06Lo sé y tienes razón.
01:09Esa esclavita me está enloqueciendo.
01:15Pero nadie va a apartar a Isaura de mí.
01:17Yo no logro imaginar la vida sin ella.
01:20Y tú me tienes que ayudar.
01:24Esa subasta no se puede hacer.
01:28Pero señor Leóncio, ya está avisado.
01:31Los hacendados ya lo saben.
01:33Ahora sí, casi a la hora va a ser difícil.
01:36Pero tiene que haber una salida.
01:42¿Pero cuál?
01:44¿Cuál?
02:14La verdad negra es difícil, es difícil como qué.
02:18Mi amor, vámonos, en esta tierra voy a morir.
02:23Hoy ya no voy a ser, nunca más voy a vivir.
02:28La verdad negra es difícil, es difícil como qué.
02:33La verdad negra es difícil, es difícil como qué.
02:39Pidiera tanto que Andrés llegase aquí.
02:44Para raptarme.
02:48Rosa.
02:50Andrés.
02:51Rosa.
02:53Andrés.
02:55Por Dios, oye.
02:58Oye, yo estaba pensando en ti, ¿no vas a morir?
03:02Sí, yo estaba rezando para que tú aparezcas y apareciste así, vestido igual a un príncipe.
03:09Rosa, qué gusto de verte.
03:11Llévame al quilombo.
03:13Yo quiero huir de aquí, Andrés.
03:15Qué idea, Rosa, tiene gracia, ahora eres una señorita.
03:19Es que mi padre me maltrata mucho.
03:21Él me trata igual que a un cachorro rabioso.
03:23Oye, él no me deja casar.
03:25Él no me da mi carta de libertad.
03:27Y quiere que me quede con él para cuidarlo en la vejez, ¿ves?
03:32Ay, yo creía que tú eras feliz aquí.
03:35Andrés, pero aquí así, yo no soy feliz, ¿no?
03:38Yo estoy presa, ¿sabes?
03:40Yo estoy más presa y más esclava aquí de lo que era en la hacienda del señor Leóncio.
03:44Llévame al quilombo, sí, oye, por el amor de Dios.
03:47Ahora tengo que volver a la hacienda de la condesa para ayudar en la subasta de Isaura.
03:51¿Isaura?
03:52Pero siempre aquella desgraciada estorbando la vida de la gente, ¿no, Andrés?
03:56Isaura no merece ese odio que tú le tienes desde pequeña, Rosa.
04:00No merece, sí.
04:01Oye, no voy a discutir eso y menos contigo.
04:04¿Y vuelves por mí?
04:06Claro que sí, lo prometo.
04:08Oye, después de la subasta, pero mañana mismo, cuando se ponga el sol por la tarde, vengo a buscarte.
04:13Solo tengo que ver y hablar con Isaura.
04:16Después vengo por ti para llevarte para el quilombo.
04:18Pero dijiste de nuevo el nombre de aquella hipócrita, Andrés.
04:22Andrés, oye, no vayas a dejarme esperando por causa de Isaura.
04:25Deja a Isaura en paz, Rosa.
04:28Ella se va a casar con el señor Álvaro.
04:31Bien hecho.
04:33Cansada estoy de decir que no merecía su amor.
04:37Bien hecho.
04:38Ella merece mi amor, sí, porque ella es una persona muy buena.
04:41Solo que ella decidió casarse con el señor Álvaro.
04:44Yo quiero ver a Isaura feliz.
04:46Del mismo modo voy a intentar ser feliz.
04:48¿Y tú no quieres ya a Isaura?
04:52Claro, claro que sí.
04:54Y la voy a querer siempre.
04:56¿Aunque ya sea de otro?
04:58Aunque no sea mi mujer, yo voy a quererla para siempre.
05:01Mi corazón es muy grande, Rosa.
05:04Cabe mucho amor en él.
05:06¿Hasta para casarte con otra mujer?
05:11Pues no sé.
05:12Andrés.
05:18Negrito, mi negrito.
05:21Oye, Rosa.
05:22Yo voy a llevarte al quilombo.
05:25Pero no te estoy prometiendo matrimonio.
05:27Es que aún estoy muy dolido, estoy muy dolido.
05:30Y estoy con la cabeza y el corazón hechos un nudo de tanta confusión.
05:35Bueno, yo voy contigo al quilombo.
05:38Porque yo sé que Isaura nunca se va a casar contigo.
