La historia de Isaura, una esclava que nace en la hacienda del comendador Almeida, en Campos, en el año 1835. Isaura es hija de la bella Juliana, esclava del comendador, y de Miguel, el capataz de la hacienda. Juliana muriO despues del parto, e Isaura fue adoptada y educada por Gertrudis, esposa del comendador, quien siempre quiso tener una hija. Diecinueve años despues, Leoncio, el hijo del comendador, regresa a la hacienda y se obsesiona de ella. Sin embargo, es obligado a casarse por interes con Malvina hija del rico coronel Sebastian. Al morir Gertrudis y Almeida, Leoncio manipula unos documentos para impedir la libertad de Isaura y poder seguir manteniendola bajo su propiedad. Leoncio esta cada vez mas agresivo y su mujer huye de el; quedando Isaura a su merced, con lo cual tambien se ve obligada a escapar ante la violencia que ejerce. Tomasia, la condesa de Campos, la ayuda en su fuga, y aprovecha para cambiarse de nombre: Elvira. La joven conoce luego al verdadero amor de su vida, Alvaro. Pero un dÝa Leoncio la recaptura, regresandola a su condicion de esclava, y tiene la idea de casarla con Belchior, el jardinero deforme. Alvaro intentara la dificil mision de rescatarla.
Encuentra todos los capitulos en https://sites.google.com/view/cyberhome-nicaragua
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00:00¡Socorro! ¡Ayúdenos, por favor, ayúdenos!
00:03No puedo moverme en esta silla. Quisiera poder ayudar, pero no puedo.
00:07Por amor de Dios, ¿qué hago, Gabriel?
00:09¡Ayuda a mamá, Tomasia!
00:11¡Socorro! ¡Vengan a ayudarnos!
00:13Mamá, calma, calma, calma, calma.
00:16¡Estos bombones están envenenados!
00:24Venga, mamá.
00:31¿Puedo saber la razón de tu sonrisa?
00:36Tengo todos los motivos del mundo para estar feliz, esposa mía.
00:43Ciertamente que sí.
00:45Había olvidado que la adorada esclavita Blanca fue encontrada.
00:51Y pronto estará de vuelta.
00:53¿Qué?
00:55No es nada de eso.
00:57Estoy feliz por un bombón de chocolate delicioso.
01:02¿Bombón?
01:03¿Qué historia es esa, Leoncio?
01:04Sí, un bombón.
01:05El mejor del mundo.
01:07¿Pero qué tiene ese bombón que es tan especial?
01:11Tendrías que probarlo para saber.
01:15¿Qué es eso?
01:16¿Qué es eso?
01:17¿Qué es eso?
01:18¿Qué es eso?
01:19¿Qué es eso?
01:20¿Qué es eso?
01:21Tendrías que probarlo para saber.
01:24¿No quiero probar? Adoro los bombones.
01:28Voy a dejar que mi linda esposa pruebe uno.
01:34Pero solo uno.
01:46¡Ay, por Dios! Solo espero que el coronel no muera envenenado en mi casa.
01:50No hay duda de que fue eso.
01:52¿Dónde está el médico que pedí?
01:54Y la leche, vayan, corren, por favor, traigan una palangana de agua.
01:57El coronel mordió un bombón envenenado, se está muriendo.
02:02Me siento mareada, Tomasia, mis sales.
02:06Por favor, dame mis sales.
02:08¿Mis sales, mamá?
02:10Sí, mis sales están en el comedor y creo que me voy a desmayar.
02:20Ay, mi amor, cariño, mi grande y único amor, mi amor de la vida entera.
02:35Cuánto tiempo, cuánta nostalgia, mi amor.
02:41Tantas veces te maltraté queriéndote decir que te amaba.
02:51Toma.
02:55¿Qué pasó? ¿Dónde estoy?
02:58Por favor.
02:59El veneno, el veneno.
03:01No, cálmate, cálmate, Sebastián, cálmate, cálmate.
03:05El bombón.
03:06¿Tú intentaste envenenarme?
03:09No, no, no, Sebastián.
03:11¿No ves cómo estoy sufriendo por ti, cariño?
03:15Y aún así me acusas de ese modo.
03:18El bombón tenía veneno.
03:22Dicen que fue la baronesa quien los mandó.
03:25Pero yo tengo la certeza de que fue cosa de Leoncio.
03:30Cálmate.
03:31Me siento muy mal, me quiero ir a mi casa.
03:33No, no, no, yo voy a cuidarte.
03:35No, no, no, no.
03:36Yo te cuidaré.
03:37No, no, no.
03:38No me cuidarás jamás, no me cuidarás jamás.
03:40Por favor.
03:41Jamás.
03:42Por favor, Sebastián.
03:43Jamás volveré a cenar aquí en tu casa.
03:46Por favor, cariño, déjame cuidarte, por favor.
03:48No.
03:49Por favor, Sebastián, déjame cuidar de ti, Sebastián.
03:53Yo te quiero, yo te amo.
03:55Por favor, no te pongas así, Sebastián.
03:59Yo voy contigo, voy contigo.
