Se cumplen tres años del inicio del conflicto que ha devastado Siria

  • hace 10 años
Hace 1.095 días se produjeron los primeros enfrentamientos, después de que fuerzas del régimen del presidente Bachar al Asad disparasen contra manifestantes que pedían su marcha . Desde entonces, los combates entre rebeldes y tropas leales al gobierno han dejado más de 130.000 fallecidos e incontables heridos.

De momento, no hay visos de que los enfrentamientos se detengan. Al Asad se aferra al poder. Pese a que su salida es la condición principal de los opositores y gran parte de la comunidad internacional para llegar a un acuerdo de paz, todo apunta a que el actual mandatario se presentará a la reelección en unos comicios, aún sin fecha, que deben celebrarse antes de verano.

El único avance plausible ha sido la destrucción de su arsenal de armas químicas. Acusado de utilizarlas contra población civil, al Asad accedió a su desmantelamiento en un acuerdo, impulsado por Rusia, con el que evitó una represalia militar estadounidense que se daba por segura.

Poca solución para un conflicto que amenaza el futuro del país. Junto con los fallecidos y heridos, los enfrentamientos han dejado ocho millones y medio de desplazados que intentan escapar de la destrucción, el hambre y la muerte.

Seis millones se encuentran en territorio nacional, mientras que el resto han huido a países vecinos como Turquía (600,000), el Líbano (750,000), Irak (200,000), Egipto (120,000) o Jordania (660,000). Además, una gran parte de estos desplazados son menores, que ven como su porvenir se esfuma como el humo que surge de las ruinas de un país devastado que llevará mucho tiempo reconstruir. Están a punto de convertirse en una generación perdida.