05:45Pues mañana, en el ocaso, yo vuelvo por ti para fugarnos para el quilombo.
05:51Yo voy a esperarte.
06:06Yo veo que estás más quebrantada que nunca, Isaura.
06:11El trabajo pesado te ha agotado.
06:14Estás delgada, perdiste vigor.
06:18Un poco de belleza también.
06:21Hago mi trabajo con mucho empeño, señora.
06:24Lo sé.
06:26Yo veo que trabajas sin quejas.
06:30Y soportas aún las peores humillaciones, los peores castigos de mi marido.
06:36Y es sorprendente esa dedicación a tus labores.
06:41No hay duda que doña Gertrudis te educó muy bien para la vida.
06:46Mi madrina.
06:51Desde pequeña.
06:55Ella...
06:58Ella me enseñó la...
07:01La virtud de la paciencia.
07:04Ella siempre...
07:07Tuvo preocupación de que el comendador nunca me diese mi libertad.
07:13Por eso ella misma...
07:15Ella misma me enseñó con mucho cariño a esperar.
07:19Y a prepararme para cualquier situación.
07:24Y ella hizo muy bien.
07:27Solo ve la situación en que te encuentras ahora, Isaura.
07:31Y en su peor pesadilla.
07:34Doña Gertrudis imaginó tal destino para ti.
07:38Ciertamente que no.
07:41Pero el trabajo me ayuda a pasar el tiempo.
07:45Y trabajando así yo tengo menos tiempo para sentirme infeliz.
07:50Pero creo que ahora tienes un buen motivo para alegrarte, Isaura.
07:58Estoy viva, señora.
08:00Eso ya es un gran motivo.
08:03Y aún tengo fe.
08:05Sin duda alguna.
08:07Pero...
08:08Ahora, Isaura.
08:09Más que nunca.
08:11Yo siento que tu libertad está próxima.
08:14Leoncio no tiene cómo dejar de venderte en la subasta.
08:17Eso espero.
08:19La subasta servirá para...
08:21Que mi marido recupere parte del dinero que perdió en tu captura.
08:26Y al mismo tiempo me deja muy feliz.
08:29Porque finalmente yo voy a poder cumplir el juramento que le hice a mi suegra y a mi suegro de liberarte.
08:35Tengo la certeza de que tú vas a ser libre, Isaura.
08:38Porque el señor Álvaro va a comprarte.
08:41Yo tengo información segura de que él ya está en la ciudad.
08:45Y tuve el cuidado de mandarle avisar de la subasta.
08:49Pero mi marido no sabe eso.
08:52Ya mandé mensajeros a avisar en las principales haciendas de la región.
08:58Y en especial a la hacienda de la condesa.
09:01Que es donde el señor Álvaro está, según me informaron.
09:08Muchas gracias, señora.
09:11No me agradezcas, Isaura.
09:13Es por mi propio interés.
09:23Es una vergüenza que tan angelical criatura sea expuesta a la venta así.
09:27Como una mercancía cualquiera.
09:31Pero sacaremos el mejor partido de la situación.
09:34Comprando a Isaura y dándole la libertad.
09:37Yo estoy más preocupada ahora de lo que estaba.
09:40¿Y por qué, mamá?
09:41Porque si el propio Leoncio mandó ese mensaje,
09:44aumenta mis temores de que él está preparando una artimaña.
09:48Tendrá ya una emboscada preparada.
09:51Va a poner pistoleros en el camino.
09:54Pues lo que él siempre hace fue así con el conde, fue así con Diego.
09:59Eso fuera de todas las tentativas fallidas de matarnos.
10:03El ataque a nuestra hacienda, el caso de los bombones envenenados.
10:08Y aún así, ustedes quieren ir a su hacienda
10:14como ratoncitos atraídos directo a la ratonera.
10:18Pues entonces vamos por otro camino.
10:20Damos la vuelta por el río Paraíba y llegamos a la hacienda por el otro lado.
10:24Sí, y podemos ir también en carro de alquiler.
10:27Sin su escudo de armas podemos llegar sin llamar la atención.
10:30El mensajero dijo que no fue Leoncio quien mandó la invitación.
10:33Fue su esposa, doña Malvina.
10:36Es cierto, doña Malvina no ve la hora de verse libre de una vez por todas de Isaura.
10:40Con certeza, la presencia de Isaura es muy incómoda para Malvina en aquella casa.