04:07Yo nací libre en el quilombo.
04:10Nunca fui esclava.
04:12Ellos me quieren hacer esclava, pero no seré esclava nunca.
04:15Andrea debe venir por nosotros.
04:17El señorito Enrique debió encontrarse con él.
04:20No deben tener miedo.
04:22Ellos van a salvarnos.
04:40Todos están acampados.
04:42Van a querer vender a Muleka y a los niños en el mercado de esclavos.
04:45Sí, pero intentaré comprarlos con las monedas falsas que me dieron por el diamante.
04:50Ojalá que nadie perciba que las monedas son falsas.
04:52Ellos creen que se pueden robar a nuestras mujeres y a nuestros niños,
04:56y ellos van a ser los robados.
04:59Ladrón que roba a ladrón tiene 100 años de perdón.
05:03Al menos las monedas falsas tendrán alguna utilidad.
05:06Oigan, si alguien percibe que las monedas son falsas, tendremos que atacar.
05:43Un aroma de vino.
05:50Es como tener mujeres y niños y ser solo.
05:57En la soledad.
06:01Encontrar el sentido de la vida.
06:07Y puede decir adiós.
06:10No sabe quién va a machucar.
06:12Quien ama nunca siente miedo de contar sus secretos.
06:19Que tenga fe.
06:24Mi hijo aquí solo.
06:27No me siento solo cuando pienso en Isaura, mamá.
06:30Son tantos los recuerdos.
06:32Ni tantos así.
06:33La conociste hace tan poco tiempo.
06:36Álvaro, hijo, estoy tan preocupada por ti.
06:40No, mamá, no se preocupe. Estoy bien.
06:44Tienes la cara de quien está muy triste.
06:47No me gusta verte así tan callado y pensativo.
06:50Creo que encontré una solución para resolver el problema de Isaura, mamá.
06:54¿Y cuál es la solución para una esclava?
06:57Solamente comprarla.
06:58Solamente comprarla.
07:00Y por lo visto, su dueño, el tal Leoncio, jamás va a venderla.
07:05Pero puedo comprar a esos malvados.
07:08¿De qué me estás hablando?
07:10Estoy pensando, mamá, en pagarles.
07:13Para que le digan al señor Leoncio que la esclava blanca fugitiva que encontraron no es Isaura.
07:18¡No estoy oyendo esto de mi propio hijo!
07:23Álvaro, eso es soborno y es crimen.
07:28Ayudar a los esclavos a huir es inmoral.
07:31Inmoral, mamá, es que aún existe esclavitud en Brasil, en 1855.
07:37Yo sé que la esclavitud es algo abominable, pero es la ley.
07:42Tenemos que acatarla.
07:44Eso nunca, mamá. Soy un abolicionista.
07:46Y jamás concordaré con una ley de esclavitud.
07:49Además, yo solo quiero proteger a la mujer que amo.
07:52Has de encontrar otra salida.
07:54No, no hay otra salida, mamá. Solo esta.
07:57Tengo que comprar a esos malvados.
07:59¿Y qué garantía tendrás de que se quedarán callados?
08:03Pueden tomar tu dinero.
08:05Y además avisarle al tal Leoncio que Isaura está aquí en nuestra ciudad.
08:10¿Qué garantía vas a tener?
08:12Voy a conversar con ellos, mamá.
08:14Y pretendo pagarles muy bien, justamente para silenciarlos.
08:17Naturalmente dejaré una parte a pagar.
08:20Solo cuando tengamos la certeza de que actuaron conforme a lo acordado.
08:24Quien se vende una vez, se venderá siempre.
08:28Ese tal señor puede hacer una propuesta mejor que la tuya.
08:32Es preciso tener cuidado con esos hombres, hijo.
08:35No, mamá. El señor Leoncio ofreció la cantidad de diez mil reales
08:38para que los hombres se llevaran a Isaura de vuelta.
08:40Pues entonces, estoy pensando pagarles más para que nos ayuden a huir del país.
08:44¿Huir? ¿Pero estás pensando en huir?
08:48Sí, mamá. Estoy pensando en casarme con Isaura.
08:52Y si es necesario, huir del país.
08:54¿Pero y tus negocios, tus haciendas?
08:58¿Te volverás un fugitivo con toda la milicia buscándote?
09:02Venderemos todo lo que tenemos.
09:04Y nos mudaremos a los Estados Unidos.
09:06¿Quién dijo que me quiero mudar a los Estados Unidos?
09:09¿Quieres saber?
09:10¿Quieres saber? ¡Yo adoro Sao Paulo!
09:14¡Mira nada más! ¡Todo esto por una esclavita!
09:18Ella no es una esclavita, mamá.
09:20Isaura es la mujer que amo.
09:23Y soy capaz de cualquier cosa, incluso de huir.
09:26Y volverme un forajido para estar a su lado.
09:29No, no fue esa la educación que recibiste, hijo.
09:33Te diré, mamá, que estoy perdidamente enamorado de Isaura.
09:37Y no permitiré que nada en este mundo impida nuestra felicidad.
09:40Aunque para eso tenga que usar recursos que van contra mi modo de pensar.
