Alex Chinneck hace flotar el Covent Garden de Londres
- hace 10 años
Desde principios de octubre, el mercado londinense de Covent Garden se encuentra en el aire.
El artista Alex Chinneck ha querido representar este histórico mercado como si estuviese flotando. Las columnas de entrada parecen haber sido cortadas.
El objetivo de la instalación, asegura Chinneck, es aportar un poco de fantasía a la ciudad.
“Este trabajo está lleno de ilusión y de humor, creo que es bastante inspirador y parece que está provocando el efecto deseado en la gente”, dice el artista.
La mezcla de arquitectura y fantasía es el núcleo del trabajo de este joven artista británico.
Chinneck trabajó en esta instalación de Covent Garden durante ocho meses con la ayuda de un equipo formado por unas cien personas.
Una gran viga de acero escondida sostiene la estructura del edificio.
“Creo que debido al ambiente en el que nos movemos hoy, en lo que a medios de comunicación se refiere, es muy difícil sorprender, crear un impacto. Hoy estamos acostumbrados a ver de todo en la televisión, en las películas con tantos efectos especiales… Yo creo que este tipo de impactos físicos y esculturales nos ayudan a sorprender al público”, afirma.
Y parece que Chinneck ha alcanzado su objetivo.
“Es realmente fantástico. Me gustaría saber cómo lo hizo”, dice una señora al ver la instalación.
“Es genial, muy interesante, es como romper la arquitectura”, asegura un señor.
La obra de Alex Chinneck estará expuesta en el Covent Garden de Londres hasta finales de este mes.
El artista Alex Chinneck ha querido representar este histórico mercado como si estuviese flotando. Las columnas de entrada parecen haber sido cortadas.
El objetivo de la instalación, asegura Chinneck, es aportar un poco de fantasía a la ciudad.
“Este trabajo está lleno de ilusión y de humor, creo que es bastante inspirador y parece que está provocando el efecto deseado en la gente”, dice el artista.
La mezcla de arquitectura y fantasía es el núcleo del trabajo de este joven artista británico.
Chinneck trabajó en esta instalación de Covent Garden durante ocho meses con la ayuda de un equipo formado por unas cien personas.
Una gran viga de acero escondida sostiene la estructura del edificio.
“Creo que debido al ambiente en el que nos movemos hoy, en lo que a medios de comunicación se refiere, es muy difícil sorprender, crear un impacto. Hoy estamos acostumbrados a ver de todo en la televisión, en las películas con tantos efectos especiales… Yo creo que este tipo de impactos físicos y esculturales nos ayudan a sorprender al público”, afirma.
Y parece que Chinneck ha alcanzado su objetivo.
“Es realmente fantástico. Me gustaría saber cómo lo hizo”, dice una señora al ver la instalación.
“Es genial, muy interesante, es como romper la arquitectura”, asegura un señor.
La obra de Alex Chinneck estará expuesta en el Covent Garden de Londres hasta finales de este mes.