10:45Nos favorece, aún contamos con doña Malvina como nuestra aliada.
10:49Invitados por la dueña de la casa, el canalla no podrá impedirnos la entrada.
10:53Él va a tener que admitir mi presencia en su propia casa.
11:07Malvina.
11:20Recibí un mensaje de Malvina diciendo que finalmente...
11:23...Leoncio decidió subastar a la esclava Isaura.
11:27Espero que después de eso Malvina quede un poco más relajada.
11:31Pretendo mandar una respuesta confirmando mi presencia en la subasta.
11:35¿Por qué?
11:37¿Usted también está queriendo comprar a Isaura?
11:40Claro que no, Rosa, claro que no.
11:43Tan solo quiero visitar a mi hija Malvina y ahí va a ser eso mismo.
11:47Y aprovecho para ver cuando Leoncio va viendo más gente de las que tengo con mi yerno.
11:51Hace tiempo que andan.
11:53Esa Isaura tiene una suerte enorme, ¿no?
11:57Va a ser subastada.
12:00Y ahí un dueño de hacienda va a comprarla.
12:03Y se va a casar con la estúpida.
12:06Es verdad, Rosa.
12:08Llegaron a mis oídos...
12:10...algunos comentarios respecto a un joven señor paulista.
12:14Pero, ¿cómo fue que supiste de eso?
12:17Pues, yo oí unos comentarios allá en la cocina y en la barraca también.
12:22Hasta me parece que ese joven la ayudó...
12:26...en su fuga en Sao Paulo.
12:28Y después se enamoró de ella a tal punto...
12:31...que hoy está en campos para liberarla.
12:34No se lo dije.
12:36La ordinaria se va a poder casar aún antes de mí.
12:39Bueno, sí.
12:41Si de hecho el joven puede comprarla en la subasta, ciertamente que sí.
12:46Qué odio siento.
12:48Yo siempre quise un señorito solo para mí.
12:52Que me dé libertad y se case conmigo y la ordinaria de Isaura ya consiguió uno.
12:57No seas envidiosa, Rosa.
12:59Qué cosa fea.
13:01Siquiera sabemos si de hecho León se va a venderle a ese joven a Isaura.
13:06Tal vez, de preferencia a un comprador que sea su amigo...
13:09...y que sea tan inmoral como él.
13:12Todo mundo quiere ser feliz en esta vida y yo también.
13:17Ahí vienes con la vieja cantaleta.
13:19Sí.
13:21Yo quiero y voy a ser feliz.
13:23Voy a tener un hombre solo mío.
13:25Puede no ser igual al señor de Isaura.
13:27Puede ser el dueño de Hacienda, pero va a ser solo mío.
13:30Tú solo piensas en eso, Rosa.
13:32¿Por qué? Aquí no te falta nada.
13:34Sí me falta.
13:36Falta felicidad, alegría, un marido, una familia...
13:41...que solo voy a tener el día que sea libre.
13:44Qué bueno que mi hijo Enrique está bien lejos de aquí.
13:48Porque si él llega a saber que Isaura está haciendo subastada...
13:52...es capaz de vender su propia alma para intentar comprarla.
13:58Día 2
14:06Estamos de suerte, Bernardo.
14:08¿Cómo no estarlo?
14:11Con tantos diamantes aquí en la bolsa, hombre...
14:13...somos los hombres más suertudos de este mundo.
14:16Sí, nuestra suerte continúa.
14:18Acabo de saber que el mayor comprador de diamantes de la región...
14:22...el señor Campos de Faria, está en la casa de doña Serafina.
14:26Ah, pues vamos allá a hablar con él.
14:28Sí, vamos a mostrarle las piedras ya que las valora.
14:31Pero no se vaya a entusiasmar con la primera oferta.
14:34Debemos ser astutos.
14:36Negociar, decir que no.
14:38Esperar el mejor precio.
14:40Por eso eso se lo dejaré a mi socio.
14:42No, no, no.
14:43El comprador puede no querer hacer negocios conmigo.
14:46Usted va a cerrar el trato.
14:48Yo voy a estar ahí al lado.
14:51A la hora de ver si la moneda es falsa o verdadera...
14:54...ahí sí yo entro y voy a querer ver.
14:56De acuerdo.
14:57Vamos a la casa de doña Serafina...
14:59...a encontrar al comprador...
15:01...y a venderle nuestros diamantes.
15:04¡A casa de doña Serafina!
15:24¡A casa de doña Serafina!