09:45Lo que no puedo hacer es abandonar este amor.
09:48Por lo tanto, mamá, solo tengo una salida.
09:52Intentaré comprar a esos hombres para que nos dejen en paz.
10:05¿Sabes quién estuvo aquí, Geraldo?
10:07Doña Perpetua.
10:09Y yo estuve en su casa conversando con mi amigo Álvaro.
10:12¿Entonces es verdad, Geraldo?
10:14Álvaro continúa interesado en la jovencita aún sabiendo que es una esclava.
10:19Eso parece.
10:21Álvaro está aún más enamorado después de descubrir el misterio de Isaura.
10:27¡Diablos!
10:29Es mejor olvidarlo, Blanca.
10:31Esto es una afrenta.
10:34No me puede cambiar.
10:36No por una esclava.
10:39¡Cielos!
10:42¡Este licor es fuente!
10:44¡Es una patada de mula!
10:46¡Mamá, quítate con esa mano, eh!
10:48Señor Belchior.
10:50Buenas noches, señor Francisco.
10:52Buenas noches, Violeta.
10:54Oh, Violetita.
10:56Mi Violetita.
10:58No necesita llamarme señor.
11:00¿Qué es eso?
11:02El señor está en el cielo.
11:04Puede llamarme...
11:06Belchior.
11:08El padre.
11:10O tal vez hasta tu abuelo.
11:12No, no, no.
11:14No soy tan viejo así.
11:17Estoy un poco gastado.
11:19Porque este negocio de estar cuidando el jardín, tomando el sol, la lluvia, cuidando las florecitas...
11:27Ajá, está bien.
11:29Haré de cuenta que yo le creo.
11:31¿Ustedes no saben dónde podemos encontrar al Dr. Paulo a estas horas?
11:35¿Por qué? ¿Alguna florecita está enferma?
11:38No, es para el coronel Sebastián.
11:40Estuvo aquí un mensajero buscando al Dr. Paulo con urgencia.
11:43¿Le ocurrió alguna cosa al coronel?
11:46Parece que fue a cenar a la casa de la condesa y se puso muy mal.
11:49¡Cielos! ¿Acaso la comida de la condesa es tan mala?
11:53No, es broma, señor Belchior.
11:55Todo el mundo busca al Dr. Paulo y nadie sabe dónde encontrarlo.
11:59¿Acaso se morirá esta vez?
12:01No lo sé. Sé que el mensajero está buscándolo.
12:04¿Y ahora?
12:06¿Quiere saber la verdad?
12:08¡Ay, Belchior!
12:10Si usted, que sabe de la vida de todo el mundo, no sabe...
12:13¿Quién va a saber a dónde fue el Dr. Paulo?
12:15¿Y por qué no lo busca en su casa?
12:17Tal vez fue... fue detrás de la noviecita fugitiva, ¿no?
12:22¡Vamos, vamos, vamos! ¡Quiero más! ¡Más patatas!
12:25¡Sí, claro!
12:27Señor Belchior, yo creo que ya bebió mucho, ¿no?
12:30¿Qué puedo ser?
12:32No, Violetita. Mi única compañera es la bebida.
12:35Ya que ninguna mujer quiere estar conmigo.
12:41¡Ay, mira este viejo baboso!
12:45Ella no quiso.
12:49Ay, Rosa. Gracias a Dios conseguí llegar vivo a mi casa.
12:56¿Pero qué fue lo que le ocurrió, padre?
13:00Me intentaron envenenar, Rosa.
13:03¡Ay, por Dios!
13:05¿Pero quién pudo hacerlo?
13:08Fue en la cena, en casa de la condesa.
13:12¿La condesa intentó matar a mi padre?
13:14No, no, no.
13:17Alguien mandó bombones envenenados.
13:20Para ella yo me los comí y me siento muy mal.
13:23Oiga, calma. Voy a cuidarlo. Descuide.
13:26Creo que de esta noche no paso.
13:30¡Rosa está ardiendo en fiebre!
13:35¡Rosa!
13:38¡Rosa!
13:39¡Rosa!
14:03Espero que no perciban que las monedas son falsas.
14:05Reza, hijo mío, que las plegarias tienen gran poder.
14:12Dios nos ayude.
14:20Muy bien. Quiero comprar este lote de esclavos.
14:24A la mujer y a estos niños.
14:35Doña Malvina.
14:38Señor Leoncio.
14:40Habla, Chico.
14:42Tengo una noticia y no es nada buena.
14:47El...
14:49...Coronel Sebastián...
14:51...fue ayer a casa de la condesa Tomasia.
14:53¿Mi padre?
14:55¿Pero...
14:57...¿por qué?
14:59¿Por qué?
15:01¿Por qué?
15:03Comió un bombón envenenado.
15:11Y no está nada bien.
15:16¡Mi padre!
15:22Raimundo, el Capataz.
15:24¿Quién?
15:26Raimundo, el Capataz.
15:28¿Quién?
15:30Raimundo, el Capataz Canalla de Leoncio.
15:34No se ha movido de ahí la noche entera.
