La tripulación del carguero que ha chocado contra la escollera de Anglet (Francia) por el temporal marítimo ha tenido que esperar más de dos horas en el puente de mando a mecerd de olas gigantes. Han sido dos horas de angustia para los 11 tripulantes y el práctico del puerto de Baiona, rescatados con ayuda de helicópteros militares franceses y con vientos de superiores a 100 kilómetros por hora. Uno de los tripulantes se ha fracturado la nariz. Todos sufrían hipotermia y estaba en estado de shock. Pasaban las 10 de la mañana, cuando el carguero español Luno se estrellaba contra un dique en Anglet, junto a Baiona. El impacto lo partió en dos. Había salido de Bilbao, y estaba fondeado en el puerto por una avería eléctrica en el motor. Pero vientos superiores a 130 kilómetros por hora lo arrastraston hasta impactar contra las piedras. La fuerza del oleaje ha impedido iniciar, de momento, maniobras para rescatar los restos del naufragio. No hay riesgo de marea negra, según las autoridades francesas. El barco sólo lleva 127 metros cúbicos de fuel, pero se ha activado en la costa el plan anticontaminación.
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