15:54Mi vida está a su lado, señorita Isauro.
15:59Acepte.
16:03Yo acepto.
16:05Gracias a Dios.
16:07Por fin oí el sí.
16:08¿Se quiere casar conmigo?
16:09Sí.
16:10Sí, me quiero casar con usted.
16:12¡No sabe todo!
16:14¡No sabe todo!
16:15¡No sabe todo!
16:16¡No sabe todo!
16:17¡No sabe todo!
16:18¡No sabe todo!
16:19¡No sabe todo!
16:20¡No sabe todo!
16:21¡No sabe todo!
16:22¡No sabe todo!
16:23¡No sabe todo!
16:24¡No sabe todo!
16:25¡No sabe todo!
16:27Dios permita no separarnos nunca.
16:53Escríbanme cuando tengan un domicilio donde pueda encontrarlos en los Estados Unidos.
16:57Yo voy a tu encuentro, mi amor.
17:02Adiós, mi amor.
17:05Adiós, mi amor.
17:23¿Qué pasa? ¿Por qué dejaste de trabajar?
17:45Yo estaba descansando las manos, señor.
17:49Yo ya enceré el piso. Solo falta pasar el paño y después limpiar el chiquero.
17:55Mentira. Estaba soñando con aquel hacendado ridículo, ¿no es verdad?
18:02¿Sabes cómo lo sé?
18:05Porque los enamorados pasan todo el tiempo delirando de amor.
18:11Del mismo modo que yo me estoy consumiendo de tanto pensar en ti.
18:20Déjame ver tus manos.
18:26Están sucias.
18:30No parecen aquellas manos mágicas que tocaban en el piano canciones inolvidables.
18:38Son manos de una esclava, señor.
18:40Manos de una tonta que prefiere la esclavitud, prefiere ser humillada, maltratada.
18:47Ahora está corriendo el riesgo de morir.
18:50Y todo eso, en lugar de aceptar, ser tratada con ternura y amor por mí.
18:58Mírame cuando te estoy hablando.
19:03Por favor, señor, déjeme trabajar en paz.
19:08¿Quieres trabajar?
19:10¿Quieres trabajar, miserable?
19:14Pues yo te voy a dar un trabajo que me va a dejar muy feliz.
19:17Yo voy a sentir tus manitas cansadas en mí.
19:23¿Qué quieres?
19:24Corta mis uñas.
19:27Pero señor, yo...
19:28Corta mis uñas, esclava.
19:31Yo no tengo tijeras.
19:37Yo tengo.
19:40Lava tus manos y corta mis uñas.
19:44O vas a sentir las tijeras herir tu piel.
19:49Yo no tengo ya nada que perder además de ti, Zahra.
19:58Lava tus manos para cortar mis uñas.
20:10Ahora corta, corta.
20:14Quítame el zapato.
20:18Vamos a empezar por las uñas de los pies.
20:39Yo voy a cortar las uñas de mi señor.
20:44A doña Malvina no le va a gustar.
20:50Malvina está paseando por el jardín, echando de menos las flores.
21:03Eso, vamos, corta.
21:06Me gusta sentir el toque suave de tus manos en mis pies.
21:10Corta.
21:12Corta dulcemente mis uñas, mi amor.
21:33¿Qué es lo que pasa?
21:34Necesito declararme.
21:37Sargento, si es lo que estoy pensando, por favor, no se declare.
21:41Ya no puedo guardar más el secreto de mis sentimientos.
21:45Yo la amo, señora.
21:48Y deseo casarme con usted.
21:49Oiga, sargento.
21:51Francamente, por quien es usted, tenga respeto.
21:56Yo vine aquí para visitar al señor Miguel, no para ser importunada por usted.
22:00Que está aquí solo cumpliendo su deber.
22:02Si usted me importuna una vez más con tales declaraciones,
22:07lo voy a reportar a sus superiores.
22:10Con permiso.
22:14Por lo menos lo intenté.
22:23¿Y bien, señor?
22:25Son los más lindos diamantes.
22:27Sí.
22:32Doy cincuenta mil reales por la partida.
22:35Es poco.
22:38Es poco.
22:39Es poco en verdad, señor.
22:41Usted quiere pagar la mitad de lo que valen.
22:45Está bien.
22:47Doy setenta y cinco mil reales y no se hable más de esto.
22:50De ningún modo.
22:51Espere.
22:55¿Y qué?