15:37¿Cómo son las personas, papá?
15:40Recuerdo que él sintió pena por mí cuando el señor Leoncio me comenzó a castigar en la hacienda.
15:46Cuando me intentó forzar.
15:49Pero ahora para que gane el dinero de la recompensa, hija...
15:53...no sentirá ninguna pena de llevarte de vuelta al Canalla de Leoncio.
15:57Y todo por causa del maldito dinero.
16:01El señor Martiño, el Capitán, siempre lo soñó mucho.
16:05Siempre deseó mucho que tú pudieras huir.
16:08Una vez él me reveló...
16:11...que sería la mayor recompensa por un esclavo fugitivo...
16:15...que iba a tener en su vida, maldito.
16:18¡Ey, ustedes dos!
16:20¡Vengan aquí!
16:21¡Oiga!
16:23El señor Álvaro está conversando con ellos afuera.
16:28Quiero a Dios que consiga comprar a esos desgraciados.
16:32Tengo una propuesta que hacerles a ustedes dos.
16:35¿Qué propuesta?
16:37Tuve una idea.
16:39Y creo que resolverá al mismo tiempo el problema que tienen ustedes.
16:43Y el mío también.
16:52Tenga.
16:54Ahí está el dinero que ustedes pidieron por la mujer y por los niños.
16:59Lo puede contar.
17:07¡Miren!
17:08¡El señorito Enrique ya se las dio!
17:11Ahora es solo esperar.
17:13¿Y si ese hombre es inteligente y no las acepta?
17:16¡Ten fe, hijo mío! ¡Ten fe!
17:18Creo que ese hombre no va a saber que las monedas son falsas, ¿no?
17:21¿Cómo es que mi amigo Bernardo está tan seguro?
17:24¡Mírale la cara!
17:25¡Ese hombre tiene cara de bobo!
17:27¡Silencio!
17:28¡Está contando las monedas!
17:32Espere.
17:40Se fastidió.
17:41Creo que el hombre descubrió que las monedas son falsas.
17:43¡Espera, André! ¡Espera!
17:45Parece que el hombre está sospechando.
17:48¿Y ahora?
17:49Calma, calma, que están contando el dinero. Calma.
17:52Son buenas.
17:55Las monedas son falsas, pero el trabajo está bien hecho.
17:58El señorito Enrique, que es el señorito Enrique, hombre estudiado, cayó.
18:01¿Por qué esos hombres con cara de tontos no van a caer también?
18:04¡Caerán, sí!
18:05Si ellos descubren que las monedas son falsas, tendremos que atacar y liberar a los niños.
18:10¡No!
18:11Si ellos descubren que las monedas son falsas, tendremos que atacar y liberar a Muleka y a los niños.
18:15Calma, André, calma.
18:17Hay que esperar y ver qué pasa.
18:18Sí, y además atacar a los hombres aquí en el mercado de esclavos, el asunto se pondría feo.
18:23Pues no voy a correr ese riesgo.
18:24Lo que no puedo hacer es dejar a Muleka y a los niños en manos de esos bandidos.
18:28Ajá.
18:32¡Lo aceptaron!
18:34¿No les dije que tenían cara de tontos?
18:37¡Qué bien! Así no tendremos que atacar a esos malditos.
18:42Gracias.
18:46Váyanse con el señor.
18:51¡Gracias a Dios! Gracias a Dios vinieron a salvarnos.
18:55¡Lo logramos, Muleka! ¡Lo logramos!
18:57Oye, y no fue preciso derrabar una gota de sangre.
19:01Yo no merezco un abrazo, Muleka.
19:03¡Mereces todos los abrazos del mundo!
19:06Usted también, señor Joao. Muchas gracias.
19:10Basta de fiesta.
19:11Será mejor marcharnos antes de que descubran que las monedas son falsas.
19:15Sí, vámonos, vámonos, vámonos.
19:20Deseo decirles en verdad pocas palabras.
19:23Pues estamos a sus órdenes.
19:26Puede hablar, señor Álvaro.
19:28Estoy convencido que la recompensa de diez mil reales
19:31es el motivo que los lleva a querer capturar y llevar de vuelta a la infeliz esclava, a Isaura.
19:37Sí, yo personalmente no tengo nada contra ella.
19:40Isaura tampoco nunca me ofendió.
19:43Sentía hasta simpatía por el señor Miguel, su padre, que hoy me odia.
19:47Es que diez mil, usted entiende, es una suma considerable.
19:53Pues si quisieran desistir completamente de este negocio
19:57y dejar en paz a la señorita Isaura,
20:00les doy el doble de esa cantidad.
20:02Veinte mil reales.
20:07¿El doble?
20:09¿Veinte mil reales?
20:11Justamente, veinte mil reales, y hoy...
20:20¿Envenenado?
20:22¿Cómo es posible?
20:24Solo pudo ser cosa de la condesa Tomasia.
20:28Es escandalosa.
20:30¿Pero a cambio de qué?
20:32¿Qué gana matando a mi padre?
20:33¿Qué? ¿Qué gana matando a mi padre?
20:36¿Por qué no respondes, Leoncio?
