La ONU pide ayuda urgente para los rohinyás

  • hace 7 años
Ya son más de 420.000 los rohinyás huidos de Birmania a Bangladés en menos de un mes. Esta minoría musulmana busca escapar de la violencia en el estado birmano de Rakáin. Violencia condenada por la comunidad internacional, con Estados Unidos a la cabeza, que ha pedido a la ONU que intervenga en el conflicto.

Pero según las autoridades locales, toda violencia cesó a principios de septiembre: “Me alegra informar de que la situación ha mejorado. No se han reportado choques armados desde el 5 de septiembre. Por eso nos preocupa que no hayan disminuido las cifras de musulmanes que cruzan a Bangladés,” señaló el vicepresidente birmano Henry Van Thio

Desde Rakáin, la población se opone fuertemente a la vuelta de los rohinyás a Birmania, a los que acusan de la inseguridad reinante y de haber desencadenado la reciente violencia.

La mayoría de los refugiados huyen a Bangladés a través de la difícil zona fronteriza de Cox’s Bazar. Allí cerca de 200.000 personas viven todavía en las cunetas de las carreteras, frente a los 180.000 que han podido ser realojados en los campamentos existentes, gestionados por ONGs y por la ONU, que ha pedido con urgencia fondos para hacer frente a la crisis.