22:56¿Yo puedo decir unas palabras a mi socio?
22:58Solo será un momento.
23:00Disculpe.
23:01No tardaremos.
23:02Ven.
23:06Es una fortuna.
23:07Esta vez el señorito Enrique ahorcará su patio.
23:10¿El coronel va a ser colgado?
23:12Santa ignorancia.
23:14Es un modo de hablar, boba.
23:16¡Setenta y cinco mil reales!
23:19Creo que ya es bastante, señorito Enrique.
23:22¿Y si se arrepiente?
23:24Bernardo, fuiste tú mismo quien dijo que valen mucho más.
23:28Sí, sí, sí.
23:29Valen hasta cien mil reales.
23:32Sí.
23:33Sí.
23:34Valen cien mil.
23:35Tiene que pagar, ¿verdad?
23:37Es lo justo.
23:38Pero yo estoy muy nervioso, hombre.
23:41Y si ese hombre decide no comprar, tendremos que buscar otro comprador en otro lugar.
23:46Tranquilo, Bernardo.
23:48Él nos va a dar más aún.
23:51De setenta y cinco para cien, es poca diferencia.
23:54El señor es mi pastor y nada me faltará.
23:57Por verdes pastos me conduce.
23:59Da vigor a mi alma y guíame por los caminos, señor.
24:06Ay, condesa.
24:09¿Cómo le ha pasado, señor Miguel?
24:12Estoy bien, pero no quiero que usted se preocupe por mí.
24:15¿Cómo no preocuparme si está en esta celda inmunda?
24:20Además, no traigo buenas noticias.
24:23¿Mi hija?
24:24¿Sucedió alguna cosa con Isaura?
24:26No, señor Miguel.
24:29Pero el juez mandó entregar a Leoncio todo su dinero que estaba en depósito en la delegación.
24:35Pero eso es tan absurdo.
24:38Yo también lo creo.
24:40Pero el juez dijo que era para reparar los gastos que él tuvo en la captura de Isaura.
24:45¿Reparar los gastos?
24:48Maldita ley que deja impune a los criminales.
24:53Que proteja a los injustos.
24:56Fortalece a los fuertes y poderosos contra los débiles y oprimidos.
25:01Por la gloria de vuestro nombre, aunque camine por el valle de las tinieblas,
25:05no temere mal a alguno, señor, porque estás conmigo.
25:08Estás conmigo.
25:11Qué justicia es esta, condesa.
25:14Que castiga al padre por el amor que siente por su hija.
25:19Que es capaz de llevar a un hombre hasta la horca, aunque jure su inocencia.
25:25Gran pecado sería mandar injustamente a un inocente al cadazo.
25:31Si el emperador no me concede mi petición de clemencia, señora,
25:36voy a ser ahorcado aun siendo inocente.
25:41Él se la ha de conceder.
25:43Se la ha de conceder.
25:45Tenga fe, amigo, tenga fe.
25:47Tenga fe.
25:50Condesa, yo creo en la inocencia de este hombre.
25:55Y yo creo en la suya.
25:57¿Pero en qué ayudaría? Ambos están presos.
26:01Y él está condenado.
26:04En cuanto a mí, tengo poca esperanza de no llegar a ser condenado.
26:07El juez dijo que usted va a tener que esperar el juicio en prisión.
26:11Veinte años, condesa.
26:14Veinte años de lucha y privaciones.
26:18Y ahora tener que entregar todas mis pertenencias en las manos de aquel canalla.
26:25No se ponga así, señor Miguel.
26:28No se preocupe.
26:30Dinero y empleo no le han de faltar.
26:33Aun así, condesa, es difícil aceptar la decisión del juez.
26:39Ya que son veinte largos años.
26:43Veinte años de lucha.
26:45Privaciones.
26:47Juntando moneda a moneda.
26:50Privándome de todo y cualquier tipo de confort.
26:53Pensando cada día, a cada instante, a cada minuto en la libertad de mi hija.
27:00Aun así su destino es mejor que el mío.
27:03Yo soy la fiera de Macabú.
27:05Yo voy a ser ahorcado en la plaza pública.
27:07Por el asesinato de ocho personas.
27:09Asesinato que no cometí, lo juro por Dios.
27:12Y no mandé cometer.
27:14Llegó el mensaje que usted esperaba, señor Coqueiro.
27:18La respuesta a la petición de clemencia del emperador.
27:22¿Es mi perdón?
