El ADN de una taza llevó a la detención de la degolladora de Málaga

Para los que la conocen, Asunción era una mujer normal. La prefecta ama de casa, madre y abuela. La Guardia Civil la detenía ayer en el piso en el que vivía hace poca más de un año en la localidad mlagueña de Rincón de la Víctoría. La acusan de la muerte de Dolores Ruiz, una mujer de 70 años que aparecía degollada en la Cala del Moral.Según sus vecinos, Asunción hacía labores de costura para alguos conocidos, los mismos que hoy no podían dejar de sorprenderse de que la hayan detenido por este crimen. En los dos meses que han pasado desde el asesinato Asunción había cambiado de aspecto, se había cortado el pelo y se había teñido. Ricardo, el vecino del piso de arriba se encontraba minutos antes de la detención con el marido de Asunción. Cuando le preguntó que pasaba él le dijo que su mujer se había metido en un lio.Detrás del asesinto podría estar la deuda de 5.000 eruos que la ahora detenida había contraido con la víctima por la compra de unas joyas.