20:40¿Qué pasa, esposa mía?
20:42¿Cómo que qué pasa? Mi padre fue envenenado.
20:45Pero, ¿qué puedo hacer sino lamentar el hecho?
20:49Yo no soy un médico.
20:50Pero eres su yerno, deberías tener aprecio a la vida de mi padre.
20:53Ah, pero lo tengo, claro que lo tengo.
20:56Oye, chico, ¿es verdad que está en riesgo la vida de mi suegro?
21:00Sí, se puso muy mal.
21:03Y... hasta se desmayó.
21:06Vamos a visitarlo inmediatamente.
21:08Me arreglaré, no demoro.
21:15¿Alguien más en esa casa comió de los bombones?
21:19No, solo fue el coronel, señor.
21:21Te lo dije, chico.
21:23¡Qué ironía del destino!
21:25Miré un blanco y acerté en otro.
21:27Los bombones eran para la condesa Tomás y sus familiares.
21:30Y quien acabó comiéndolos fue su suegro.
21:33Si mi suegro llega a fallecer, mi esposa será muy rica.
21:39Y eso sería muy bueno, señor.
21:42Espero que se vaya al más allá.
21:45Y deje un buen dinero en su testamento para mi esposa.
21:49Si nadie sospecha de nosotros, sería estupendo.
21:53Ahora sí, el coronel.
21:54¿Y doña Malvina? ¿Sospechan?
21:56Yo no sé nada.
21:58Pero la culpa tiene que ser siempre de Tomásia.
22:02Ah, pero si eso fue lo que yo dije.
22:04Muy bien.
22:10Mandé un mensajero.
22:12La baronesa está en cama, es cierto.
22:15Pero no nos mandó ningún bombón.
22:17Ya lo sospechaba.
22:19¿Está segura?
22:21Recibió un mensaje, mamá.
22:22Pero entonces, ¿quién nos mandó los bombones envenenados?
22:27¡Leoncio!
22:29Es un miserable.
22:31No bastaba hacer desaparecer a Diego.
22:33¡Nos intentó matar!
22:35Te lo advertí, Tomásia.
22:37El final de esta vendeta es nuestra muerte.
22:40Pero si piensa que me intimida.
22:42Está muy equivocado.
22:44Las acciones cobardes del canalla solo sirven para incitar aún más mi voluntad de acabar con él.
22:50El coronel casi muere por culpa de él.
22:53Ay, ni me digas, ni me digas.
22:56El coronel Sebastián se puso muy mal.
22:59Ay, me quedé con tanta pena.
23:02Casi tuvimos una tragedia por culpa de Leoncio.
23:06Maldito asesino.
23:08Leoncio Almeida.
23:11Pero esto no se va a quedar así.
23:14Me las va a pagar el maldito.
23:20¿Padre?
23:22Toma el té.
23:24No lo soporto.
23:27Ay, qué noche tan horrorosa tuve.
23:31Nada se queda en mi estómago, ni siquiera el agua.
23:34Pues entonces, toma el té negro para ayudarlo a sentar el estógamo.
23:39Estómago.
23:44Estómago.
23:45Estómago.
23:49Estómago.
23:52Rosa, ¿no hablas con la boca llena?
23:55Ay, qué horror, por Dios.
23:59Mi estómago está en llamas.
24:06Disculpa, perdón, con permiso.
24:09Pero así acabará muriendo.
24:12Es para arriba y para abajo.
24:14Nada lo para.
24:16Qué tristeza, por Dios santo.
24:26Buenos días.
24:29Buenos días, doctor Paulo.
24:32No pude dormir anoche por tu culpa, Rosa.
24:35Estuve inquieto en la cama.
24:38Me levanté e intenté leer.
24:40Nada.
24:42Te quedaste grabada en mi mente.
24:47Ay, pues oiga, yo dormía así, igual que un angelito de procesión.
24:52Búrlate, malvada.
24:55Búrlate.
24:57Coronel.
25:00¿Qué tal?
25:02¿Cómo le va, doctor Paulo?
25:03Bien.
25:05Ahí voy, ¿no, coronel? Como puedo.
25:08Y ahora soy la burla de la ciudad, después de que su hija Elena...
25:12...huyó en plena noche de luna de miel.
25:15Y hasta ahora, yo no recibí la dote acordada.
25:19Oiga, doctor Paulo.
25:22Por favor, no hablemos respecto a dotes, porque no es el momento.
25:27No sabemos lo que irá a suceder.
25:29No sabemos lo que irá a suceder.
25:31No sabemos siquiera si este casamiento será anulado.
25:35Yo no quiero hablar sobre eso ahora.
25:38No estoy en condiciones, me siento mal.
25:40Sí, claro, coronel.
25:42Yo recibí un recado de que usted no estaba bien, y vine inmediatamente.
25:46¿No estaba bien?
25:48Casi morí...
25:50...envenenado por un bombón en casa de la condesa.
25:53Pues sí, usted me dijo que iría allá.
25:56¿Hubo alguna noticia del paradero de mi querida Elena?
26:00No, nada, nada.