27:25¿El emperador me concedió esa gracia?
27:29¿Fue clemente?
27:30Mejor lea.
27:33Negada.
27:37Petición negada.
27:41Ay de mí.
27:44Voy a ser ahorcado, Dios mío.
27:47Yo no quiero morir.
27:48Soy inocente.
27:50Condesa, perdone mi egoísmo.
27:53Me debo consolar.
27:56Ayudando a personas que sufren mucho más que yo.
27:59Yo debo consolarlo.
28:02Este hombre es inocente.
28:04Hombre, hombre.
28:08Permiso, señor.
28:11¿Y bien, señores?
28:13Mi socio y yo acordamos que aún es poco.
28:16¿Queremos una oferta mejor?
28:18¿O vamos hasta la corte a buscar un precio justo?
28:21Si es preciso, buscamos a los ingleses.
28:25Yo tengo la certeza de que ellos pagarán mucho más.
28:31Está bien.
28:33Revalúdense.
28:36Revalúe las piedras.
28:38Son puras.
28:40Hay diamantes aquí hasta de 30 kilates.
28:42Sí.
28:44Valen más de hecho.
28:47Doy 100.000 por la partida.
28:50¿100.000?
28:51¿100.000?
28:52Sí, 100.000.
28:54Ahora sí, hacemos negocio.
28:57Es lo que valen.
28:58Ni más ni menos.
29:00Bueno.
29:02Bien, vamos al banco por el dinero.
29:04Vamos, vamos.
29:06Sí, señor.
29:07Vamos.
29:09Soy un rico, Florecitas.
29:11Señorito Enrique, ahora puede comprar a Isaura.
29:14¿Comprar?
29:15Pero si Leoncio no la vende.
29:17Es que no sabe.
29:18Isaura va a ser vendida.
29:21¿Tiene la certeza, doña Violeta?
29:23¡Claro!
29:24¡Absoluta!
29:25La subasta va a ser en la hacienda del Comendador mañana a las 5 de la tarde.
29:30Gracias a Dios.
29:32Era todo lo que necesitaba.
29:34El dinero de los diamantes llegó en el momento justo.
29:40Es una pena que no voy a poder estar en la subasta.
29:43Pero voy a estar escondido ahí cerca para saber qué sucede.
29:46Cuando sepa que Isaura está libre, voy a hablarle a Rosa para irnos al quilombo.
29:51Y yo, André.
29:52Mi corazón no aguanta tanta ansiedad, André.
29:55No puedo apartar los ojos del reloj.
29:57Parece que los minutos me arrastran.
29:59Ustedes tienen mucha suerte.
30:02No saben la bendición que es poder simplemente caminar.
30:06Aún no me acostumbro a la idea de que ahora...
30:09...esta silla de ruedas sea parte de mi cuerpo.
30:13Mi impulso es...
30:15...levantarme.
30:17Ir por el mundo.
30:19Pero...
30:20...estoy cautivo en esta silla.
30:23Señorito Gabriel necesita encontrar la felicidad.
30:26Así como lucho por mi felicidad, aunque no sea un esclavo libre.
30:30Y yo...
30:32...apasionado por una esclava que no me pertenece.
30:36Tenemos que aprender a ser felices y amar, señor Gabriel.
30:39No importa lo que suceda.
30:41Aunque la mujer que amamos quiera a otro.
30:43Debe haber un modo de ser feliz.
30:45Hay que luchar con todas las fuerzas del bien para ser feliz.
30:50Sí.
30:51Sí.
30:53Hace mucho tiempo...
30:54...en el tiempo en que Brasil no tenía ni emperador...
30:58...en ese tiempo distante...
31:00...surgió un negro...
31:02...fuerte y valeroso.
31:04El guerrero Zumbí de los Palmares.
31:07Zumbí era...
31:08...sobrino de Ganga Zumba.
31:11Que fue rey de quilombos antes de Zumbí.
31:15Ganga Zumba...
31:16...era jefe de más de diez quilombos.
31:19Allá por...
31:20...por las tierras de este Brasil.
31:23Además de allá de Pernambuco y de Alagoas...
31:26...en la Sierra de Barriga.
31:28¿Y cómo es que usted sabe todo eso?
31:32Lo oí contar en las barracas, hija.
31:36Los negros viejos...
31:37...que guardan la historia de nuestro pueblo...
31:39...y que pasan de padre a hijo...
31:41...o como se dice, de generación a generación.
