Además de un aspecto andrógino, David Bowie tenía una mirada peculiar: sus pupilas eran de tamaños distintos y los iris de dos colores diferentes.
En este vídeo te explicamos el porqué de esta característica física que añadía al artista aun más misterio.
En este vídeo te explicamos el porqué de esta característica física que añadía al artista aun más misterio.
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