26:02Dice la condesa que Elena no huyó con el doctor Diego.
26:06Y cree también que el joven debió ser víctima de una emboscada, en fin.
26:11No hubo medio de hacerla decir dónde fue que Elena se escondió.
26:15Así es, no averiguó nada, ¿sabe doctor Paulo?
26:19Y casi pateó la cubeta, ¿verdad padre?
26:21La pasó muy mal ayer, nunca vi algo igual en esta vida.
26:25A propósito, doctor Paulo.
26:28¿Dónde fue que usted se metió la noche pasada que nadie lo encontraba?
26:33La condesa mandó un mensajero.
26:35Todo el mundo estaba buscándolo.
26:38Bien, coronel.
26:40Es que la verdad yo...
26:42...no me sentía a gusto de seguir viviendo en su casa después de que Elena huyó.
26:47Así que...
26:48...yo reuní mis cosas y volví a mi casa.
26:51Ah, muy comprensible.
26:54Solo que tampoco en su casa nadie lo encontró.
26:58Ni en casa de doña Serafina.
27:05Coronel, ayer, anoche, ayer yo...
27:10Bien, yo salí, yo fui a refrescar un poco los pensamientos.
27:16Es todo.
27:18Ahora, en cuanto al envenenamiento, yo creo que usted no va a morir.
27:23¿Usted cree?
27:25Creer para mí es muy poco, doctor Paulo.
27:28Quiero un médico que me alivie los dolores.
27:31¿Usted no hará nada?
27:33Hago lo que puedo, coronel.
27:35Bien, le recetaré...
27:38...leche.
27:41¿Leche?
27:43¿Leche?
27:45Sí, la leche es muy buena para esas molestias estomacales, ¿no?
27:51Y mucho líquido también, líquido.
27:54Usted necesita lavarse por dentro.
27:58Usted me comprende, ¿no?
28:03Querido diario, el destino me trajo a este jardín de recogimiento...
28:08...con certeza para reflexionar sobre todo lo que pasó.
28:12Me enamoré de Gabriel...
28:15...sin saber que era mi medio hermano.
28:18Mi padre quiso prohibir mi casamiento para que yo lo cuidara en su vejez.
28:23Y cuando vio que no era mi intención obedecerlo...
28:27...quiso escoger un marido para mí.
28:30Viendo sólo la posición social, sin mirar las fallas de carácter.
28:35Es verdad...
28:37...que amo mucho a mi padre.
28:38Pero todo se precipitó mucho debido a esto.
29:08Agua cura a todos.
29:10Agua cura a todos.
29:12Agua cura a todos.
29:14Agua cura a todos.
29:16Agua cura a todos.
29:18Agua cura a todos.
29:20Agua cura a todos.
29:22Agua cura a todos.
29:24Agua cura a todos.
29:26Agua cura a todos.
29:28Agua cura a todos.
29:30Agua cura a todos.
29:32Agua cura a todos.
29:34Agua cura a todos.
29:36Agua cura a todos.
29:47Oigan, el señor Álvaro ya viene.
29:50Esos desgraciados malditos.
29:54Abre, Pedrito.
29:56Entre, señor Álvaro, en su casa, por favor.
29:58Buenos días, señor.
29:59Buenos días.
30:00Buenos días.
30:01Buenos días, señor Álvaro.
30:02Buenos días, señor Álvaro.
30:04Caray, la sonrisa de la señorita Isaura tiene el poder de abrillantar mi guía aún más que el sol.
30:09Pobre de mi sonrisa.
30:11No merece tantos elogios.
30:13Pues no me importaría que todos los días fueran nublados y lluviosos,
30:17mientras pudiera verla siempre sonreír.
30:19El señor Álvaro también es poeta.
30:21Eh, vi que usted habló alguna cosa con ese capitán Martiño.
30:26Hablé y sí, están muy entusiasmados con la propuesta.
30:29Están afuera esperando para ajustar los detalles finales del negocio.
30:33¿Y usted cree que van a aceptar?
30:35Todo indica que sí.
30:37¿Entonces le dirán al malvado de Leoncio que el esclava que encontraron no era Isaura?
30:42Exactamente ese es el plan, Pedrito.
30:44Eso nos dará el tiempo necesario para huir de aquí de nuevo.
30:49Quizá del país esta vez.
30:51Yo voy a rezar mucho para que Dios permita que no vuelva nunca más a la hacienda del señor Leoncio.
30:59Bien, vine solo para saludarlos y desearles un buen día.
31:04Te voy a acompañar a esos hombres hasta mi casa donde vamos a resolver los detalles del negocio.
31:09Me gusta el señor Álvaro, porque no pierde tiempo.
31:12Así es, Pedrito.
31:14Y quiero convencer al capitán Martiño de mandar un mensaje por telégrafo justo hoy para el señor Leoncio.
31:20Me gustaría mucho ver la cara del señor Leoncio cuando reciba el mensaje de Martiño
31:25diciendo que la esclava encontrada no era Isaura.
31:33Señor Leoncio, con el colonel muriendo o no, van a indagar seguramente lo que ocurrió.