31:44Sí...
31:45...y hay pueblos...
31:47...que cuentan su historia en los libros...
31:50...y hay pueblos que tienen su tradición.
31:53El más viejo...
31:54...le cuenta al más joven.
31:56Es verdad.
31:58Yo misma recuerdo que oí a mi padre...
32:00...hablar una vez de Zumbí.
32:02Dijo que en el quilombo de él...
32:03...había más de veinte mil hombres.
32:05Sí...
32:06...el quilombo de Zumbí...
32:07...fue siendo cada vez más fuerte...
32:09...porque las autoridades...
32:11...tenían miedo de él.
32:13Ah, igual aquí.
32:14Ahora ellos no temen.
32:16Había tantos negros juntos...
32:18...un ejército que daba miedo.
32:21Entonces el gobernador de Pernambuco...
32:24...mandó hacer un acuerdo.
32:27Dijo que daría la libertad...
32:28...a los negros nacidos en los palmares.
32:31Pero sólo que...
32:33...Zumbí de los palmares no podía ya...
32:35...dar guarida a los negros prófugos.
32:38Ah...
32:39...tiene gracia.
32:40Negar libertad a los negros prófugos...
32:42...que llegaban al quilombo.
32:44Sí...
32:45...Gangasumba quería hacer un acuerdo...
32:48...pero Zumbí...
32:49...no aceptó.
32:50Vaya...
32:51¿Acaso un guerrero como Zumbí...
32:53...iba a hacer un acuerdo de esos?
32:55No lo hizo.
32:56No lo hizo.
32:58Ahí él...
32:59...acabó siendo enemigo de los portugueses.
33:02Fue así que nació el héroe Zumbí.
33:05Porque la autoridad...
33:07...mandó al ejército a atacar...
33:08...por más de veinte veces el quilombo.
33:11Pero Zumbí los venció a todos ellos.
33:13Del mismo modo vencimos a los cazadores de esclavos.
33:17Desde que André y Tio Joao vinieron acá...
33:19...nunca más perdimos una lucha.
33:22Sí...
33:23...nuestro quilombo ahora está más armado.
33:26La condesa mandó muchas armas para nosotros.
33:28Sí...
33:29...y André trajo muchos negros valientes y fuertes...
33:31...de la hacienda donde trabajaban.
33:34Sí...
33:35...André también es un héroe.
33:39Ahora sí es.
33:41Oye Joaquina...
33:42¿Qué?
33:43Un día va a llegar...
33:45...que todo el mundo va a saber...
33:47...y contar nuestra historia...
33:49...la historia de nuestro quilombo.
33:50Y seremos recordados.
33:52André y Tio Joao van a ser igual a Ganga Zumba y Zumbí.
33:56Eso, muleca.
33:58Solo que no vamos a tener la muerte horrible de Zumbí.
34:01Si Dios quiere.
34:02Ay, no hables así que me da una tristeza.
34:06Si André muere...
34:08...yo muero junto con él.
34:11Ya, tranquila Tia Joaquina.
34:13André no va a morir, ¿no?
34:16Que Dios te oiga.
34:19Oye Joao...
34:21¿Cómo es que fue la muerte de Zumbí?
34:24Fue en el último ataque contra el quilombo de los palmares.
34:28Un colono allá por Sao Paulo lo comandó.
34:32Y Zumbí solo murió...
34:34...porque un traidor dijo donde estaba escondido.
34:37Cortaron la cabeza de Zumbí...
34:39...y la colgaron en la plaza para poder crear miedo a los negros que aún querían huir.
34:44Continúan los negros huyendo.
34:47Solo hay que ver nuestro quilombo...
34:49...para ver que Zumbí no murió.
34:51Que el quilombo continúa...
34:53...y que nuestro pueblo es valeroso como él.
34:56Si, muleca.
34:58Si tenemos que morir como él, vamos a morir...
35:01...luchando contra los señores de esclavos.
35:04Igual que mi padre.
35:05Mi padre murió luchando.
35:07Murió igual al héroe de nuestra gente.
35:10Y viva Zumbí.
35:12Y también viva...
35:14...la libertad.
35:16Y viva la libertad.
35:18Viva...
35:20Viva la libertad, sí.
35:23Los dos, Doña Perpetua.
35:26Mis dos hijos.
35:28Aventurándose en un viaje a campos.
35:31Ni me diga, querida.
35:32Tengo solo un hijo y es mi preocupación.
