Angélica Vale cumplió el sábado muchos de sus sueños: se casó con Otto Padrón; Camila le cantó como regalo de bodas y los Joao actuaron en la fiesta de su enlace, como ella lo deseaba desde niña, ante cientos de amigos y familiares que fueron testigos del amor entre la actriz y su ahora esposo.
Fue una noche de ensueño, llena de romanticismo, buen humor y detalles que adornaron el Colegio de San Ignacio de Loyola Vizcaínas, ante la presencia de poco más de 900 invitados.
Y es que, como Angélica lo dijo, estaba enlazando su vida con un hombre que le robó el corazón cuando ella había jurado que no se casaría.
Asimismo, el novio declaró: "Más que emocionado, me siento afortunado. Éste es el comienzo de algo que va mucho más allá de una relación, queremos una familia. No creo que exista una novela que se compare a la fiesta y la ceremonia que hicimos".
Fue una noche de ensueño, llena de romanticismo, buen humor y detalles que adornaron el Colegio de San Ignacio de Loyola Vizcaínas, ante la presencia de poco más de 900 invitados.
Y es que, como Angélica lo dijo, estaba enlazando su vida con un hombre que le robó el corazón cuando ella había jurado que no se casaría.
Asimismo, el novio declaró: "Más que emocionado, me siento afortunado. Éste es el comienzo de algo que va mucho más allá de una relación, queremos una familia. No creo que exista una novela que se compare a la fiesta y la ceremonia que hicimos".
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