Londres: 48 horas de huelga en el metro ponen en dificultades a millones de pasajeros
- hace 10 años
El lunes por la noche comenzó un parón de 48 para protestar contra el plan de modernización y automatización de las taquillas del suburbano impulsado por el ayuntamiento, que en la práctica supondrá la supresión de casi un millar de empleos.
Las estaciones de dos líneas han amanecido con la persiana bajada, mientras que en el resto de las 11 que forman la red, la circulación era muy reducida. Para compensarlo, 268 autobuses han suplido al suburbano en los itinerarios más frecuentados.
Entre los pasajeros había distintos grados de comprensión:
“He tenido que coger un autobus porque mi parada de metro habitual, Sloane Square, estaba cerrada. Hay mucho enfado en las calles, te lo puedo asegurar. Todo el mundo en los autobuses, todo el mundo esta enfadado”, aseguraba un trabajador.
“Creo que tienen derecho a decir lo que quieran decir. Quizá no sea bueno para otra gente, pero creo que es la única forma de hacerse oír”, razonaba otra afectada.
La mayoría de los cuatro millones de usuarios diarios que tiene el metro londinense han debido recurrir a otras opciones de transporte, desde los autobuses, que han alcanzado un record de 8.000 en circulación, a opciones más limpias, como ir a pie o en bicicleta.
A los londinenses no les quedará más remedio que resignarse: el próximo lunes arrancará un nuevo parón de 72 horas.
Las estaciones de dos líneas han amanecido con la persiana bajada, mientras que en el resto de las 11 que forman la red, la circulación era muy reducida. Para compensarlo, 268 autobuses han suplido al suburbano en los itinerarios más frecuentados.
Entre los pasajeros había distintos grados de comprensión:
“He tenido que coger un autobus porque mi parada de metro habitual, Sloane Square, estaba cerrada. Hay mucho enfado en las calles, te lo puedo asegurar. Todo el mundo en los autobuses, todo el mundo esta enfadado”, aseguraba un trabajador.
“Creo que tienen derecho a decir lo que quieran decir. Quizá no sea bueno para otra gente, pero creo que es la única forma de hacerse oír”, razonaba otra afectada.
La mayoría de los cuatro millones de usuarios diarios que tiene el metro londinense han debido recurrir a otras opciones de transporte, desde los autobuses, que han alcanzado un record de 8.000 en circulación, a opciones más limpias, como ir a pie o en bicicleta.
A los londinenses no les quedará más remedio que resignarse: el próximo lunes arrancará un nuevo parón de 72 horas.