35:35Todo por culpa de aquella esclava.
35:38¿Qué?
35:40¿Qué culpa tiene esa muchacha?
35:42Si no fuese por Isaura...
35:44...Doña Malvina no habría venido con el marido...
35:46...para hechizar a mi Geraldo.
35:48Y nuestros hijos, Perpetua, Blanca y Álvaro...
35:51...estarían casados.
35:53Fue ese nuestro sueño, amiga.
35:55Nuestras familias unidas para siempre.
35:58¿Y de qué sirve, querida?
35:59Álvaro no piensa así.
36:01Nuestro sueño se fue.
36:03Son aguas pasadas que no mueven molinos.
36:06Álvaro ya admitió que no está enamorado de Blanca.
36:09La pasión viene después, amiga.
36:11Eso ya lo sabemos.
36:13¿Cuántas nos hemos casado contrariadas?
36:16Pero ahí, con el tiempo...
36:18La pasión viene o no.
36:21Aunque fuese sin pasión el matrimonio de ellos...
36:24...aún así...
36:26...ahora estaríamos casados.
36:27Ahora sí.
36:29Ahora estaríamos en paz.
36:31Aguardando la llegada de un nieto, Perpetua.
36:34Entonces, el destino no lo quiso así.
36:38Lo sé, amiga, pero aún tengo esperanza.
36:41Por todo lo que conversé con el señor Leoncio...
36:44...él no se va a deshacer del esclavo así tan fácilmente, ¿no?
36:48Es una lástima.
36:50Doña Perpetua, Doña Perpetua.
36:52Doña Estela.
36:54Pedrito.
36:56Ya parezco un señorito, ¿verdad?
36:58Claro, mi ángel, ven acá.
37:00Solo me falta tener una hacienda porque ropa ya tengo.
37:03Este niño es un amor.
37:05Cuéntese historia, la que me dio miedo.
37:08Pero, Perpetua, ¿quién es este negrito?
37:11Ah, ya sé, es aquel muchachito que estaba con Isaura y el padre de ella...
37:15...en aquel baile aquí en su casa, ¿no?
37:18Él es Pedrito y es mi apoyo.
37:21Él está cuidando de mí mientras Álvaro está en campos.
37:23Yo la cuido, soy el hombre de la casa.
37:27Ay, amiga mía, francamente no sé cómo se permite tanta intimidad con ese moposo de la barraca.
37:35Pedrito no es esclavo.
37:38Yo no soy esclavo, nunca fui y nunca voy a ser esclavo.
37:46Querida madre, estoy bien y con salud.
37:49Hospedado en casa de la Condesa de Campos.
37:51Mañana Isaura debe ser vendida en subasta y es grande mi esperanza de comprarla.
37:56Volveré en cuanto pueda.
37:58Es posible que esta carta la encuentre cuando yo ya esté camino a Sao Paulo.
38:51¿Quién le ordenó venir aquí?
38:53Fui yo, querido.
38:55El señor Martiño tiene experiencia en subastas.
38:58Va a ser muy útil mañana.
39:00Vine porque la señora Malvina me llamó.
39:03Y también porque soy un profesional.
39:06Un capitán mercader de esclavos.
39:09Mi servicio es de primera, usted sabe.
39:13Y vine también a pesar de que ustedes no me conocen.
39:16¿Ya no recuerda?
39:18En aquella casita donde Isaura estaba escondida.
39:21Yo no podía dejar a la esclava huir después de todo el trabajo que ella me dio para encontrarla.
39:27Mañana acordaremos los detalles de la subasta.
39:30No hay más que acordarle, Oncio.
39:32El señor Martiño va a conducir la subasta.
39:35Echa a la venta, el comprador se lleva a Isaura.
39:38La puja.
39:40La puja.
39:42La puja.
39:43¿Quién se lleva a Isaura?
39:46La puja inicial es cincuenta mil reales.
39:49Pero con eso usted no va a conseguir ningún comprador.
39:53Pero es que yo gasté aún más que eso para recuperar a la esclava.
39:57¿Qué intentas hacer ahora, Leoncio?
39:59¿Quieres poner un precio tan alto a Isaura que nadie pueda comprarla?
40:03Yo no voy a permitir eso.
40:05No habrá puja mínima, señor Martiño.
40:07Malvina, yo...
40:08Está decidido, Leoncio.
40:10Se lleva a Isaura quien pague más por ella.
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