31:39Del modo como estoy endeudado, quiera o no tendré que tolerar a esa insoportable de Malvina por el resto de la vida.
31:47Lo mejor que puedo hacer es que finja que amo a mi esposa con pasión profunda.
31:54Sí, yo sé cómo es eso, señor Leoncio.
31:59Yo también estuve casado.
32:03Ah, lo recuerdo, chico.
32:06Cuando yo era un jovencito en la hacienda antes de viajar, tú estabas casado.
32:11¿Qué le ocurrió a tu esposa?
32:16Ella huyó con un esclavo.
32:20Es por eso que le tienes tanto odio a los esclavos.
32:24Tus padres fueron muertos por esclavos y tu mujer huyó con un esclavo.
32:30Yo no confío nada en los esclavos.
32:34Los esclavos odian mucho al capataz.
32:37Odian más al capataz que al patrón.
32:40Sí, a la hora de los latigazos en el tronco, es siempre el capataz quien tiene el látigo en la mano.
32:46Los condenados odian más al verdugo que ejecuta la sentencia que al juez que los condena.
32:51Tú hablas mi lengua, chico.
32:54Voy a necesitar mucho de tus servicios, y más ahora.
32:59Usted puede contar conmigo.
33:02Principalmente después de que Isaura vuelva.
33:05Pretendo castigarla severamente.
33:09Será un gran placer, señor.
33:12Vamos, esposo mío. Vamos a la hacienda de mi padre, quiero saber cómo está.
33:16Vámonos, chico.
33:2220.000 y no se hable más de esto.
33:26No sé.
33:28Le di mi palabra al señor del esclava.
33:31El señor Leoncio es astuto, va a sospechar.
33:34No importa, lo importante es que con esto ganaremos tiempo.
33:38¿Pero qué quiere que le diga?
33:41Podemos decir que ella huyó de nuevo.
33:44O alguna otra disculpa cualquiera.
33:45Es complicado.
33:47Fue enfrente de mucha gente.
33:49Todo el mundo vio que se hizo responsable de la esclava.
33:52Hasta el jefe de policía.
33:54Ustedes son hombres expertos e inteligentes.
33:58¿Por qué van a querer compartir 10.000?
34:00Solo 5.000 para cada uno.
34:02Si lo que les propongo, es que cada uno de ustedes gane 10.000.
34:08Bueno, ya que lo ha dicho el señor Leoncio,
34:12Bueno, ya que usted insiste,
34:16Si se interesa tanto por esa esclava,
34:19Ya no seremos ningún motivo de preocupación para usted.
34:22La verdad, si no fuera debido al dinero, hasta preferiría que Isaura fuera libre, ¿sabe?
34:27Yo personalmente no tengo nada contra ella.
34:30¿Entonces aceptan definitivamente mi propuesta?
34:34Sí, señor.
34:36Negocio cerrado.
34:37Excelente.
34:39Entonces tenemos que planear exactamente lo que les ha dicho el tal señor Leoncio.
34:42Sí, eso es muy importante.
34:45Decir que la esclava desapareció de nuevo no es bueno.
34:48Porque comprometería al señor Álvaro, quien asumió la responsabilidad de la esclava.
34:52Sí, en realidad, sí pensé en una salida.
34:56Díganos, señor.
34:58Ustedes, le escribirán un mensaje al señor Leoncio,
35:01Diciendo que vinieron a averiguar el caso.
35:03Que reconocieron que la esclava fugitiva que encontraron no era Isaura.
35:07Ya comprendí.
35:09Le diremos al señor Leoncio que encontramos una esclava fugitiva, pero que no era Isaura.
35:13¿Y está todo acabado?
35:15Sí, no es mala idea.
35:17Ay, no lo sé.
35:19El asunto fue tan público, en medio de un baile.
35:22Tanta gente lo vio.
35:24¿Qué importa?
35:26Ustedes pueden decir que realmente era una esclava fugitiva y de piel muy clara, como la de Isaura.
35:29Ah, y por eso hubo la confusión.
35:31Además, porque hoy en Brasil existen muchos esclavos de piel más clara, ¿no?
35:34Sí, frutos de gran miscegenación.
35:36De la gran mezcla de pueblos que hay en esta tierra.
35:38Solo que el señor Leoncio sabe que tanto yo, como el señor Raimundo, conocemos bien a Isaura.
35:45Ustedes le mandaron un mensaje al señor Leoncio, diciendo que encontraron a Isaura.
35:49Pero que necesitaban una autorización, ¿correcto?
35:51Exactamente.
35:53Y ya respondió por telégrafo.
35:55Y dijo que ya había mandado la autorización.
35:57Pues entonces le escribirán otro mensaje al señor Leoncio.
36:00Diciendo que al estar por primera vez con la esclava fugitiva,
36:04no aparenta tener veinte años, y sí treinta y muchos.
36:08Y está lejos de tener la hermosura de Isaura.
36:10Usted es muy ingenioso, ¿eh?
36:13Solo que quien estaba en el baile, no va a creer eso.
36:16Además, porque Isaura confesó enfrente de todo el mundo que era esclava.
