Los deseos de innovar y ofrecer contenidos creativos han llevado a las televisoras a cometer demasiados errores en su programación o contenidos, tal y como sucedió con el canal TV5, de la televisión filipina, en donde se obligó a un niño de 6 años a bailar como striper ante la lente de la cámara, a pesar de que no quería hacerlo.
Es tal la polémica que desató el suceso presentado en la emisión "Willing Willie", encabezada por Willie Revillame, que incluso ya se dio la intervención de Corazon Soliman, secretaria de Bienestar Social, quien condenó los hechos, al calificarlos de humillatorios y de abuso emocional:
"Presionar para que niños realicen actos como imitar bailes sexuales de adultos a cambio de cierta cantidad de dinero y estar expuestos a la risa y al ridículo frente a cientos de personas, claramente traumatiza a los niños. Es una forma evidente de abuso infantil y no será tolerada por el Departamento de Seguridad Social y Desarrollo", sentenció la funcionaria.
Tras darse a conocer la postura del gobierno y la ciudadanía, el canal se vio obligado a elaborar un comunicado, en donde se disculpó por lo sucedido, aunque aseguró que las lágrimas del menor fueron actuadas, por lo que en ningún momento se le forzó a ser algo que no quisiera:
"Quería aparecer triste, pero no porque lo obligaran a ello, sino porque pensaba que el baile así lo requería y estaba interpretando el papel", comentó el canal acerca de su programa, el cual consiste en repartir premios en metálico, automóviles y otros regalos a los participantes a cambio de subirse al escenario a actuar.
A pesar de la controversia desatada, ésta no es la primera vez que el presentado se ve involucrado en un escándalo, ya que hace cinco años murieron más de 70 personas en una estampida ocurrida en la fila para participar en el programa que presentaba en ese entonces.
Es tal la polémica que desató el suceso presentado en la emisión "Willing Willie", encabezada por Willie Revillame, que incluso ya se dio la intervención de Corazon Soliman, secretaria de Bienestar Social, quien condenó los hechos, al calificarlos de humillatorios y de abuso emocional:
"Presionar para que niños realicen actos como imitar bailes sexuales de adultos a cambio de cierta cantidad de dinero y estar expuestos a la risa y al ridículo frente a cientos de personas, claramente traumatiza a los niños. Es una forma evidente de abuso infantil y no será tolerada por el Departamento de Seguridad Social y Desarrollo", sentenció la funcionaria.
Tras darse a conocer la postura del gobierno y la ciudadanía, el canal se vio obligado a elaborar un comunicado, en donde se disculpó por lo sucedido, aunque aseguró que las lágrimas del menor fueron actuadas, por lo que en ningún momento se le forzó a ser algo que no quisiera:
"Quería aparecer triste, pero no porque lo obligaran a ello, sino porque pensaba que el baile así lo requería y estaba interpretando el papel", comentó el canal acerca de su programa, el cual consiste en repartir premios en metálico, automóviles y otros regalos a los participantes a cambio de subirse al escenario a actuar.
A pesar de la controversia desatada, ésta no es la primera vez que el presentado se ve involucrado en un escándalo, ya que hace cinco años murieron más de 70 personas en una estampida ocurrida en la fila para participar en el programa que presentaba en ese entonces.
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