36:22Pues escriban este mensaje al señor Leoncio.
36:25Que la esclava fugitiva, llamada Elvira, realmente confesó que estaba huyendo durante el baile.
36:30Pero que cuando estuvieron con ella, estuvieron seguros de que no era Isaura, señor Martino.
36:35Si usted quiere, yo mismo redactaré el mensaje que le enviarán al señor Leoncio.
36:38Sí, haga eso, por favor.
36:40Y con eso el señor Leoncio desistirá de buscar a Isaura por estos alrededores.
36:45Y la va a ir a buscar a otros lugares.
36:47Sí, pero ¿y el jefe de policía?
36:49Vamos a decirle que...
36:51Leoncio mandó la autorización y que ustedes se llevaron a Isaura.
36:54Sí, el plan es bueno.
36:57Escribiré el mensaje al señor Leoncio.
37:00Cuando lleguemos al telégrafo, les daré la primera mitad de su pago.
37:05Pero ¿y la otra mitad?
37:07La otra mitad solo la pagaré cuando tenga la certeza de que Isaura, su padre y el niño huyeron de aquí con seguridad.
37:14Oigan.
37:17Estoy preocupado de que estos hombres vengan detrás de nosotros.
37:21Sí, y lo peor es que ellos están a caballo y nosotros a pie.
37:25Y lo peor es que saben que volveremos al quilombo.
37:28Y ellos van a procurar a la gente en el camino.
37:30Tal vez, en el camino.
37:33¿En el camino?
37:35Sí, en el camino.
37:37¿En el camino?
37:39Sí, en el camino.
37:40Y ellos van a procurar a la gente en el camino.
37:42Tal vez...
37:44deberíamos ir a la hacienda de mi padre.
37:47No, su padre sabe que somos negros fugitivos.
37:51Y no es de su agrado proteger a negros fugitivos.
37:55Tuve una idea.
37:58Podríamos ir a casa de la condesa.
38:00De visita.
38:02Y visitar a mi amigo el señorito Gabriel.
38:04Eso es mejor. Ellos viven cerca de aquí.
38:06Sí, y la condesa puede ayudarnos a todos.
38:09Dejándonos descansar en la hacienda.
38:11Y despistar esas pestes a esos hombres.
38:14Le gustará mucho vernos. Le gustará mucho.
38:16No sé si debo ir. A la condesa no le simpatizo.
38:19¿Qué? ¿El señorito Gabriel se pondrá feliz?
38:22También creo que el señorito debe ir.
38:24Porque es su hermano, ¿no?
38:27Entonces...
38:29voy a arriesgarme.
38:31Entonces, ¿vamos?
38:33Vamos.
38:35Vamos.
39:00Vimos una escena muy extraña, Doña Perpetua.
39:02Imagínese, Doña Perpetua, que vimos a Álvaro...
39:05conversando muy amigablemente...
39:08con esa gentusa, con los cazadores de esclavos, allá en la ciudad.
39:12Pero no es posible.
39:14Álvaro corrió a esos canallas del baile.
39:16Debieron ser otras personas.
39:18Eran los mismos, los capitanes.
39:20Los que vinieron a llevarse al esclava, la campesina.
39:23Justamente. Y fue por eso que nos extrañó tanto.
39:26Nos extrañó más aún, Doña Perpetua,
39:28cuando entró junto con ellos a la oficina de telegrafos.
39:31¿Será posible...
39:33que Álvaro haya llegado a algún acuerdo para comprar a la esclava?
39:36O por lo menos lo esté intentando.
39:38Fue lo que pensamos.
39:40Y usted, Doña Perpetua...
39:42¿qué tiene que decir?
39:44No sé.
39:46Procuro no interferir mucho en los asuntos de Álvaro.
39:49¿Por qué no le preguntan a él mismo...
39:51lo que estaba haciendo con esos señores?
39:54Perdone, Doña Perpetua, pero...
39:56al ver a Álvaro con esos señores...
39:58llegué a pensar mal de él.
40:00¿Por qué, Blanca?
40:02Porque...
40:04porque me pasó por la mente...
40:06sólo me pasó...
40:08que pudo haber comprado a esos hombres.
40:11Y yo odiaría que hiciera eso para ayudar a la esclava.
40:18Nuestro plan resultó.
40:20El capitán, el señor Martiño, pasó nuestro mensaje de telégrafo.
40:23Estupendo.
40:25El señor Leoncio va a pensar que la esclava fugitiva
40:26que esos canallas encontraron...
40:28no es mi hija Isaura.
40:30Y vamos a poder huir a los Estados Unidos.
40:33¿Y yo voy con ustedes?
40:36Pues claro, Pedrito.
40:38No nos vamos a separar por nada de este mundo.
40:41¡Viva!
40:43¡Viva!
40:45Voy por la guitarra, porque esto merece una bella celebración.
40:48Y yo por una tarta para comer.
40:50Ve.
40:52Y yo, Isaura...
40:53estoy pensando seriamente en ir con ustedes a los Estados Unidos.
40:56Es decir, si usted acepta casarse conmigo.